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Las diferencias entre seguridad ciudadana y criminalidad
- 12/02/2017 01:00
- 12/02/2017 01:00
Existe una confusión entre los conceptos de seguridad ciudadana y criminalidad. Es decir, se utiliza indistintamente ambos como si fueran sinónimos; y tanto autoridades, como periodistas, estadísticos y otros actores sostienen que la seguridad ciudadana se refiere a la criminalidad que tiene un país.
Es importante resaltar que la seguridad ciudadana puede estar referida conceptualmente a un conjunto de procesos sociales, económicos y políticos enmarcados en condiciones que se conjugan en el espacio social dando como resultado criminalidad, suicidios, miedo, violencia comunitaria o familiar; pero también accidentes personales, atropellos y situaciones que ponen en riesgo la libre y pacífica convivencia de los ciudadanos de un país y que supera el hecho criminal.
Para decirlo más claro todo delito, crimen o violencia es inseguridad ciudadana; pero no toda inseguridad ciudadana, está referida sólo a delitos, crímenes y violencia. Esto es posible si entendemos la seguridad como una condición más amplia en donde las avenidas, el sistema de transporte, la cultura ciudadana, la estructura legal, entre otros elementos, puede transgredir el ejercicio pleno de los derechos ciudadanos. Es decir, es cuando el espacio de convivencia no se encuentra apto o favorable para el ejercicio pleno de los derechos ciudadanos entonces se produce inseguridad ciudadana.
Esta discusión pertenece a la dimensión epistemológica, y está referida al concepto mismo de seguridad ciudadana. Es importante este debate, en la medida que estructura las intervenciones de científicos, políticos y técnicos. En otras palabras, si entendemos el concepto de seguridad ciudadana como delincuencia y criminalidad; entonces las acciones, políticas y estrategias se encontrarán dirigidas a la atención del delito y el crimen.
De la misma forma, la organización institucional que deba atender este tema, se estructurará frente a esa visión particular y los liderazgos institucionales se encontrarían en instituciones de atención y represión del delito.
Abordaje científico de la Seguridad Ciudadana Siempre hemos dicho que una política pública que no se sustenta en conocimiento científico, no es política, sino improvisación. Puede haber diferencias en la forma teórico – metodológica de explicación científica de cualquier hecho social, que haga debatible las acciones o las políticas, de la misma forma científica como fue concebida.
El problema se encuentra en el alcance que se vincula al concepto de seguridad ciudadana. Desde mi opinión, la medición de la seguridad ciudadana no puede ser calculada, sólo con el indicador de tasa de homicidios o en otros casos con los indicadores de robos, hurtos, o cualquier otro indicador que sólo muestre estadísticas criminales.
Debe construirse índices que contemplen otros eventos de la vida cotidiana, así como acciones de respuesta a las condiciones de los hechos cotidianos. Existen metodologías para la construcción de índices que ponderan las condiciones del hecho o fenómeno social, la situación resultado y la respuesta de parte de la sociedad y los actores institucionales a través de programas de intervención.
En ese sentido se hace importante considerar grupos de indicadores referentes a: Políticas: Se contemplarían los programas de los gobiernos locales, organizaciones comunitarias, donde las instalaciones deportivas, actividades culturales, espacios públicos de recreación y su uso deben ser observados, principalmente como elementos que facilitan la interacción de las personas y que en principio generarían un espacio de convivencia pacífica.
Participación: Se considerarían las organizaciones comunitarias presentes, participación de la población en esas organizaciones, liderazgos comunitarios, movimientos sociales presentes, exigencia de rendición de cuentas. Esto permite entender la posibilidad de mayor cohesión social de los grupos generando condiciones propicias de oportunidad a la población y de adquisición de mejores condiciones de vida.
Institucionalidad: Se refieren a la influencia del gobierno nacional y la presencia e influencia de estas entidades gubernamentales en el espacio de atención ciudadana. Además contempla la posibilidad de la solución de problemas en la convivencia ciudadana. Estos indicadores permiten entender el entramado de instituciones que facilitan las condiciones de convivencia ciudadana y como consecuencia mayor seguridad.
Convivencia pacífica: En este grupo de indicadores recomendados se encuentran la aceptación por el otro, temas de discriminación, confianza en los demás. Estos indicadores permitirían verificar condiciones que pueden generar conflictos, violencia entre otros casos vinculados a la inseguridad.
Con estos grupos de indicadores se abre la posibilidad de entender la seguridad ciudadana en un sentido más amplio. Permitiendo correlaciones, y construyendo un índice sobre la realidad que no desvíe la situación a un delito particular como lo ha sido los homicidios.
Investigaciones en el tema de seguridad ciudadana. Se hace necesaria la creación de las condiciones que permitan a científicos sociales desarrollar investigaciones en este tema de forma que facilite las herramientas para que las autoridades generen una política pública de seguridad ciudadana con bases científicas considerando la amplitud y complejidad de la situación. Esto nos lleva a identificar temáticas como: Cohesión social y política local de seguridad ciudadana; Institucionalidad, transparencia y participación local; Convivencia pacífica y violencia comunitaria; gobernabilidad y seguridad ciudadana.
Estas temáticas recomendadas, abordan de una manera más amplia temas de seguridad ciudadana entendidas en su complejidad, obligando a un análisis interdisciplinario, en dónde disciplinas se integren a otras disciplinas distintas, abordando el tema más allá del análisis criminológico de los hechos. La criminología tiene la virtud de ser interdisciplinaria, explicando el delito y crimen, causas y consecuencias además, de otros temas vinculados al derecho y algunas ciencias sociales.
CONCLUSIONES
Desde nuestra perspectiva, y partiendo nuevamente del concepto de seguridad ciudadana en su sentido amplio; este desborda las posibilidades de esta ciencia para entender la complejidad de la seguridad ciudadana como área de conocimiento. Es decir, en la medida que la seguridad ciudadana aborda espacios como por ejemplo, seguridad en el transporte, seguridad en las construcciones, efectos de las inundaciones; además de la resiliencia ciudadana a estas situaciones, supera las posibilidades de la criminología para estos efectos.
Esto conlleva una discusión más amplia sobre el concepto, el abordaje científico, las herramientas teóricas – metodológicas de explicación y por lo tanto, la política, su organización interinstitucional y de los actores participantes. Es prioritaria esta discusión desde el punto de vista académico y técnico, para entender y atender científicamente la Seguridad Ciudadana en Panamá.
Por otra parte, debe existir una disposición de las autoridades para llevar adelante este debate científico, propio de la academia que supera las visiones de consultorías que carecen del rigor científico necesario para dar explicaciones de los hechos y fenómenos de la realidad social panameña.