• 05/06/2024 23:00

Guillermo Elías Quijano, Jr.

“Billy” Quijano es uno de esos patriotas de bien, que sin ruido dejan huellas valiosas y representativas de una generación que le correspondió enfrentar la lucha por la democracia y las libertades

La partida física de quienes han influido positivamente en la vida nacional permite reflexionar sobre el compromiso de aquellos que han sabido aportar al bien común. Al mismo tiempo, su actuar refleja valores que sirven “de ejemplo a las futuras generaciones” (como suelen decir las resoluciones de duelo).

“Billy” Quijano es uno de esos patriotas de bien, que sin ruido dejan huellas valiosas y representativas de una generación que le correspondió enfrentar la lucha por la democracia y las libertades.

Proveniente de una familia comprometida con la política, el actuar de su abuelo y su padre fueron estímulo para participar, desde muy joven, en política. Su carrera fue truncada en gran medida, como la de muchos, por el golpe militar. Había sido electo diputado para el periodo 1968-1972 y solo ejerció 11 días.

Siempre será tarea pendiente valorar a aquellos que les correspondió, simultáneamente, construir una familia, desarrollarse profesional y empresarialmente, con todas las limitaciones que un régimen dictatorial imponía, al tiempo que dedicaban sacrificios para la recuperación de la democracia.

Su vida estuvo llena de aportes, en lo político, fue miembro fundador del partido Molirena – en su época de gloria -; en lo profesional, se desempeñó con éxito y rigor; en lo empresarial, una destacada participación en diversos sectores; en lo gremial y en su vida familiar y privada.

Quiero recalcar, especialmente, sus contribuciones en el servicio público. Responsabilidades, todas ellas, en las que antepuso los valores de honestidad y transparencia en su gestión.

En 1990, asumió la coordinación de la llamada “Comisión Tripartita”, una instancia que producto de acuerdos diplomáticos se había constituido (1982) entre los gobiernos de Estados Unidos, Japón y Panamá, para evaluar las posibilidades de un tercer juego de esclusas o de un canal a nivel. Sus trabajos concluyeron en 1993 con la entrega de un informe que sirvió de antecedente a los estudios para la ampliación del Canal.

Posteriormente, se desempeñó como ministro de Vivienda, en una gestión modernizadora de la institución, que tuvo como hito relevante la aprobación de la Ley 22 de 1991 que fijó los parámetros para una política nacional de vivienda y creó un fondo de ahorro habitacional, orientado para que los sectores de escasos recursos económicos accediesen a una vivienda. Terminó su gestión para asumir como candidato a vicepresidente de la república en la nómina de Rubén Darío “Chinchorro” Carles para las elecciones de 1994.

No menos destacable fue su impronta como miembro de la junta directiva de la Autoridad del Canal de Panamá, ya bajo administración panameña. Allí me correspondió coincidir con él y encontré a un caballero a carta cabal, además de un patriota, siempre velando por los mejores intereses de Panamá. Su participación en la elaboración de la propuesta de ampliación del Canal fue comprometidísima.

Durante sus años en la junta directiva del Canal de Panamá presidió el Comité de Modernización y Ampliación. Su acuciosidad por los detalles era impresionante, siempre dedicaba especial atención a los estudios de mercado, a los cálculos y proyecciones de demandas futuras. Largos análisis dedicamos a las otras rutas potenciales para carga entre Asia y la costa Este de los Estados Unidos, siempre “Billy” tenía un comentario o una pregunta que daba un giro interesante a las evaluaciones. Fue un alto honor que me dispensó cuando, terminado su periodo como miembro de la junta directiva, propuso mi nombre para reemplazarlo en la presidencia del Comité de Ampliación.

Los hombres públicos que en su vida han actuado de cara al sol – habiendo acertado o errado – sienten en su fuero interno la responsabilidad histórica de plasmar sus experiencias para quienes le seguirán. Así lo hizo “Billy” cuando, en 2013, publicó su libro Vivencias, recuerdos y hechos políticos 1948-2009.

Nos encontramos hace un par de meses, en la panadería de El Valle, rodeado del amor de su familia, nos fundimos en un abrazo que no necesitó palabras. Los valores de buen panameño de “Billy” Quijano los presento como ejemplo a las futuras generaciones.

El autor es abogado
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