Este viernes 20 de diciembre se conmemoran los 35 años de la invasión de Estados Unidos a Panamá. Hasta la fecha se ignora el número exacto de víctimas,...
- 30/08/2021 00:00
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Gafas con marco de pasta trasparentes y aros redondos; detrás de ellos… dos ojos claros que parpadean repetidamente, mimando el sonido de una vocecita que agradece nuestra entrevista. Yo aparto el florero del centro de la mesa y veo sus cabellos cortos, de color plateado y sus cejas teñidas en la misma manera para que una cara redonda, con una encantadora sonrisa capture una infinidad de matices, ayudándome a descifrar la increíble energía poseída por esta jovencita artistas del cual hoy les quisiera hablar.
¿Conoces a la pintora Momo, la que esta exponiendo en la Galeria Mateo Sariel? Así me preguntaba mi hija Denisse; en verdad en un primer momento, desconocía de quien se trataba, aunque si el nombre Momo me llegaba a los oídos con gracia y alegría. Denisse me decía que esta jovencita muchacha, poseía una carga (energía) diferente y que días atrás (Momo) había organizado hacer un mural, con el reciclaje de las tapas de las diferentes marcas de bebidas que existen en los comercios de Panamá.
Allí fue donde comencé a recordar y comprender por qué en mi casa había una bolsa donde se recogían cada tipo de tapas de botellas y las escapadas de Denisse a ayudar en la realización de este particular mural o “intervenciones” (como suele aclarar Momo).
La curiosidad por conocer lo qué hacia Momo, viene solicitada desde mis íntimos momentos por Patricia, que sin ahorrar palabra me hablaba de las performances artísticas realizadas por este nuevo talento, de la acogida que las redes sociales tenían y sobre todo de aquel mundo juvenil panameño que lucha por hacer nuevas cosas para crear espacios alternativos a la oficialidad… entonces decidí de entrevistarla para los seguidores de Café Estrella y conocer la intimidad de este joven talento.
Momo es una joven, talento panameño de 23 años, que ha tenido un crecimiento igual a los miles de jóvenes panameños nacidos en torno al final de los años setenta… cursa su escuela con mucha tranquilidad, sus padres, de profesiones lejanas a las artes (contadores y finanzas), ven crecer el talento de esta inquieta niña… y deciden que frecuente las clases de ballet (un clásico dentro de las familias panameñas) “yo era demasiado gordita para hacer ballet, ¡eso nunca lo entendí!” así me dice Momo disparando una fuerte carcajada y continua diciéndome que tuvo que cambiarse para dedicarse al deporte de remo en cayuco… a pesar de estar casi 11 años en la disciplina del ballet.
Termina su bachillerato en ciencias y letras en el Oxford High School y se traslada a los Estados Unidos a cursar clases en el Florida State University (2017/19) terminando su Bachelor Of Fine Arts in Studio Art; años donde encuentra sus espacios, su intimidad y enfrentas sus anhelos: “Creo que sí, he estado preparada para superar mis obstáculos y buscar mis metas; estar lejos de mi país y de mi familia nos ayuda a encuadrar mejor las cosas de la vida” frase que nos prepara a conocerla mas a fondo.
A mi pregunta ¿al realizar una obra, primero la piensa? Abre las manos al cielo y sonriendo me dice: “Yo hago mi sancocho de muchas cosas dentro de mi cabeza… después voy jalando por aquí y por allá hasta completar mi idea”. Jugosa respuesta que bien representa a nuestra creativa juventud. Al continuar con mis preguntas sobre “las necesidades de nuestro país”, arma sus respuestas y enumerando con mucha precisión me dice rápidamente lo siguiente:
“1. Exponer a las personas a las artes, 2. Elevar el nivel educativo, 3. Elevar la calidad de las expresiones artísticas que se presentan en los espacios públicos” ¡Vaya futuro que nos espera! Eso es lo primero que pienso mirándola agradecido.
Momo ¿Qué esperas de tu arte?, inmediata es la respuesta: “Seguir produciendo, obtener nuevos espacios, continuar experimentando”.
