Irán planea tener buques de guerra a finales de 2023 en el Canal

Irán está mirando a América. La presencia iraní en América Latina se expande tal como lo hecho China. Ya el país, que tiene conflictos con Estados Unidos, ha logrado tratados con Nicaragua, Venezuela, Bolivia y Brasil.

El siguiente punto ya está fijado: es Panamá con su Canal, la vía interoceánica que conecta el Atlántico y Pacífico. Una manera de desafiar a Estados Unidos, país que tiene una gran presencia en la región.

“La armada del ejército ha estado presente en todos los estrechos estratégicos del mundo hasta la fecha, y no hemos estado presente en solo dos estrechos, y estaremos presente en uno de estos estrechos este año”, aseguró el comandante de la Armada de Irán, el contralmirante Shahram Irani. “Planeamos estar presente en el Canal de Panamá”, afirmó.

El anuncio de Irán de llegar a las aguas de la vía interoceánica, por el que pasa el 5% del comercio mundial, se produce días después del tercer aniversario de la asignación del destacado general iraní Qasem Soleimani, quien murió en un ataque dirigido con aviones no tripulados por parte de Estados Unidos el 3 de enero de 2020.

Joseph Humire, un analista de seguridad nacional que se enfoca en temas latinoamericanos como director ejecutivo del grupo de expertos del Center for a Secure Free Society, le dijo al medio conservador The Washington Free Beacon que Irán ha estado sentando las bases para este tipo de viaje al realizar ejercicios conjuntos con aliados como Rusia y China. Dos naciones que también han ido estrechando sus lazos con países latinoamericanos.

Felipe Camargo, mayor retirado panameño, sostiene que las movidas que se están haciendo son estrategias de aliados de países de Rusia.

“Acá no estamos lo suficientemente organizados ni preparados para crear una fuerza e inteligencia para contrarrestar esos aparatos de inteligencia de esos países que nos tienen en la mira”, precisó Camargo, quien advierte que se debe abrir los ojos, porque Panamá se está convirtiendo en un objetivo de China, Irán e India.

El mayor retirado precisó que se debe reaccionar frente a este evento.

Para Humire, citado en el medio estadounidense, la intención de Irán “siempre ha sido tener una presencia militar en América Latina, por lo que no sorprende en absoluto que su armada anuncie que hará movimientos en el Canal de Panamá”.

La presencia de los iraníes en América Latina viene germinando poco a poco y lo que genera alarma en ciertos analistas es el vínculo de ese país con otros clasificados como gobiernos autoritarios.

Durante la toma de posesión del presidente de Colombia, Gustavo Petro, el vicepresidente de Irán, Mohammad Hosseini, participó.

Durante ese viaje, Hosseini también se reunió con el canciller brasileño Carlos Alberto Franco Franca.

La Cancillería panameña, por su parte, no ha emitido ni una palabra sobre este tema. Se mantiene en la posición que el Gobierno de Irán no ha emitido un pronunciamiento oficial al respecto.

Con el tratado concerniente a la neutralidad permanente del Canal de Panamá y al funcionamiento del Canal de Panamá, firmado entre Panamá y Estados Unidos el 7 de septiembre de 1977, nuestro país declaró la neutralidad de la vía para que, tanto en tiempo de paz como en tiempo de guerra, este permanezca seguro y abierto para el tránsito pacífico de las naves de todas las naciones en términos de entera igualdad, de modo que no haya contra ninguna nación ni sus ciudadanos o súbditos discriminación concerniente a las condiciones o costes del tránsito ni por cualquier otro motivo, y para que el Canal y consecuentemente el istmo de Panamá no sea objetivo de represalias en ningún conflicto bélico entre otras naciones del mundo.

El artículo III establece, en su acápite “e”, que las naves de guerra y naves auxiliares de todas las naciones tendrán en todo tiempo el derecho de transitar por el Canal, independientemente de su funcionamiento interno, medios de propulsión, origen, destino o armamento, sin ser sometidas como condición del tránsito, a inspección, registro o vigilancia.

No obstante, podrá exigirse a dichas naves que certifiquen haber cumplido con todos los reglamentos aplicables sobre salud, sanidad y cuarentena. Además, dichas naves tendrán derecho de negarse a revelar su funcionamiento interno, origen, armamento, carga o destino.

Sin embargo, se podrá exigir a las naves auxiliares la presentación de garantía escrita, certificada por un funcionario de alta jerarquía del Gobierno del Estado que solicitare la exención, de que tales naves pertenecen a dicho Estado o son operadas por él y que en ese caso son utilizadas solo para un servicio oficial no comercial.