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- 01/07/2021 13:45
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Ante una Asamblea Nacional prácticamente militarizada diversas organizaciones sociales se manifestaron este jueves 1 de julio, cuando se cumplen dos años del gobierno del presidente Laurentino Cortizo y tiene lugar la renovación de la junta directiva de la Asamblea Nacional.
Concentrado en la capitalina plaza 5 de Mayo, más de una treintena de gremios de trabajadores, campesinos, estudiantes, ambientalistas y docentes, protestaron contra de la políticas del gobierno, quién presentó su discurso a la nación ante el pleno de la Asamblea Nacional.
Los grupos llegaron en marcha desde la Plaza Porras portando banderas, pancartas y un un amplio abanico de demandas que iban desde: la respuesta del Ejecutivo a la pandemia, la corrupción, la posible privatización de la Caja del Seguro Social, el cuestionamiento a las nuevas disposiciones mineras, el rechazo a la renovación del polémico contrato con Panama Ports, entre otras exigencias.
Las tensiones se elevaron luego de que en medio de la protesta algunos manifestantes trataran de mover una cerca metálica puesta por la Policía, acción que fue respondida con disparo de balas de goma y gas pimienta por unidades antimotines de las fuerzas de seguridad.
Tras la represión las manifestantes se refugiaron en diferentes calles cercanas a la plaza, dispersándose la protesta. Inmediatamente unidades policiales asumieron el control total del área, clausurándose las entradas del metro en la 5 de mayo.
"Allá dentro (de la Asamblea Nacional) están vertiendo las mismas mentiras de todos los años desde que se conoce la fundación de los partidos tradicionales, y este pueblo está anuente de que lo que están vertiendo (en el pleno) no tienen absolutamente nada que ver con la realidad nacional", manifestó la dirigente universitaria, Ileana Corea.
Entre las consignas también hubo espacio en favor de la constituyente originaria, denunciando que la iniciativa de la constituyente paralela, como un proyecto de los "partidos y grupos económicos del status quo".
"Estamos protestando por la gran desigualdad que se ha profundizado durante está pandemia aunadas a esa políticas públicas antipopulares", agregó la dirigente estudiantil.
Fernando Ábrego, secretario general de la Asociación de Profesores de la República de Panamá (Asoprof) indicó que el sector magisterial salió a protestar, entre otras cosas, por la falta de transparencia en el renovación del contrato de Panama Port, que calificó de "lesivo" a los intereses de la soberanía nacional.
Entre los grupos ambientalistas presentes reiteraron su postura en contra de la minería metálica, por su alta contaminación y las afectaciones irreversibles a las comunidades donde se desarrolla esta industria.
"Hay un discurso contradictorio del Gobierno que impulsa un supuesto turismo sostenible y luego tiene una política minera destructiva que atenta contra los ecosistemas”, sostuvo Lilian Guevara, miembro del Centro de Incidencia Ambiental de Panamá (CIAM), una de varios grupos ambientales y campesinos que llegaron a la capital desde Veraguas, Los Santos y Coclé.
"Nuestra posición es que la franja tropical lluviosa en Panamá no tiene la capacidad para albergara una industria tan letal como la minería metálica (...) los daños ecológicos y sociales son enormes en comparación con el bajo rédito económico que ofrece esa industria", dijo Guevara.
Los ecologistas exigieron que el Gobierno establezca una moratorio minería permanente, consideran que la posible concesión a Minera Panamá no ha sido transparente.
Entre los gremios sindicales estuvieron presentes también la Federación Unitaria de la Clase Trabajadora (Fuclat) y el Sindicato Único Nacional de Trabajadores de la Industria de la Construcción y Similares (Suntracs), estos últimos realizaron manifestaciones simultaneas en Chiriquí, Bocas del Toro, Veraguas y otros puntos del país.
Luego de que la manifestación fuera reprimida en la 5 de mayo, estudiantes de la Universidad de Panamá volvieron a este centro de estudios donde también hubo protestas y enfrentamientos con la Policía Nacional.