La ceremonia, a la que está previsto que lleguen Jefes de Estado de todo el mundo, estará oficiada por el decano del colegio cardenalicio, Giovanni Battista...
- 06/07/2011 02:00
Valores éticos y los políticos
I nnumerables veces hemos hecho referencia a la crisis de valores por la que atraviesa nuestra sociedad. Resulta inaceptable cuestionar la conducta impropia de nuestros jóvenes, sin percatarnos de que somos el espejo en el cual se miran.
Al observar el comportamiento histórico de las figuras políticas de nuestro país, se notará que existe tendencia creciente hacia la descomposición ética, hecho que resulta el peor de los modelos para la formación de nuestros niños y jóvenes, porque violenta y lesiona la formación integral de los mismos.
El penoso y poco edificante espectáculo de divisiones internas y competencias desleales, entre políticos, a lo interno de sus colectivos y entre adversarios, es parte del circo en que nos envuelven diariamente. Sus propósitos por obtener prebendas en beneficio personal, político o empresarial, son inminentes, sin importarles el uso adecuado que debe darse a los dineros provenientes de nuestros impuestos.
La especulación, diatriba y el juegavivo; los actos de corrupción, nepotismo y la falta de transparencia en la información que se brinda a la opinión pública, son parte de la farsa que evidencia la magnitud de la problemática que viene atravesando la sociedad.
Este 1 de julio, se cumplieron dos años de la administración Martinelli. Gestión de gobierno que asumió el poder después de compromisos ineludibles con este pueblo, de cambios positivos, prometidos durante el periodo proselitista. Compromiso que le llevó a conquistar el triunfo, producto de la oferta de esperanzas por un Panamá mejor, a un pueblo asediado por actitudes politiqueras inescrupulosas y oportunistas, que no honran su palabra.
A la fecha, aún cuando el presidente Martinelli viene cumpliendo algunas de sus promesas de campaña, en materia de infraestructuras y proyectos sociales, tal vez, el compromiso más importante para la población, por tratarse del proceder ético en la administración del Estado, aún no ha iniciado.
Ejemplo sencillo es la elección donde se escogió el nuevo presidente de la Asamblea de Diputados, escenificándose acontecimientos que evidencian, con claridad, la histórica ingerencia del Órgano Ejecutivo en el Órgano Legislativo; así como la trifulca por obtener el poder de ese hemiciclo, sin importarles la opinión de la población.
El hecho fue tan notorio, que producto del incumplimiento de la palabra empeñada, por el Ejecutivo y la bancada del partido Cambio Democrático (CD) con sus aliados del panameñismo, se dieron insultos y está en veremos la alianza oficialista.
Por otra parte, en las últimas encuestas el presidente Martinelli, a dos años de su periodo de gobierno, ha descendido su nivel de aceptación ciudadana. Según opinión de los encuestados, es producto del estilo gerencial autocrático y poco tolerante del mandatario y algunos de sus ministros; la falta de transparencia en la divulgación de información pública (planillas, viáticos, etc.), así como la relación un tanto tirante y anacrónica con los medios.
Frente a este escenario la población espera que el presidente cumpla la palabra empeñada, de implementar cambios positivos en beneficio de las grandes mayorías.
*ECONOMISTA Y EDUCADORA.