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- 20/02/2020 00:00
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Sonikku za Hejjihoggu es un erizo azul humanoide que Sega produjo para competir con el fenómeno de Mario, de la casa Nintendo, siendo los personajes más populares de la era de las primeras consolas de la generación de la década de 1990.
Antes de Sonic, existía Alex Kidd, quien sería el niño llamado al desafío desde 1986; sin embargo, desde su gran debut, el asunto cambió y tras el éxito del veloz anamórfico, este animalillo conquistó legiones de fanáticos en todo el mundo, consolidando su fama con el estreno de su versión de cine, que ha recaudado más $115 millones en su taquilla global, destronando al detective Pikachu como el mejor estreno de adaptaciones cinematográficas basadas en videojuegos.
De hecho, su versión de cine tiene una trama muy sencilla: Sonic, de incógnito en la Tierra, se une al alguacil de la ciudad Tom Wachowski para escapar del gobierno y de paso derrotar a Robotnik (Jim Carrey), que quiere robar sus poderes.
Lo cierto es que la opinión de los críticos ha sido mixta en sus observaciones respecto al producto final, que en algunos casos lo consideran “un milagro de película, o como poco, una inesperada sorpresa”, pero en otros, un producto cuyo jugo creativo se agota conforme avanza el relato.
John de Fore, de The Hollywood Reporter, explicaba en su crítica al filme que se trata de: “un entretenimiento ligero que no ofenderá a nadie (...) Fowler consigue que la historia se desarrolle con eficacia, y la simpatía natural de Marsden impide que la sencillez narrativa se haga pesada”.
Roger Moore, de Movie Nation, expresó que “el producto final no es siquiera remotamente tan malo como uno podría temer”.
Mientras que los fanáticos del filme aplaudieron los diseños, las animaciones y el sentido del humor que se maneja en cada aparición de Sonic y su interacción con el personaje que interpreta James Mardsen, aunque recalcan que lo mejor de la cinta es la participación del comediante Jim Carrey como el archienemigo del corredor azulado.
Lo interesante de este proceso se dio cuando presentaron el primer trailer del filme y la fanaticada atacó la forma como presentaron a Sonic, con un diseño nada agradable a la vista de la audiencia, por lo que el equipo de producción movió su estreno para corregir las fallas y seguir el proyecto, complaciendo a los seguidores del personaje.
Tenía dientes humanos, largas extremidades y ojos pequeños, que hacían de él un monstruo completamente ajeno para los seguidores de la franquicia de Sega.
Este detalle incluso llegó a incomodar a Jim Carrey, que ahora dice retractarse, por la inusitada conquista de taquilla, durante su estreno.
En sí, Carrey explicó a los medios: “Resultó ser una colaboración en la que todos estaban involucrados en la creación. Creo que todos se sintieron bien al final porque Jeff Fowler no tenía ningún ego involucrado. Él tan solo dijo 'Estas personas han crecido con Sonic y es importante para ellos que lo hagamos bien'. Y creo que es una película mucho mejor gracias a eso”.
Al final, Jeff Fowler, el propio director de la cinta, explicó vía Twitter que se sentía muy agradecido por el éxito de su película. "Han llevado a este pequeño erizo azul a alturas épicas. No podríamos haberlo hecho sin los fans... Gracias por el amor y el apoyo. El futuro luce brillante para la mancha azul".