Hermosas tradiciones del Día de Muertos mexicano

  • 02/11/2014 01:00
Cada 2 de noviembre los mexicanos celebran el Día de Muertos, una fecha muy importante dentro del calendario de festejos del país

El 2 de noviembre se celebra en México el Día de Muertos, una festividad de origen prehispánico donde la cultura en torno a la muerte toma un significado más familiar para los mexicanos.

La fiesta de los muertos, lejos de ser un momento melancólico o triste, es una verdadera celebración que incluye mariachis, ofrendas de las comidas y bebidas preferidas de los difuntos y decoración de tumbas, tradiciones que asombran al resto del mundo, pero que son parte de una de las fechas más importantes en el calendario de los mexicanos.

El día de la celebración, familias enteras acuden a los cementerios para beber y comer y escuchar música que al difunto le gustaba, además de adornar las tumbas con la hermosa flor cempásuchil o flor de muertos, que se caracteriza por su llamativo color amarillo.

Los niños reciben presentes a los que se les llama "calaveritas", además de que se preparan  dulces con motivos fúnebres, tal como el pan de muerto, horneado con figuras de huesos y espolvoreado con azúcar roja (morena), que recuerda el color de la sangre.

Las imagenes de calaveras aparecen por todas partes; se han consolidado como símbolo del país desde que el artista José Guadalupe Posada las pintó con elegantes vestidos. A partir de sus grabados surge la Catrina, figura insigne del Día de Muertos en México.

Incluso existen rituales donde los huesos de los muertos son exhumados y limpiados cada 2 de noviembre, como en el cementerio de Pomurch, una región maya.

A la muerte se le rinde culto, y no está fuera de orden bromear un poco con respecto al tema. Octavio Paz, el único premio Nobel de Literatura mexicano, dijo alguna vez: “Nuestro culto a la muerte es culto a la vida”.

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