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- 27/07/2012 02:00
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PANAMÁ. Tres huevos estrellados en los escritorios de los diputados Jorge Alberto Rosas y Aris De Icaza, y en el pasillo entre las curules del pleno legislativo, frenaron al ministro de Seguridad, José Raúl Mulino.
El ministro exponía su proyecto de reforma al Código Penal para sancionar la falsificación de permisos para marinos. Y Mónica García, la madre de la desaparecida Mónica Serrano, reclamaba a los diputados por la dejadez estatal para dar con el paradero de su hija.
‘Mientras ustedes tienen a sus hijos en casa, yo vivo en 9 años’, gritó García desde las gradas.
En tanto, los diputados hicieron silencio. Con furia, la mujer exigía a la Asamblea una respuesta. ‘Es una obligación que el Estado busque a mi hija’, agregó.
Tras la breve protesta, el presidente del legislativo, Sergio ‘Chello’ Gálvez, la mandó a sacar. Llamó tres veces a la Seguridad, pero nadie respondió. Quería seguir la sesión del pleno, en el que habían invitados de alto nivel: además de Mulino, los ministros de Trabajo y Economía, Alma Cortés y Frank De Lima, respectivamente, presentaron los proyectos que ponen en vigencia el Código de Trabajo en los puertos de Balboa y Cristóbal, y el de presupuesto para 2013.
Tras el incidente, Gálvez anunció que suspendería la seguridad a sus colegas, para destinarla al pleno.