Entres las importantes presentaciones que Momo ha realizado, recordemos la exposición de Gamboa, una performance artística, donde marca los confines donde ella se moverá “pertenecer a lo que me rodea” subraya. Acción efímera donde, a escondidas, a manera de camuflaje queda integrada al espacio verde por más de 4 horas. Esta segunda presentación -a su llegada del exterior, en tiempo de pandemia- es muy recordada por los medios y los interesados a las novedades que se están realizado en el ámbito propositivo y alternativo en la capital de Panamá.
Pruebo a cambiar el tipo de entrevista y hago el sistema guerrilla, preguntas flash y respuestas rápidas y miren lo que paso.
P.¿óleo o Acrílico?
R. Óleo,
P. ¿Ministerio de Cultura?
R. No ha hecho muchos cambios, está fuera de la excelencia, no hay investigación
¿Qué debemos hacer?
R. Crear máss espacios multidisciplinarios, llenarlos de arte experimental,
P. ¿Tu pintor preferido?
R. James Ensor con su obra: Autorretrato con sombrero. También Matisse.
P. ¿Qué es la identidad panameña?
R. Un guacho de muchas cosas, ¿Quién soy yo?, arroz con pollo y tamales a diciembre. Sabes… es muchas cosas,
En su cara se dibuja una alegra sonrisa y yo rápidamente sigo:
P. ¿Intimidad en el taller o pintar fuera, en la calle entre la gente?
R. Taller, con mi intimidad.
P. ¿Artistas panameños?
R. Ana Elena Garuz, Andres Arias y Chochez,
P. ¿Salsa o Reguetón?
R. Salsa de los domingos, esas de nuestros padres, con la barbacoa casera.
No pude seguir preguntando pues la risa nos contagió y me di cuenta que podemos dormir sueños tranquilos, pues esta generación de nuevos jóvenes artistas, viene dotados de frescas memorias, sin pudores, prontos a retomar las riendas de nuestra pintura, con conceptos claros y preparación envidiable.
Las tendencias que vienen dominando el hacer artístico, llevan a conceptualizar las obras bajos nuevas maneras. Los objetos vienen interpretados bajo evocaciones de pertenencias, de experiencias de lo vivido, considerados dentro un ámbito privado y poseídos a través de representaciones iconográficas que, en vez de describirlos en su verdad declarada, los reducen a símbolos y a iconos de personal interpretación. Esas acciones pictóricas vienen sostenidas bajo las experiencias de las vanguardias modernas, de las búsquedas que anteriormente se han realizado, evitando cargar de contenido la propia acción ejecutiva… proponiendo nuevas maneras de trabajar las obras pictóricas. Adquiriendo libertad en la representación y en el utilizo de las dinámicas que sostienen tradicionalmente el ejercicio pictórico. Es así notamos una libertad en el utilizo del color, en el equilibrio de la composición, en la dinámica del material pictórico.
El trabajo de Momo se coloca bajo estas libertades mencionadas, además cuenta con una autonomía poco común a los jóvenes pintores panameños y esta es la simplicidad de conjugar muchas cosas bajo una pensada regia. Su manera de apoderarse de “un discurso unificado” le sirve para gritarnos el grado de dominio en saberse proponer a su publico.
La fuerza de sus operaciones y acciones artísticas son cubiertas por una elevada conciencia creativa, pues lo que nos golpea —en la complejidad de sus razonamientos— es que Momo concretiza su trabajo bajo claras intenciones… por eso su mensaje nos llega directo y claro.
Momo estará en Septiembre en un proyecto de la Casa del Soldado de Guatemala, en marzo ha agendado N,Y. además de una colectiva de “Mujeres en el Trópico” en el Mac de Panamá.
Agradeciendo a Momo por brindarnos esta oportunidad, quisiera terminar con una frase que siempre me ha guiado en poder detectar cuando siento que estoy frente a un talento que sabe a genialidad, y es una simple manera de observar a los artistas, en general: “El artista viaja junto a su obra; y la obra y la vida son una sola cosa”. En Momo el personaje se une a la obra, no hay duda alguna. Éxitos y bienvenida.