El 'rey del cripto' no se escapa de la justicia americana

El antes considerado “genio del cripto” dentro del mundo de las finanzas, Sam Bankman-Fried, fue acusado de ocho crímenes según un tribunal federal de Manhattan en el estado de Nueva York.

Entre los cargos presentados ante el empresario se encuentran el uso indebido de fondos de sus clientes, lavado de dinero, conspiración para defraudar a Estados Unidos y fraude electrónico.

Además de ocultar los problemas financieros de FTX a sus inversores, El ex director general de la compañía, utilizó miles de millones de dólares antes de que se notificara de la caída de la empresa y su moneda, Bitcoin, lo que fue fundamental para el declive de su imperio.

Aunado a las acusaciones determinadas por la justicia americana, La Comisión de Bolsa y Valores (SEC, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos declaró el pasado martes que Bankman-Fried “construyó una base de engaños mientras les decía a los inversores que era una de las edificaciones más seguras en criptografía”.

Según la agencia del gobierno estadounidense el empresario defraudó a sus inversionistas por años utilizando aquellos ingresos para adquirir bienes a su nombre y el de su familia.

“FTX operaba tras un revestimiento de legitimidad que el señor Bankman-Fried creó, promocionando los mejores controles, incluyendo un 'sistema de riesgo' para los propietarios así como adherencia a principios de protección específicos para el inversor y detalladas condiciones y términos de servicio, entre otras cosas. Pero como hemos alegado en nuestra queja, aquel revestimiento no era solo frágil, también fraudulento”, destacó Gurbir S. Grewal, director de la división de ejecución del SEC.

Actualmente la deuda del fundador de FTX a sus acreedores supera los $3,000 millones, de acuerdo con los documentos oficiales sobre la compañía que se presentaron a inicios de diciembre.

El “rey” de la criptografía fue detenido el lunes en su casa en las Bahamas y podría enfrentar 115 años de prisión debido a que la magistrada presidenta de la Mancomunidad de las Bahamas, Joyann Ferguson-Pratt, negó la posibilidad de libertad bajo fianza al empresario.

Después de la bancarrota de FTX, se anunció una investigación a la empresa conducida por Devlin N. Su, Ivan Snyder y David Brown, quienes forman parte de la unidad de cripto activos. El SEC se apoya de los juzgados estadounidenses, el FBI y la Comisión de Negociación de Futuros de Productos Básicos de Estados Unidos (CFTC), debido a que estas instituciones también están llevando procesos legales contra el Bankman-Fried.

La indagación acerca del motivo del derrumbe de FTX inició en Bahamas pero luego pasó a Estados Unidos ya que desde que se presentaron los documentos de la compañía, al inicio de la investigación, se sospechaba de conducta delictiva por parte de la empresa y su propietario, quien desde entonces se ha mantenido bajo la supervisión de las autoridades.

Gracias a la desconfianza creada en FTX y Bitcoin por la investigación, toda la industria de las criptomonedas ha recibido un impacto negativo, incluso la bolsa de FTX quebró, afectando a otras compañías de criptomonedas que no tienen nada que ver con el dilema del fundador de la empresa.

A pesar de las acusaciones recibidas, Sam Bankman-Fried desde el inicio se ha defendido argumentando que subestimó la cantidad necesaria para permitir el retiro de los clientes, lo que alarmó a los mismos.

Sin embargo, el antes millonario alegó en una entrevista previa no consentida por sus abogados que no engañó a los inversores de manera deliberada y que nunca intentó cometer fraude.

También había señalado que él tampoco tuvo oportunidad de sacar su propio dinero por lo que solo le quedaba una tarjeta de crédito con una deuda de $100,000 pero cuando se le interrogó acerca de los movimientos financieros de la empresa no dio información concreta a las autoridades correspondientes.

Antes de todo el fracaso de FTX, Bankman-Fried ostentaba un patrimonio estimado en $15,000 millones. Además la empresa había sido valorada por $32,000 millones luego de recaudar $1,800 millones desde su fundación en 2019.

Además, el fundador de FTX era considerado una de las figuras más relevantes dentro del negocio de las criptomonedas.

Solo hace dos años atrás la revista sobre negocios, Fortune, lo tuvo en su portada declarándolo el “nuevo Buffett”, haciendo la comparación con el gran inversor y empresario Warren Buffet, quien actualmente cuenta con un patrimonio neto de $108,1 miles de millones a sus 92 años.

El hoy acusado, inició su carrera dentro de las finanzas en Jane Street Canal, donde inició su interés en las criptodivisas, rápidamente decidió crear su propia empresa en el sector, Alameda Research.

No fue hasta dos años después que fundó FTX , para el intercambio de criptodivisas, junto a Zixiao “Gary” Wang.

El año pasado, la empresa entró en apogeo obteniendo más de un millón de usuarios y convirtiéndose en el tercer mercado más grande en cuanto a las criptomonedas hasta que se anunció su quiebra y Bankman-Fried renunció como director general.