“No dejo de oír a la gente pidiendo auxilio, su hilo de voz perdiéndose en la oscuridad y la silueta de un hombre en el techo de su coche alumbrada por...
Panamá, ¿qué hay para ver?
- 29/09/2023 00:00
- 29/09/2023 00:00
“¿Qué hay para ver en Panamá?”, pregunta el turista extranjero que ya conoció el canal interoceánico, en el lobby del hotel donde se hospeda. Piense un momento antes de contestarle, ¿hay opciones?
Hay una descomunal actividad en torno al turismo en Panamá, no solo en la creación de destinos, sino en la recolección de datos de calidad con apoyo de aplicaciones de reconocida reputación mundial y fuentes de primer nivel como la Organización Mundial de Turismo (OMT).
La gerente de inteligencia de negocios del Fondo de Promoción Turística (Promtur), Lisbeth Brito, citó a las fuentes tradicionales: Servicio Nacional de Migración, Autoridad de Turismo de Panamá, Instituto Nacional de Estadística y Censo, pero agregó que también se recoge data de Forward Keys (reserva de vuelos), STR (industria hotelera), SeeTransparent (alojamientos vacacionales) y Near Intelligence (geolocalización de provincias, destinos y sitios de interés más visitados).
Entender cuáles son esas tendencias del turismo en Panamá y el mundo, y el comportamiento de los turistas durante la reserva del pasaje y cuando llegan a Panamá, por ejemplo, son clave para ofrecerles lo que ellos buscan.
“Panamá vive por más” es una marca turística cuyo desempeño es medido mediante encuestas semestrales. La plataforma Adara mide cuántas visitas a la página web de Promtur se convierten en compra de reservas para visitar el país, y conocer el “nivel de satisfacción” de la industria sobre el trabajo del Fondo se logra mediante otro sondeo periódico, reseñó Brito en la séptima Convención Nacional de Turismo (Conatur), celebrada del 25 al 26 de septiembre pasado.
Como destino, Panamá, para los extranjeros, ha crecido 2,5 puntos porcentuales en los últimos meses, lo que no ha ocurrido con sus competidores cercanos, de acuerdo con las mediciones efectuadas.
Con un presupuesto anual de $20 millones, la agencia se dedica al mercadeo directo, lograr alianzas estratégicas e impulsar la industria de reuniones, lo que a junio pasado arroja un total de $902 millones en visitas a Panamá, superior a la meta trazada de $769 millones.
Eso se logró, advirtió Brito, gracias a que parte del presupuesto para mercadeo se redirigió a una de las alianzas al advertirse que había el riesgo de no poder alcanzar la meta trazada por retrasos en la aprobación de alianzas fuera del alcance de Foptur.
Poner foco en las personas, educación, empleo, transición, sostenibilidad, poner en marcha el plan climático de turismo de Panamá; fomentar inversiones a través de CAF-Banco de Inversión de América Latina; aumentar la competitividad y resiliencia de los destinos; el desarrollo de productos, inteligencia de mercado, ampliar la innovación y la transformación digital, “el tecnohumanismo es nuestra realidad, vamos a integrarla”, aseguró Gustavo Santos, director de turismo para América de la OMT.
El dirigente recalcó que esta posibilidad de desarrollo turístico más inclusivo, más sustentable, más resiliente tienen que “creérsela” los panameños, porque para la OMT ya es una verdad.
En lo que va de año ya se registra el 85% de recuperación del turismo en Latinoamérica y el Caribe respecto a los niveles prepandemia, y para fin de 2023 debe llegar al 90%.
Para los que quieren responder al ¿qué hay para ver en Panamá?, es preciso que tengan en cuenta que 8 de cada 10 jóvenes de las generaciones Zeta y Millennials se plantean viajar antes que comprar un bien; el 85% de ellos buscan un destino en donde vivan en armonía con la naturaleza, con las comunidades, lo que define un nuevo perfil de turista responsable.
Además, de los nómadas digitales, el 40% ya advierte que dejaría su trabajo si tuviera que volver a la oficina, de acuerdo con datos de la OMT.
En cuanto a la toma de decisiones de inversión, Foptur apuesta a que, por fin, se destinen fondos a la creación de la cuenta satélite, como ya la tienen Costa Rica y Colombia, para mantener al día la captura de datos y transparentarla.
Un paréntesis, quien fomentó desde la Autoridad de Turismo de Panamá (ATP) la creación de la cuenta satélite fue el laureado cantautor y abogado Rubén Blades cuando estuvo al frente de esa entidad en el periodo 2004-2009, de cuyas bondades habló ampliamente con los periodistas en aquella época.
