Aprender a cacarear

En muchas ocasiones, diversos clientes, me comentan que desean trabajar en “Aprender a cacarear”; al preguntar que significa cacarear, me comentan que “debo aprender a vender mejor mis logros“. Esto se ha convertido en un gran desafío de algunas personas inmersas en un mundo laboral tan competitivo.

Ahora bien, de donde surge todo esto de “cacarear”; ¿Qué se dicen las gallinas cuando cacarean?

Puede que no te hayas dado cuenta, pero las gallinas se comunican entre sí emitiendo distintos tipos de sonidos. Científicamente se han distinguido 33 cacareos diferentes  y cada uno de ellos tiene un mensaje concreto.

Cuando una gallina está contenta y satisfecha emite un cacareo característico.

Cuando dentro del gallinero se escucha un grito de una gallina seguido de un silencio total, está avisando a todo el grupo de que hay un depredador  acechando.

El grito es diferente si se trata de un depredador aéreo (un halcón, por ejemplo) o un depredador terrestre (una culebra, etc.).

Uno de los sonidos que todos conocemos es  el típico que la gallina hace después de poner un huevo (po, po, po… pa, pa). Está comunicando al grupo su orgullo de haberlo puesto y, si escuchamos atentamente, oiremos al resto del grupo responder como si de alguna manera estuviesen dándole la enhorabuena.

Cuando la gallina se encuentra dentro del ponedero incubando los huevos,  mostrará un gruñido si algo o alguien intenta molestarle.

El lenguaje corporal también forma parte del sistema de signos con el que las gallinas se comunican. Elevando su a cabeza y erizando las plumas para mostrar sus logros.

La naturaleza es tan sabia, que nos regalas hermosos ejemplos de valor, amor propio, confianza y respeto a nosotros mismos.

Y es así como de forma natural, auténtica y noble las gallinas se muestran en el “gallinero”, orgullosas de sus logros, sin prejuicios, sin culpas y sin la necesidad de validación de las otras gallinas.

Ahora bien, volviendo al comentario de algunos clientes, sobre aprender a “cacarear”, y extrayendo los aprendizajes de las gallinas, podría entonces interpretar que “cacarear” significaría para algunos humanos:

- Compartir con otros de manera natural, auténtica y compasiva, el resultado producto de nuestro esfuerzo, valorando los resultados obtenidos, sintiéndonos orgullosos y transmitiendo e inspirando a los demás, para que ellos también pueden alcanzar lo que se proponen.

- Valorar todo lo bueno que estamos haciendo, sabiendo que surge de nuestro interior, lo cual nos da confianza y respeto hacia nosotros mismos.

- Mostrarnos contentos y atrevernos a ser felices y dar todo lo mejor de nosotros para que los que nos rodean se sientan del mismo modo.

- Alentar al otro a que no teman a mostrar sus cualidades o talentos que los distinguen y que lo caracterizan del resto.

- Reconocer nuestra luz propia y dejar que esta luz brille de manera natural, sin autosabotearnos.

- Alertar al otro de los riesgos y peligros que podrían llevar el aislamiento, ya que, en un mundo tan desigual, todo es juzgado por su apariencia, lo que no se ve, no cuenta.

-Aceptar no perdernos en el anonimato de la multitud o ser sepultados por el olvido.

Si de esto se trata “cacarear” tenemos mucho que aprender de las gallinas ya que lo hacen de manera natural, genuina y auténtica.

Existe un proverbio italiano que dice “El que quiera disfrutar de los huevos debe soportar el cacareo de las gallinas”.

Como coach, acompañamos a nuestros clientes, a través de un proceso creativo y estimulante, trabajando estos desafíos de comunicación, lo que en sus propias palabras serian “aprender a cacarear”.

Les comparto estas líneas que representan mi forma de ver el mundo desde “mi mirada”, tomando palabras propias, así como inspiradas por otros, desde un lugar de humildad y empatía, aceptando el desafío de que para poder pensar debo aceptar el riesgo de que podría ser ofensivo a otros, confiando de que este no sea tu caso.