Membresía de partidos políticos mantiene tendencia al alza

Mientras que los resultados de encuestas conocidas y posiciones expresadas por los líderes de opinión apuntan al desprestigio y el colapso de los partidos políticos, los números del Tribunal Electoral revelan que la cantidad de inscritos en estas organizaciones políticas mantienen una tendencia a seguir creciendo de forma exponencial. Una diferencia significativa con lo que se vive en otros países.

La realidad es tal, que el último conteo del Tribunal Electoral señala que cerca de la mitad de los panameños es miembro de un partido político, ya sea de gobierno u oposición.

Incluso hay nuevos partidos políticos como Realizando Metas (RM), nacido de las entrañas de Cambio Democrático y de la mano del mismo líder, Ricardo Martinelli que siguen creciendo.

El partido Panameñista y el Partido Revolucionario Democrático (PRD), uno de gobierno y otro de oposición, adversarios históricos, se mantienen a la cabeza de los inscritos y entre ellos, se asoma la considerada tercera fuerza.

El PRD, el más grande de la historia de la República, acumula 611,646 adherentes, seguido de Cambio Democrático (CD) con 297,908 y el Partido Panameñista con 275, 137.

Además están las agrupaciones como el Partido Popular y Partido Popular y el Movimiento Liberal Republicano Naionalista (Molirena). que aunque pequeños, se resisten a desaparecer,

Y el FAD, una vez más intenta resurgir de las cenizas, tras tres derrotas electorales en las que una tras no logran los votos suficientes para subsistir.

Hasta las 7:30 a.m. del viernes, un total de 1 millón 526 mil 780 panameños forman parte de los diversos partidos políticos legalmente reconocidos y en formación, de acuerdo con un informe de la Dirección Nacional de Organización Electoral.

RM tiene 99,017 inscritos, el Molirena posee 97,397, mientras que Alianza registra 26,194 y el Partido Popular (PP) mantiene 20,439.

De los colectivos en formación, el Partido Alternativa Independiente Social (PAIS) cuenta con 39,482 inscritos, Movimiento Otro Camino (MOCA) con 37,532, Unión Nacional Independiente (UNI) con 12,276, Frente Amplio por la Democracia (FAD) con 7,168 y el Partido Torrijista Revolucionario con 734.

Juan Diego Alvarado, en su libro ¿Crisis o malestar?: La representación política y el sistema de partidos ante el surgimiento de las candidaturas por libre postulación, señala que “desde que tenemos registros oficiales del nivel de adherentes de partidos políticos, la tasa de afiliación ha sido alta”.

“Hacia las elecciones de 1999, a casi 10 años de la Invasión de los Estados Unidos que propició la transición hacia la democracia de partidos, el nivel de afiliación era del 41% de la población electoral. Para las elecciones de 2004, a cinco años del perfeccionamiento del Estado panameño tras la reversión del Canal de Panamá y el territorio de la Zona, la membresía partidista saltó diez puntos arriba, hasta alcanzar 51.9% y nunca bajó de esos niveles, por lo menos durante períodos electorales.

Un análisis más meticuloso que muestre las fluctuaciones en membresía, mes por mes, probablemente nos retrate dinámicas más finamente detalladas, pero esto es un proceso que consume mucho tiempo.

El punto más alto que se registra durante años electorales fue de 56.6% del padrón en 2009. A pesar del incremento del malestar con la representación, a pesar de los cambios y continuidades del sistema de partidos, los últimos quince años la mayoría simple del electorado se ha encontrado inscrita en partidos políticos”.

La investigación de Alvarado, con el apoyo del Instituto de Estudios Democráticos, destaca que para las elecciones generales de 2019, el padrón electoral final, o la lista electoral, fue de 2,757,823 electores. De este total, 50.2% eran mujeres y 49.8%, hombres. Los datos del Tribunal Electoral muestran que el 51.7% de todos los electores está inscrito en un partido político.

En 1999, el 41.1% de los electores que participarían en las elecciones de ese año estaban afiliados a un partido político. Así, desde las elecciones de 2004, el porcentaje del padrón que estaba inscrito en algún partido político ha superado la mayoría simple del electorado.

Colocando el caso panameño en perspectiva comparada, las dimensiones de la afiliación partidista, no solo como uno de los aspectos organizativos clave de los partidos políticos, pero también como una manifestación de los vínculos y el arraigo que los partidos tienen en la sociedad, se perfila como un campo fértil de estudio hasta la fecha poco explorado, destaca el investigador.

Las candidaturas independientes en el 2019 tuvieron su mejor momento. En esa elección 902 personas buscaron un puesto de elección popular, triplicando la participación de las elecciones anteriores.

Esta participación estuvo inculada en buena medida con una campaña denominada #NoALaReelección y focalizada hacia las elecciones legislativas dentro de una coyuntura de crisis de legitimidad de las élites políticas.

Alvarado, al concluir la investigación que inició antes de las elecciones, plantea dos variables de la gran cantidad de candidatos independientes.

La primera es la crisis de legitimidad de los partidos políticos, producto de una coyuntura crítica en la que las élites políticas han visto su credibilidad socavada con escándalos de corrupción internacionales y nacionales

La segunda es, en general, la leve apertura producto de las reformas electorales ya que producto de una demanda de inconstitucionalidad, se permite a personas inscritas en partidos otorgar firmas de respaldo a candidaturas independientes sin tener que renunciar a sus respectivos partidos.

Sobre los candidatos independientes, según las cifras oficiales presentadas en el libro, destaca que un total de 609,125 firmas fueron aceptadas para candidaturas presidenciales independientes y 448,086 firmas para candidaturas para diputados, lo que corresponde, respectivamente a 22.1% y 16.2% del electorado.