La ministra de Turismo, Dennis Guillén, actual administradora de la ATP, precisó que en el primer semestre de 2023 ingresaron al país 1,3 millón de turistas, con un promedio de estadía de 11 días.
Aún el país está lejos de la pretensión de acoger 3 millones de turistas al año, meta planteada hace una década por sus antecesores.
No obstante, la flamante ministra le está imprimiendo celeridad a los planes, a escasos 9 meses de terminar la gestión del actual gobierno, con planes para establecer nuevos destinos de cara a 2030, aprovechar que el hub de las Américas –el Aeropuerto Internacional de Tocumen– atiende 15,8 millones de tránsitos de pasajeros desde 2022 para ofrecer nuevos productos que les inviten a quedarse de visita en el país, e impulsar la modernización de la infraestructura turística.
Precisamente en el Día Mundial del Turismo, el pasado 27 de septiembre, un emprendedor como Francisco Pittí, de Salao Tours, nos compartía en un live de su cuenta de Instagram las impresionantes vistas camino a la capital de la comarca Ngäbe Buglé, que realizó en parte a pie por una carretera de buen ver.
“Qué lindo es mi Panamá” resumía mientras mostraba las montañas sagradas de los ngäbe y los parajes, muchos de ellos inexplorados, que tienen la posibilidad de convertirse en un nuevo destino turístico con paradores e incorporando a los aborígenes con su emprendimiento.
Pittí, que empezó como pescador en Aguadulce (Coclé), ahora es guía turístico y lleva a los visitantes desde la playa El Salao a recorrer las costas coclesanas para apreciar ballenas, además de fomentar el cuidado de los manglares del golfo de Parita, una larga extensión de playa que el gobierno estudia dotar de una vía costanera para impulsar su desarrollo turístico. La clave, y lo propugna el sector privado, es que se convierta en una política de Estado el desarrollo de la llamada “industria sin chimeneas”.
Durante la jornada, Jacqueline Mora, viceministra de Turismo de República Dominicana, expuso al detalle la estrategia y los resultados de su país basado en un sistema de inteligencia turística que le ha permitido en los últimos tres años convertirse en un destino exitoso, y adelantó que la mira de esa nación insular es trabajar en conjunto con Centroamérica y Panamá para constituirse en el destino del Gran Caribe, así como la gente no visita España o Francia, sino que va “a Europa”.
La transparencia, colaboración de todos, información actualizada, inteligencia con data real, innovación, digitalización y formalización de las empresas son factores que pesan y que Panamá tiene que universalizar dentro del sector turístico.
De momento, solo en la convención se desarrollaron 650 citas con miras a cerrar negocios por $35 millones entre proveedores y compradores, de países como Estados Unidos, Canadá, México, Costa Rica, Colombia, Brasil, Ecuador, Argentina y Francia.
El presidente de Camtur, Ovidio Díaz, anunció que la octava Conatur se celebrará en el mes de septiembre de 2024, en la provincia de Chiriquí, que aspira a convertirse en un nuevo polo de desarrollo turístico diversificado, gracias al proyecto puerto del Barú, que aprovechará una bahía donde operaba Cítricos de Chiriquí para levantar con fondos privados una terminal multimodal que debe abrirse, al menos en su primera etapa, en 2026, según sus promotores.
Mientras los hoteleros, un sector clave, reconocen en boca de su dirigente Raúl Jiménez que Panamá “carece” de un sistema de estadísticas precisas, veraces y en línea –apenas el 50% reporta voluntariamente–, sus aproximaciones muestran la concentración en la región interoceánica del Canal de Panamá, y que el 50% de los hoteles en la capital está aún cerrado.
Pese a esto, con un promedio por habitación de $121,76 diarios en la capital y 124 en el interior, Panamá es un 65% más barato que el Caribe, un 28% más bajo que Centroamérica y un 11% menos oneroso que el promedio de Latinoamérica, en hoteles de categoría similar.
¿Qué hay para ver?, son los destinos de “Sol y playa plus”, que incluyan la vía acuática, el Casco Viejo y Panamá Viejo, la historia en las comarcas indígenas, el tour gastronómico que se extiende hasta el occidente del país, la ruta del café, los senderos históricos (Camino de Cruces, por ejemplo), Tierras Altas, todo “amarrado” con las playas porque los mayoristas buscan esa oferta, de acuerdo con Jiménez.
Y no se olvide que el turismo de convenciones es una extraordinaria fuente de ingresos directos e indirectos, pues este año ya tiene reservas hasta 2032 y cada turista gasta a diario unos $650, a diferencia del turista vacacional que lo hace en el rango de $230 a $250 por día.
¿Manos a la obra?
El autor es periodista independiente y profesor universitario