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Quarry Heigths: historia urbana y militar de un sitio de defensa en Panamá
- 04/12/2021 00:00
- 04/12/2021 00:00
Existen accidentes geográficos cargados de simbolismo y carácter para algunos pueblos. En el caso de los habitantes de la ciudad de Panamá, este accidente es el cerro Ancón. Guardián de lo que ahora es el Casco Antiguo, su ocupación por los estadounidenses a partir de la puesta en vigencia del tratado de 1903 y la aparición de la Zona del Canal, despertó sentimientos de nostalgia y pena por su pérdida entre los citadinos. Sentimientos reflejados en la poesía 'Al cerro Ancón' que la escritora Amelia Denis De Icaza dedica a este promontorio basáltico.
Su ubicación daba una vista completa a puntos estratégicos de la ruta transístmica y del paisaje alrededor de la ciudad de Panamá, hasta inicios del siglo XX. Al oeste, el poblado de La Boca, en la desembocadura del río Grande, puerto de entrada de las mercaderías que llegaban a la ciudad. Hacia el suroeste, El Chorrillo, fuente de agua para la ciudad de Panamá hasta la construcción del sistema de acueducto por los estadounidenses a principios del siglo XX. Hacia la falda noreste el hospital, construido durante el intento francés de construcción del canal. Del lado norte, los humedales del río Curundú, hoy la zona de Albrook
Sería aquí donde se ubicarían los 1,400 marines de Estados Unidos, “que llegaron durante la insurrección de 1903, encargados de mantener el ferrocarril abierto al tráfico y proteger las propiedades del Gobierno de Estados Unidos”.
El cerro Ancón sería utilizado como cantera entre 1909 y octubre de 1914, proporcionando más de 3 millones de yardas cúbicas de roca para la construcción de las esclusas de Miraflores y Pedro Miguel.
De acuerdo con el reporte, 'The Quarry Heights Military Reservation in the Republic of Panamá' elaborado por el Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Estados Unidos en 1996, dos terrazas creadas durante el uso como cantera del cerro Ancón, serían utilizadas como el “sitio del alto mando militar en Panamá” desde 1915 hasta su devolución a manos panameñas el 8 de enero de 1998.
Se instalarían aquí sucesivos comandos del ejército estadounidense, entre los que se encontraban, el cuartel central para el comandante del Ejército en el Canal de Panamá (1920-1941); el comandante en jefe del Comando de Defensa del Caribe del Ejército (1941-1947), el comandante en jefe del Comando del Caribe (1947-1963), y el comandante en jefe del Comando Sur (1963-1998).
En sus inicios, Quarry Heights fue considerado un puesto temporal, con lo cual las edificaciones que se construyeron tenían este mismo carácter. El informe preparado por el Cuerpo de Ingenieros en 1996, indica que, aunque no hay completa certeza, se considera que muchos de los edificios construidos inicialmente en este sitio correspondían a edificios que se hallaban en poblados como Empire y Culebra –abandonados luego de finalizada la construcción del Canal–, los cuales fueron desarmados, trasladados y vueltos a construir para su utilización en este puesto militar.
Según la publicación, 'An American Legacy in Panamá' (1995), en la Zona del Canal “hubo en algún momento, cerca de 200 de estas casas de madera del campamento de construcción, las cuales fueron originalmente construidas en 1906. A mediados de 1930, sin embargo, todas, menos esas en Quarry Heights y la residencia oficial del administrador de la Comisión del Canal de Panamá –originalmente la residencia oficial del gobernador de la Zona del Canal de Panamá–, fueron demolidas y reemplazadas con edificios modernos”.
Uno de los aspectos más singulares de Quarry Heights fue la construcción del “túnel de operaciones conjuntas”, entre 1940 y 1942.
Este túnel a prueba de bombas estaba “bajo 200 pies de roca de pórfido nativo. La estructura incluía un edificio principal de 269 pies por 52 pies y un túnel de 302 pies por siete y medio pies. Desde entonces, la instalación se utilizó como un centro de Comando Seguro de Inteligencia, Comunicaciones y Operaciones Conjuntas para el Comando Unificado (del Comando Sur), hasta 1997”.
Con la creación del Comando Sur, en 1963, las instalaciones establecidas en Quarry Heights serían el centro de operaciones desde el cual se daría la “supervisión de la mayor parte de las actividades de las misiones militares de Estados Unidos en América Latina, incluyendo su entrenamiento”, y “el área en la cual es responsable por la protección y acrecentamiento de los intereses de Estados Unidos incluidos en las áreas terrestres de Sudamérica y América Central”, de acuerdo con lo que indica Raúl Leis en su artículo, 'Comando Sur, comando hostil' (1986).
Más tarde, con la firma de los tratados Torrijos-Carter, y a partir de su puesta en vigencia el 1 de octubre de 1979, los límites de la reserva militar de Quarry Heights, cambian. A partir de este momento se transfiere a Panamá el área más próxima a la avenida de los Mártires, que había funcionado como patio de vehículos de la policía militar, además de la cima del cerro Ancón, en donde se encontraban las torres de repetición de la red de radio y televisión del Comando Sur.
En el caso de la cima del cerro, a partir de esta fecha el Gobierno de Panamá coloca un mástil y una base sobre la que ondea una enorme bandera panameña, “como símbolo de la recuperación de la soberanía sobre su territorio”. El antiguo patio de vehículos de la policía militar pasa a ser la zona donde se construye 'Mi Pueblito', a mediados de la década de 1990.
Quarry Heights es en la actualidad, principalmente, una zona residencial y entrada al mirador que se encuentra en su cima, el cual funciona como uno de los pocos espacios públicos de la ciudad. Desde al menos 2003 se ha visualizado, en reiteradas ocasiones –la más reciente en 2020–, la posibilidad de construir un teleférico e instalaciones turísticas en la cima del cerro Ancón.
Esto a pesar de que existe un fallo que rechaza el desarrollo de este proyecto al considerar que vulnera el valor natural y patrimonial de este accidente geográfico.
Esta propuesta, y la situación en la que se encuentra el sitio en general, representan otro paradójico ejemplo de la falta de claridad y visión sobre el destino de las tierras que fueron revertidas a Panamá, luego de años de lucha nacionalista.