Tras las huellas de Victoriano Lorenzo

Don Ricardo Perez Domínguez, presidente de la Fundación para la Preservación del Patrimonio Histórico del Casco Antiguo (Fuppahisca), me dio la misión de encontrar un buen orador para el aniversario del fusilamiento del general Victoriano Lorenzo, celebrado el pasado 15 de mayo. Me pidió que fuera un excelente orador.

Mi búsqueda incesante entre la intelectualidad istmeña me llevó a dialogar con una mujer abogada, directora de eventos históricos y poseedora de profundos sentimientos patrióticos: era Elena Porras, bisnieta del tres veces presidente de Panamá, Belisario Porras. La tarea que le asigné fue esta: “Elena, vas a ser la oradora en el aniversario del fusilamiento del general Victoriano Lorenzo”.

“No queremos que hables de lo que ya conocemos de Victoriano. Mejor háblanos de la íntima relación entre Belisario y Victoriano”, y con gallardía, como si la hubiesen emplazado, me contestó: “¡Acepto!”. Fue así como encontré la excelencia.

Elena inmediatamente consiguió los siguientes recursos humanos, entre sus amigos: Jair Ruglianchi excelente técnico, Domingo Díaz, maestro de enseñanza superior en la Universidad Regional de Los Santos, quien fue maestro de ceremonias en el homenaje, vestido frac de cola, don Rodrigo Chiari, quien atendió lo referente a ofrendas florales, protocolo y coordinación tras bastidores, además de Gina Lim Yueng y Blanca Silva.

La invocación religiosa estuvo a cargo de fray Javier Mañas, párroco de La Merced, quien hizo alusión muy sensible al fusilamiento de Victoriano. El maestro de ceremonia llamó al vicepresidente ejecutivo de Fuppahisca, Alberto Luis Tuñón Núñez, a hacer uso de la palabra. Con vehemencia dejó claro que: Fuppahisca no preserva el Patrimonio Histórico del Casco Antiguo con cemento, arena, piedra. Lo hace con homenajes igual al de Victoriano, tratando de preservar nuestra memoria histórica.

Dio testimonio de su amistad con el doctor Eusebio Leal, historiador de La Habana, un hombre que fue embajador itinerante de la Unesco.

Historiador, antropólogo, arqueólogo, filósofo, profesor universitario, poseedor de más de 40 condecoraciones y quien pudo investigar en los archivos de el Vaticano. Señaló Tuñón que el doctor Leal al ver las gárgolas, las mansardas, los ladrillos, balcones, puertas y ventanas del Centro Histórico le dijo: “Beto, Panamá tiene el Casco Antiguo más rico de América”. Aquí hay influencia española, francesa y caribeña. También, Eusebio en Portobelo, escarbando en la arena encontró cerámica española blanca con azul.

Tuñón terminó anunciando la organización de un grupo de guías turísticos con muchachos desocupados del barrio, quienes serán investigados por trabajadoras sociales, con su récord policivo a mano.

Fernando Díaz, director de la Oficina del Casco Antiguo (OCA), destacó cómo esa oficina incidía en la puesta en valor del Casco Antiguo, también expuso los logros en el trabajo diario y la posibilidad de grandes sinergias con Fuppahisca.

La excelencia que buscaba Fuppahisca quedó plasmada en la participación de la Lic. Porras al momento de pararse frente al podio. En una presentación llena de seguridad, aplomo, la mirada fija hacia los presentes. Elena comenzó sus palabras con un gran sentimiento, producto de la sensación de estar parada exactamente donde Victoriano fue asesinado por las hordas conservadoras colombianas.

La participación de Elena fue algo diferente, con música a tono con la solemnidad del acto y con efectos especiales. La temática desarrollada fue algo diferente, era más bien un resumen de la vida de Victoriano, desde su nacimiento en 1867, su infancia y adolescencia campesina, un recorrido por sus diferentes edades hasta los 22 años cuando fue apresado y juzgado por un jurado donde los acusadores y defensores eran del mismo Partido Conservador. Al momento del fusilamiento las palabras de Elena callaron y se escuchó el chirrido de las puestas de hierro de la celda.

Se escuchó la descarga de los fusiles en una grabación tétrica que hizo temblar al auditorio. Así acabó Victoriano Lorenzo después de que fue acorralado por los incidentes de la Guerra de los Mil Días, en los cuales se vio envuelto víctima de la deslealtad de los partidos políticos que no valoraron la lucha por la cual él se incorporó.

Frenética, temblorosa, sudando, lo sé porque yo estaba a un costado del escenario, Elena terminó su desgarradora protesta por el vil asesinato de un hijo del pueblo y además por el olvido en que se mantiene su egregia figura rescatada anualmente por Fuppahisca.

La cantautora Ana Gloria Ameglio alegró la solemnidad del ambiente cantando 'Canajagua azul', un lamento relacionado con el caminar de Victoriano por nuestras montañas.

Le correspondió al poeta de la décima, 'Cholo' Bernal recorrer con el auditorio los caminos del primer guerrillero de América.

La Junta Comunal Victoriano Lorenzo de San Miguelito se hizo presente con su representante Sheila Grajales, quien expuso los logros de su gestión y proyecciones futuras.

Su personal tomó la presión arterial de los invitados y atendió el brindis final.

El toque de silencio fue la máxima ofrenda de respeto y admiración al general Lorenzo. Hubo lágrimas, las cuales se juntaron a la todavía presente 'sangre de Victoriano' y allí se convirtieron en una especie de 'agua bendita' para ser derramada sobre la cabeza de quienes deben mantener vigente la figura del primer guerrillero de América vigente ¿Como? Erigiéndose una estatua que recuerde su grito de combate “La pelea es peleando” y 'Pan y tierra para el pueblo'.

La Guardia Presidencial hizo 21 descargas de rifle en honor del general fusilado en ese mismo lugar. El trinar de las aves sacó del trance mental a los presentes, en un concierto a varias voces de ellos. Así se rompió el silencio sepulcral que había en el ambiente.

Acompañados por cadetes de la Columbus University desfilaron a colocar ofrendas florales: el presidente de Fuppahisca, la gobernadora Carla García, Belisario Porras, presidente de la Fundación Belisario Porras, Imelda Berguido, heroína de la siembra de banderas de 1958, Sheila Grajales, representante. del corregimiento Victoriano Lorenzo, capitana Tomy Herron de la compañía Victoriano Lorenzo, y el capitán Horacio Freeman de la junta directiva de la Fundación General Tomás Herrera.

Fuera del programa y en un patriótico gesto de panameñidad, subió a escena Albalyra Franco de Linares quien declamó un poema de su autoría dedicado a Lorenzo.

Las gloriosas notas de nuestro himno nacional pusieron fin al homenaje; fue cantado con un fuerte vigor, señal de la satisfacción de los asistentes al acto que fueron invitados a un brindis en el área de los bustos de los Zapadores del Canal, mudos testigos de este homenaje anual que Fuppahisca rinde al primer guerrillero de América.

Allá cerca del obelisco, sobre el que descansa el gallo francés, estaba extenuada y jadeante por el esfuerzo que hizo como organizadora, y directora del homenaje a Victoriano Lorenzo, la Lic. Porras recuperándose del esfuerzo realizado.

Diciéndole quizás a su bisabuelo quien inauguró la Plaza de Francia: ¡Dr. Porras, he cumplido!