La Ciudad de Saber conmemoró su vigésimo quinto aniversario de fundación con una siembra de banderas en el área de Clayton.
A un año de tocar el cielo
- 18/12/2023 09:20
- 18/12/2023 07:55
La historia nos ha demostrado que la paciencia, resiliencia y el no rendirse son puntos claves para un futbolista. Muchas de las cosas quizás no nos salga como queramos, pero la sed de revancha fue algo que no le hizo falta a muchos integrantes de la selección de Argentina.
Hace un año Argentina gritaba con mucha emoción e ilusión los goles de Ángel Di María, el doblete de Lionel Messi, las atajadas de Emiliano Dibu Martínez y el gol de penal de Gonzalo Montiel para coronarse como campeones del mundo frente a una poderosa Francia que buscaba repetir la hazaña que lograron años atrás en Rusia.
Este era el único título que le faltaba a Lionel Messi con la selección y según algunos integrantes del equipo campeón en Catar, su objetivo más allá de ser campeones, querían que su capitán y uno de los ídolos de Argentina cumpliera su sueño de ganar un Mundial después de perder la final del 2014 contra Alemania.
Al ser un día especial, mucho de los jugadores de ese plantel están de fiesta y han aprovechado las redes sociales para celebrar su primer aniversario como campeones del mundo. El primero de ellos fue el Dibu Martínez al escribir que “hoy no es un día cualquiera, hoy se cumple un año de mi sueño futbolístico, un día que siempre recordaré con una sonrisa y para toda la vida” en su red social de X.
Otro de los protagonistas fue el Fideo Di María, quien con un video incluido, siguió a sus demás compañeros en las redes y escribió con mucha emoción que lo logrado en Catar fue un “sueño” del todo el equipo.
”Hoy se cumple 1 año del gran sueño argentino en lo que respecta al fútbol. Me siento afortunado y un privilegiado de quedar en la historia del fútbol de nuestro país. Haber representado nuestra bandera con mucha garra, pasión y con todas mis fuerzas es algo que quedará en mi memoria para el resto de mi vida”, dijo.
“Este sueño nuestro, de cada uno de los que lo logramos, compañeros, amigos, utileros, cuerpo técnico, cocineros, cada unas de nuestras familias y cada argentino en cada rincón del país, hizo que esta felicidad sea para siempre. Nunca olvidaremos aquel 18 de diciembre donde vibraron todos los corazones celestes y blancos. Gracias eternas por acompañarnos y alentarnos en cada partido, sin alguno de todos ellos esto no hubiera sido posible. Feliz aniversario campeones”, relató el jugador que también estuvo presente en la final contra Alemania.
En esta celebración no podía faltar las palabras del capitán de la ‘albiceleste’. Messi también se expreso en redes sociales para celebrar este hecho histórico para Argentina.
”Un año de la locura más hermosa de mi carrera. Recuerdos inolvidables que quedarán para toda la vida. ¡Feliz aniversario para todos!”, escribió Messi en su cuenta de Instagram.
El camino a la gloria
Argentina llegaba a esta justa mundialista con una racha de 36 partidos sin perder (a un juego de empatar la marca de Italia entre 2018 y 2021), pero las cosas no empezaron de la mejor manera para los dirigidos por Lionel Scaloni.
Su mayor sorpresa fue caer en el primer duelo contra Arabia Saudita 2-1, un resultado que no se esperaba el mundo entero y mucho menos el plantel de Argentina. En los vestidores tras el partido contra los asiáticos reino el silencio y las miradas serias. Pero sabían que tenían dos oportunidades más para revertir lo ocurrido y no despedirse el Mundial tan temprano.
Contra México, un pletórico Messi, guio a los suyos para ganar el primer partido del torneo y los fantasmas se despojaron de la selección Argentina. Esta victoria para mantener vivo a los sudafricanos fue una inyección para saber que estaban para grandes cosas.
Frente a Polonia fue exactamente igual. Los argentinos sabían que debían ganar para quedar como primeros del grupo y evitar a un ‘coco’ en los octavos de final. Australia sería el rival a vencer para los argentinos y como marca la historia, los actuales campeones del mundo vencieron sin muchos problemas a la selección australiana. La Copa del Mundo estaba más cerca, pero ellos no sabían lo que el destino les tendría preparado.
