La reunión de este miércoles 13 de noviembre en la Casa Blanca entre el presidente saliente de Estados Unidos, Joe Biden, y el mandatario electo, Donald...
- 24/11/2019 00:00
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Reportes estadísticos del Ministerio Público (MP) detallan que 113 mujeres han sido asesinadas en el último quinquenio, desde 2014, cuando empezó a regir la Ley 82, que tipifica el delito de femicidio y la violencia contra la mujer.
Las agrupaciones de derechos humanos utilizan los términos femicidios y feminicidios para la violencia contra la mujer. Desde la década de 1970 el término empezó a tener relevancia. Sin embargo, aún se confunde o se tiene la idea que el femicidio y feminicidio son términos iguales, pero no lo son.
La Real Academia Española define el feminicidio como el asesinato de una mujer a manos de un hombre por machismo o misoginia. En tanto, femicidio lo define como feminicidio.
El proceso de conceptualización del fenómeno de la muerte violenta de una mujer por ser mujer adquirió importancia en la década de 1970 cuando la expresión “femicidio” fue acuñada por Diana Russell, escritora y activista feminista.
Esta expresión surge como alternativa al término neutro de “homicidio con el fin político de reconocer y visibilizar la discriminación la opresión, la desigualdad y la violencia sistemática contra la mujer que, en su forma más extrema, culmina en la muerte.
De acuerdo con la definición de Russell, el femicidio se aplica a todas las formas de asesinato sexista, es decir, “los asesinatos realizados por varones motivados por un sentido de tener derecho a ello o superioridad sobre las mujeres, por placer o deseos sádicos hacia ellas, o por la suposición de propiedad sobre las mujeres.
En desarrollo del concepto anterior, la investigadora mexicana Marcela Lagarde acuñó el término “feminicidio”.
Lo definió como el acto de matar a una mujer solo por el hecho de su pertenencia al sexo femenino pero confirió a ese concepto un significado político con el propósito de denunciar la falta de respuesta del Estado en estos casos y el cumplimiento de sus obligaciones internacionales de garantía, incluso el deber de investigar y de sancionar.
Por esta razón, Lagarde considera que el feminicidio es un crimen de Estado.
Se trata de “una fractura del Estado de derecho que favorece la impunidad”.
El concepto abarca el conjunto de hechos que caracterizan los crímenes y las desapariciones de niñas y mujeres en casos en que la respuesta de las autoridades sea la omisión, la inercia, el silencio o la inactividad para prevenir y erradicar estos delitos.
Ambas definiciones anteriores son parte de una publicación que fue elaborada por la Oficina Regional para América Central del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH) con el apoyo de la Oficina Regional para las Américas y el Caribe de la Entidad de las Naciones Unidas para la Igualdad de Género y el Empoderamiento de las Mujeres (ONU Mujeres) en el marco de la Campaña del
Secretario General de las Naciones Unidas ÚNETE para poner fin a la violencia contra las mujeres.
La Ley 82 de 24 de octubre de 2013 adopta medidas de prevención contra la violencia en las mujeres y reformó el Código Penal para tipificar el femicidio y sancionar los hechos de violencia contra la mujer.
Tiene por objeto garantizar el derecho de las mujeres de cualquier edad a una vida libre de violencia y proteger los derechos de las mujeres víctimas de violencia en un contexto de relaciones desiguales de poder, así como prevenir y sancionar todas las formas de violencia contra las mujeres.
Como se dijo anteriormente, a pesar que la Real Academia recoge la palabra feminicidio como la correcta, en Panamá la ley reconoce el asesinato de una mujer como femicidio.
La ley define como femicidio la forma de causar la muerte a una mujer basada en la pertenencia al sexo femenino, por causa de la discriminación o cualquier otra forma de violencia.
Esta Ley se aplica cuando las conductas descritas en ella se dirijan contra una mujer de cualquier edad, por el solo hecho de ser mujer, en un contexto de relaciones desiguales de poder, en el ámbito público o privado y en cualquier otro tipo de relación, ya sea laboral, docente, académica, comunitaria o de cualquier índole.
Julia Elena Sáenz González. doctora en derecho, docente universitaria y escritora de El feminicidio y su relación con los delitos de violencia doméstica y acoso sexual define el feminicidio como la muerte violenta de una mujer por diferentes situaciones, por condición de género, por violencia doméstica, por delitos sexuales, donde se le menosprecia; y para tratar de esconder la figura delictiva que se cometió y no dejar huellas.
Que el femicidio solamente se refiere a la privación de la vida a la mujer por su pertenencia de género. El feminicidio va mucho más allá. Desde la muerte violenta de la mujer por distintas razones; por pertenencia de género, por violencia doméstica y por delitos sexuales atroces, entre otras, y también la muerte jurídica de la mujer.
Nelva Reyes, Secretaria de la Central General de Trabajadores, destaca que “la Ley 82 del 24 de octubre de 2013, al ser una Ley Integral, toca todos los aspectos relativos a la violencia y señala las medidas que se necesitan. Demandamos que esta Ley sea divulgada y conocida por toda la sociedad”. Además, que se destinen los recursos que sean necesarios para establecer los Centros del Instituto de la Mujer (Cinamu), en todos los corregimientos del país.
La dirigente recalca que la violencia contra la mujer se da a nivel verbal, física, patrimonial, sexual y psicológica. Cuando aparecen muertes en los medios de comunicación por violencia doméstica, ya esta tiene tiempo de venir sufriendo. Las propias mujeres víctimas de violencia así lo indican, dice Reyes en un artículo de opinión publicado en La Estrella de Panamá.
Anualmente el 25 de noviembre en todo el mundo se conmemora el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer para denunciar la violencia que se ejerce sobre las personas, al ser discriminadas por su género, y reclamar políticas en todos los países para su erradicación.
En 1993, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó la Declaración sobre la eliminación de la violencia contra la mujer, en la que definió el término violencia contra la mujer.
El 17 de diciembre de 1999, la Asamblea General de las Naciones Unidas designó el 25 de noviembre como el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. La ONU invitó a gobiernos, organizaciones internacionales y organizaciones no gubernamentales a organizar actividades dirigidas a sensibilizar al público respecto del problema en este día como una celebración internacional.
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