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- 05/10/2016 18:00
- 05/10/2016 18:00
Moisés Galindo, uno de los abogados del expresidente de Guatemala Otto Pérez Molina, en prisión preventiva por varios casos de corrupción, renunció hoy a la defensa del exmandatario debido a la falta de pago.
El propio letrado confirmó a Acan-Efe este extremo y aseguró que se debe, única y exclusivamente, a que Pérez Molina no puede hacer frente a los servicios profesionales prestados por su persona, debido a que todas su cuentas están embargadas.
Pérez Molina fue detenido y enviado a prisión preventiva en septiembre de 2015 acusado de ser el líder, junto a la exvicepresidenta Roxana Baldetti, también presa, de la red de defraudación aduanera "La Línea", aunque durante este tiempo ambos han sido imputados en otros casos de corrupción.
"Yo tenía la palabra" del expresidente para hacer frente a esos pagos en cuanto fuera posible, y "su compromiso y su palabra yo sé que valen", pero lo cierto es que, a corto plazo, "sé que él no puede resolver esa situación de embargo", dijo Galindo, quien añadió que no puede "seguir esperando".
Hasta el momento, Pérez Molina le debe a Galindo tres meses de su honorario, correspondientes a la investigación por el caso "La Línea", pero el letrado se mostró convencido de que en cuánto sea posible va a recibir esa cantidad, la cuál no especificó.
Además, fuentes judiciales confirmaron a Acan-Efe que el próximo lunes está previsto que inicie la etapa intermedia del proceso de "La Línea", en la que el juez a cargo de la causa, Miguel Ángel Gálvez, debe decidir si se inicia un juicio oral y público en contra de Pérez Molina, Baldetti y los otros imputados en esta trama, acusados de haber defraudado millones de dólares al Estado.
Es por ello además que Galindo tomó esta decisión, pues si hasta el momento no se ha podido pagar su trabajo, menos ahora que empieza una nueva etapa que puede durar de 3 a 5 semanas, por lo que lo mejor era renunciar, un hecho que él mimo le comunicó al expresidente, quien le mostró su comprensión.
Galindo, que había asumido la defensa del general retirado desde un principio junto con su colega César Calderón, dijo que según la ley el único impedimento para no abandonar la defensa de una persona es que ésta continúe garantizada, y en el caso de Pérez Molina es así, pues Calderón sí sigue al frente.