Ciudades Literarias reafirma su misión de crear rutas de difusión de la cultura y arte panameña

En su misión de promover el concepto de “Ciudad literaria” la Asociación de Escritores y Escritoras de Centroamérica (AESCA) ha establecido un programa que salvaguarde el talento panameño en arte y cultura y sus defensores.

En base a esto se ha creado el concepto de “Ciudades literarias” el cual inició en Edimburgo y la primera hispanohablante establecida fue en Granada. Panamá desea ser el siguiente país de la región que continúe con este trabajo.

En un documento compartido a revista MÍA, se define el programa de rutas literarias con los siguientes objetivos:

Fomentar el hábito lector y formar lectores y lectoras motivados(as), capaces de gozar con la literatura.

Desarrollar habilidades de escritura creativa que estimulen distintos procesos cognitivos.

Dialogar constructivamente para explorar ideas y debatir.

Distribuir Obras literarias donadas por Embajadas, Fundaciones y Editorisles

Introducir distintas obras literarias de autores hombres y mujeres representativos de géneros y épocas que hayan sido un aporte al campo cultural.

Interpretar y resignificar la ciudad desde la construcción de un espacio simbólico en la literaria.

Valorar la literatura como fuente de satisfacción personal, de reflexión, de conocimientos y como vehículo en la búsqueda de identidad.

Manifestar una disposición a reflexionar sobre sí mismo, los demás y sobre las cuestiones sociales y éticas que emanan de las lecturas.

Desarrollar habilidades superiores del pensamiento, como organizar, jerarquizar, analizar, sintetizar, evaluar e interpretar a partir de la lectura, el diálogo y la escritura en situaciones comunicativas contextualizadas y reales.

En cuanto a las actividades que se realizarán, el proyecto cuenta con tres:

El primero es la realización de la “Ruta Literaria” por un sector de la ciudad acordado previamente con el o la docente de la asignatura o algún miembro del equipo de gestión del establecimiento. En esta actividad se visitarán una serie de puntos específicos de la ciudad que han sido mencionados, descritos y/o utilizados retóricamente en textos literarios de escritores Panameños .Los y las estudiantes contarán con un folleto de la Ruta facilitado por la Fundación, donde se muestra un mapa de la zona con la localización particular de cada fragmento, sus datos referenciales y una breve reseña histórica sobre el lugar en cuestión.

En cada una de las paradas se leerán un fragmento literario y se presentará a los y las estudiantes una contextualización de la obra que lo enmarca y de su autor, así como otros datos interesantes de su contexto de producción y recepción.

Concluido el recorrido, el monitor reúne a los y las participantes para realizar una actividad de cierre que consiste en una breve reflexión sobre la experiencia vivida, sobre los espacios urbanos que frecuentan en su vida cotidiana y se solicita la respuesta de una encuesta sobre el desarrollo de la actividad.

La segunda actividad consiste en la creación de su propio mapa literario. Los y las estudiantes que asistieron a la salida pedagógica del primer momento deberán ahora escribir textos literarios que conformen dicho mapa. Bajo una pauta de requisitos los invitamos a ficcionalizar experiencias personales enmarcadas en lugares concretos de su ciudad, particularmente los que circundan su comunidad educativa o el espacio de trayecto entre su hogar y el colegio, para así reconocer en el espacio físico un elemento significativo en la producción de una obra literaria y muchas veces en los conflictos de las historias propuestas.

La tercera y última actividad consiste en contar con los recursos técnicos, el monitor mostrará un ejemplo de un mapa literario y de un texto producido en una instancia previa para apoyar su explicación y motivar la participación en la actividad.

Para establecer un espacio digno en el cual se puedan llevar a cabo los objetivos establecidos por AESCA se considera importante lo siguiente:

Elegir un lugar que invite a la lectura.

Realizar la apertura con reunión protocolar de los escritores, escritoras y amantes de la lectura que representen a cada una de las provincias, incluidos como gestores literarios honorarios.

De cada provincia deben captarse 12 escritores y/o escritoras (nacidos o residentes permanentes del lugar) para instalar una ciudad literaria y fundamentar el grado de lecturabilidad en el sitio, por medio del acreditamiento de encuesta.

La ruta literaria se definió de la siguiente manera:

Santiago, San Francisco de la Montaña

Chitrè, Cubitá y Biblioteca Pública

Los Santos, Pedasi y Las Tablas

Chiriquì, Volcán y Boquete

Bocas del Toro, Isla Colón

Coclè, Natá de los Caballeros y El Valle de Antón

Comarca Tolè- FISMU

Panamá, Chorrera y Casco Antiguo

Darién, Darién