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- 06/01/2012 01:00
- 06/01/2012 01:00
BAGDAD. Una serie de ataques de bomba fueron lanzados ayer, jueves, contra peregrinos y vecindarios chiitas en la ciudad de Bagdad.
El peor ataque ocurrió por la tarde cuando un atacante suicida hizo estallar su chaleco cerca de una procesión de peregrinos chiitas que avanzaba por los alrededores de la localidad de al-Batthaa, al occidente de Nassriyah.
El ataque provocó la muerte de 36 personas, incluido un oficial y dos soldados del ejército iraquí que resguardaban la procesión, y heridas a 72 personas.
Los peregrinos estaban caminando por una carretera principal con dirección a la ciudad sacra chiita de Karbala, a 110 kilómetros al sur de Bagdad, para la celebración del ritual religioso de Arbaeen, cuyo clímax ocurre el 13 de enero.
El Arbaeen marca el final del luto de 40 días por el imán Hussein, nieto de Mahoma y quien murió en la batalla de Karbala.
Los actos de violencia comenzaron por la mañana con una serie de estallidos de bomba en bastiones chiitas de Bagdad que mataron un total de 24 personas y lesionaron a unas 66.
El primer ataque ocurrió alrededor de las 8:00 horas (05:00 GMT) en el bastión chiita de la ciudad de Sadr en el este de Bagdad cuando una motocicleta con explosivos fue lanzada contra un grupo de albañiles reunidos cerca de una intersección en el distrito, cuando esperaban ser contratados para la jornada laboral del día.
Un segundo ataque tuvo lugar en una concurrida intersección cerca del hospital al-Sadr en el mismo vecindario de la ciudad de Sadr, cuando dos bombas instaladas en el camino detonaron en rápida sucesión. Los dos ataques en la ciudad de Sadr dejaron nueve personas muertas y 35 heridas.
Una hora después ocurrieron más ataques de bomba en el distrito chiita de Kadhmiyah, en el norte de Bagdad, cuando dos carros con explosivos estacionados cerca de concurridas intersecciones estallaron y mataron a 15 personas y lesionaron a otras 31.
Los ataques ocurrieron en medio de un conflicto político entre Maliki y sus rivales políticos en el bloque de Iraqia respaldado por sunnitas, pues Maliki busca arrestar al vicepresidente sunnita Tariq al-Hashimi por cargos de terrorismo.
Asimismo, Maliki pidió al Parlamento despedir a su vicepresidente sunnita Salih al-Mutlak luego de que éste llamó a Maliki ‘dictador’ en una entrevista con el canal de noticias estadounidense CNN, y en otra ocasión dijo a su propio canal satelital de televisión Babiliyah que ‘Maliki es peor que Saddam Hussein’.
El bloque Iraqia, dirigido por el ex primer ministro Ayad Allawi, boicoteó las sesiones del Parlamento y las reuniones del gabinete.