Constituyente... ¿cuándo?...

Aquello de ‘¡Constituyente ya! ', nos quedó en ‘Constituyente... ¿cuándo? ' y queda también registrado que al candidato no hay que creerle todo y menos darle el voto por sus promesas. Pero, el asunto es, entonces, ‘¿por qué se le dará el voto, si no se puede confiar en la palabra que da cuando, en el fragor de la campaña, anda apurado por lograr el favor del votante? '. Ser un ‘caballero de la política ' no se trata solo de no decir groserías; es más, puede decir alguna suavecita, y hasta se le perdona; lo que no se le perdona al candidato una vez se convierte en funcionario, GRACIAS AL VOTO POPULAR, es que no honre su palabra. Hoy, además del inicio de la dictadura militar, se conmemoran 44 años de la Constitución vigente que muchos quieren cambiar, los candidatos se comprometen a hacerlo, en un compromiso que muere con la obtención del poder, y que se va quedando en solo ‘un buen propósito ' y buen gancho para ganar votos. ¿Nos sentaremos alguna vez a revisar este tema de trascendental importancia para nuestra vida democrática?