Cuentos y poesía

El Lavadero

Actualizado
  • 03/08/2024 00:00
Creado
  • 02/08/2024 15:08
La autora
Osiris Chacón. Nacida en la comunidad de Puerto Caimito, se le conoce popularmente como “Coqui”, la madre de los mellos, la maestra, la coordinadora de la Iglesia, y de muchas otras manera. Ella es educadora de primaria en la Escuela Victoriano Chacón, catequista de primera comunión, también de confirmación y brinda charlas prematrimoniales. Sus aportes significativos benefician a las personas de su comunidad y contribuyen al bien de la sociedad. Es un referente en el tema histórico en la comunidad de Puerto Caimito, una verdadera portadora oral porteña.
Coqui es una Mujer sencilla, desapegada y amable. Durante su participación en el programa afro-formativo la ‘Costa es Poesía’ brilló su don y sabiduría para recrear escenas que se pudieron grabar como una alianza de épiCA con la cineasta Xochil Vergara, y que constituyen un aporte a la historia comunal.
En la ‘Costa es Poesía’, se utiliza la poesía como una herramienta creativa y terapéutica, proporcionando un espacio donde las participantes pueden expresar sus experiencias, emociones y perspectivas de manera única y personal.

Esperaba el despuntar del alba,

para sus voces volver a escuchar

risas, cantos, llantos y alegrías;

colores de tierra y aromas se sentían

con sus cargas en cabeza,

llegaban todas a lavar.

Bajo la sombra del caimito

mujeres de color fuerte,

entre risas de chiquillos

a sacar agua del pozo

porque la ropa hay que lavar.

Con roletes en la cabeza y latas para llevar,

agua limpia y cristalina

del pozo íbamos a sacar

a llenar el lavadero a bomba de mano, vamos a lavar.

Ya se comparte el alimento

que con leña cocino.

a bañarse todos niños

y recuerda mi negrita,

con tu agua en la cabeza

la tinaja de casa hay que llenar.

El olor de la hierba y el bramar de animales,

los diversos colores ya en el alambre tendidos

unos a punta de golpes, otras por restregar

como banderas de felicidad,

ondeaban las sábanas y ropajes

que por la noche mucho abrigo te dará.

Y de regreso a casa al término del mediodía,

mujeres y niños

con su carga en la cabeza;

entre cantos, aguas y sonrisas

y dando gracias a dios

el lavadero amanecerá otro día.