En los cuartos de final tuvieron que verse las caras contra Países Bajos, un encuentro que fue de alto voltaje por los hechos que habían ocurrido previo al juego. El técnico Louis Van Gal calentó los ánimos y aseguró que si el partido se iba a los penales, ellos tendrían una ventaja contra los argentinos.
Estas y otras palabras del plantel no gustaron nada a los argentinos. El juego que se dio en Lusail fue más por el orgullo que por pasar a la siguiente ronda. Un gol de Nahuel Molina y Messi pusieron las cosas a favor para los suyos hasta que cayeron los dos tantos de Wout Weghorst. Ya en la tanda de penales, con los ánimos ya calentados, nuevamente el portero Martínez fue figura y dejó sin el pase a la neerlandeses.
Una vez en la zona mixta, los argentinos, entre ellos Messi, se descargaron y atribuyeron a que los neerlandeses no mantuvieron la humildad. “Van Gaal que tanto vende que juega bien, le tira pelotazos a los grandotes nomás”, lanzó el capitán al técnico neerlandés.
Las cosas no terminaron ahí y también tuvo palabras contra Weghorst. “No me gusta que se hable antes de los partidos, el 19 empezó a provocar, a chocarnos, a decirnos cosas y me parece que es no es parte del fútbol. Yo respeto a todo el mundo pero me gusta que me respeten también y creo que el técnico de ellos no fue respetuoso con nosotros. Es la calentura del momento, del partido y de la situación y queda ahí, obviamente”, señaló Messi ya calmado.
El siguiente rival para Argentina fue Croacia. Una oportunidad para dar revancha luego de que fueran los croatas quienes eliminaran a los argentinos en Rusia 2018. El encuentro fue todo para Argentina y con un sólido 3-0 enviaron a los subcampeones del mundo en ese entonces a jugar el partido por el tercer lugar.
Argentina jugaría su sexta final en la historia de Copas del Mundo. Messi y compañía tenían la oportunidad de oro para por fin conseguir el único título que les faltaba con la selección. La sorpresa mayúscula en este partido se la llevó Di María.
El atacante del Benfica pensó que jugaría por la derecha, como habitualmente lo hace con la selección. Pero Scaloni tenía otros planes para él contra Francia. El técnico argentino apostó por poner al Fideo por izquierda y no se lo hizo saber al jugador hasta instantes antes de la final.
El argumento de Scaloni fue de que los franceses no se esperarían ese cambio en el esquema y que ellos saldrían con Jules Koundé como lateral derecho. Esto sería un punto a favor de Di María, según Scaloni, ya que el lateral derecho no es la posición habitual del francés y podrían sacarle provecho a ello.
Scaloni liberó de las tareas defensivas a Di María y le dijo que aprovechara los espacios libres que dejaba Koundé en el lateral al irse al ataque junto con Ousmane Dembélé. Dicho y hecho Scaloni acertó en su planteamientos y Di María fue un completo dolor de cabeza para los franceses por izquierda.
Messi y Mbappé se encargaron de dar el principal show durante el partido. El argentino se apuntó un doblete, mientras que el francés hizo tres goles en la final para forzar la prórroga e irse a los penales. Aquí fue donde la figura de Martínez se agigantó en la portería para llevarse la gloria en Catar.
Kingsley Coman y Aurélien Tchouaméni terminaron siendo los villanos al errar sus tiros penales y fue Montiel que puso el gol ganador para que Argentina se llevará la Copa Mundial y estampar la tercera estrella en su uniforme.
Todo fue alegría para los argentinos que por fin volvían a ser campeones del mundo tras 36 años de sequía. El país argentino estaba de fiesta y el fútbol le hizo justicia a un equipo que estaba en búsqueda de su último título de sus vitrinas.
Este 18 de diciembre el pueblo argentino está de fiesta, ya que tocaron el cielo en la ciudad de Lusail, Catar al llevarse la Copa Mundial de la FIFA exactamente un año atrás.