Capturan en Panamá a grupo delictivo vinculado a tráfico ilícito de migrantes

Las autoridades panameñas informaron este miércoles del arresto de 12 personas presuntamente vinculadas al tráfico ilícito de migrantes hacia Centroamérica, en el marco de la "Operación Crepúsculo 2" en cuya primera fase de septiembre pasado se aprehendió a otros 24 sujetos.

Este grupo delictivo se dedicaba al tráfico de migrantes, principalmente de nacionales de Haití, Ecuador y de Bangladesh hacia el área fronteriza con Costa Rica, dijo a los periodistas el fiscal primero superior contra la delincuencia organizada del Ministerio Público de Panamá (MP-Fiscalía), Emeldo Márquez.

Los acusados captaban a los migrantes en los centros de recepción migratoria y a través de la comunicación con otras organizaciones criminales que traían a estos transeúntes para trasladarlos de forma ilícita hasta la región fronteriza, por un monto de entre 200 a 500 dólares por persona, explicó Márquez.

"Esto configura la conducta delictiva de la forma en que operan estos grupos, que (consiste) en sacar fuera del territorio nacional a estos migrantes evadiendo los grupos de controles migratorios dentro de Panamá", señaló el fiscal.

Márquez añadió que todos los aprehendidos en esta segunda fase de la Operación Crepúsculo, no identificados, serán llevados ante un Juez de Garantías "a fin de legalizar la aprehensión, formular la imputación y solicitar la medida cautelar" correspondiente.

El 26 de septiembre pasado, la justicia panameña formuló cargos por tráfico ilícito de migrantes a 23 personas que fueron detenidas el 21 de ese mismo mes en una operación binacional por las autoridades de Panamá y de Costa Rica.

La llamada Operación Binacional Crepúsculo tuvo lugar en medio de la crisis derivada de la movilización por Centroamérica de decenas de miles de migrantes irregulares, especialmente haitianos, que viajan hacia Estados Unidos, país que comenzó a deportarlos masivamente tras desbordar un puente fronterizo en el estado de Texas.

En esa ocasión, y en el marco de esta acción binacional, fueron detenidas más de una veintena de personas en 35 allanamientos en las provincias de Panamá, donde está ubicada la capital, la aledaña de Panamá Oeste, Darién, en la frontera con Colombia, y Chiriquí, limítrofe con Costa Rica.

En Costa Rica por su parte, la Policía de Migración detuvo en ese país a 21 personas en 15 allanamientos en sitios cercanos a la frontera con Panamá (sur) y a la frontera con Nicaragua (norte), como parte de esta acción conjunta con la Policía Nacional de Panamá y la Fiscalía de Crimen Organizado de ese país.

Esta red criminal se dedicaba a traficar personas migrantes provenientes de países como Haití, Cuba, Yemen, Pakistán y Egipto en su tránsito por Centroamérica hacia Estados Unidos, y cobraba entre 14.000 dólares (11.947 euros) y 22.000 dólares (18.774 euros) por persona, según datos oficiales.