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- 10/08/2011 02:00
- 10/08/2011 02:00
S e hallan en franco aumento las ciudades peatonales alrededor del mundo. Son propuestas de planificación urbanística y mejoras en la calidad de vida de sus habitantes y visitantes. Aquellos que hemos tenido la oportunidad de visitar Venecia, por ejemplo, podemos refrendar la riqueza urbana en este orbe que a pesar de su densidad es una de las ciudades más relajantes y agradables en el planeta.
En cierto sentido, existen áreas en nuestra capital que gozan de una mayor afluencia peatonal, tales como Punta Paitilla y El Cangrejo. Resulta interesante resaltar cómo en ciudades como Copenhague, capital de Dinamarca, se lograron mejoras reveladoras a raíz de la conversión hacia áreas peatonales, no solamente en beneficio de la población, sino también como un enorme atractivo turístico.
Resaltando el Casco Antiguo como el imán de mayor atractivo turístico, sentaría bien en nuestra ciudad planificar la construcción, por empresarios privados, de un tranvía turístico, iniciando en la Cinta Costera a la altura del río Matasnillo, donde los turistas puedan transitar desde sus hoteles y abordarlo cómodamente a través de puentes elevados.
El tranvía turístico, con múltiples escalas, puntualizada señalización y un billete de libre acceso por periodos determinados, transitaría hacia el actual Mercado del Marisco, atravesando un remozado Barrio Chino, ingresando al Casco y continuando hacia el Museo de Biodiversidad en Amador, con una troncal adicional que arranque desde la Plaza 5 de Mayo, atravesando una vivificada Avenida Central, optimizando efectivamente el flujo de trafico en estas áreas. Para lograr el éxito del programa hacia una ciudad peatonal, urge la rehabilitación y adecuada preservación de las aceras citadinas en actual estado lamentable. Aprovechando la necesidad del aterramiento de la maraña de cables, las empresas propietarias de los mismos deben cubrir los gastos de estas mejoras, que también las benefician. Como en Copenhague, se podría aprovechar para la inclusión de ciclovías que permitan una mayor utilización de bicicletas en transporte, lo cual redundaría en mejorar la salud y favorecer los bolsillos de la población.