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‘El boxeo necesita comenzar de cero’, dice expresidente de comibox capitalina

El monarca superligero Alberto Puello (Der.) es uno de los dos titulares que tiene Dominicana en el boxeo profesional. |Cedida
El capitalino Jezreel Corrales ha sido el último monarca que ha tenido nuestro país. |Cedida
La actividad boxística panameña necesita una inyección mucho más directa del gobierno y de sus dirigentes. |Cedida
Actualizado
  • 01/07/2024 00:00
Creado
  • 30/06/2024 18:42

La lista de derrotas en 2023 se extendió a más de treinta, liderados por el colonense Omir Rodríguez

“El boxeo panameño está para los tigres y no hablo precisamente de la actividad, porque esta sigue boyante con el patrocinio incondicional y millonario del gobierno a promotores del patio y foráneos”, afirmé hace ocho meses en este mismo espacio.“Hablo de nuestros púgiles, aquellos que son dejados a un lado una y otra vez por las promotoras para favorecer a boxeadores extranjeros, aunque las carteleras sean en nuestro patio”, agregué.

Como dije, eso lo escribí hace ocho meses y las cosas no han cambiado. Creo que están peores.

Los boxeadores siguen cayendo uno a uno, como soldaditos de plomo, que van a una misión suicida, en cada una de las pruebas importantes que tienen en el exterior.

El grupo no es muy grande porque tampoco es que se desborde el listado de púgiles con algo de historia, pero el mismo lo encabezan los excampeones Anselmo Moreno y Jezreel Corrales, además de Azael Villar, Zaida y Orlando Mosquera y Bryan Degracia.

La lista de derrotas en 2023 se extendió a más de treinta, liderados por el colonense Omir Rodríguez, quien ha perdido 15 de sus últimas 16 peleas en el último año y medio.

Hace nueve años que coronamos a nuestro último campeón mundial y en el horizonte no se ve ninguno con posibilidades, ya que como advertimos, los mejorcitos están cayendo uno a uno.

Responsabilidad compartida

¿Qué es lo que acontece en nuestro boxeo? ¿De quién o quiénes es la falla?

Para el expresidente de la comisión de boxeo de Panamá, Miguel Prado, la responsabilidad se reparte entre los miembros de la familia: comisiones de boxeo, promotores, apoderados y boxeadores.

“Nosotros estamos ahora mismo en cero en el boxeo profesional y hay que comenzar nuevamente. Eso conlleva que todos los estamentos que tienen que ver con el boxeo, se hagan responsables del mismo”, dijo Prado.

“Se necesita un promotor que haga peleas, un representante que ayude a sus pupilos y los mantenga, boxeadores que tengan hambre de triunfo y por supuesto, una comisión que participe, porque no lo está haciendo”, precisó.

Prado señaló que el boxeo olímpico también está “de capa caída” por lo que ‘soltó’ la idea de unir a las dos actividades, profesional y aficionada, en un solo ente rector por un periodo de tiempo.

“En estos instantes necesitamos unificar ambas actividades en una sola, tener un solo dirigente que maneje ambos grupos con un nuevo reglamento durante un periodo”, apuntó.

Prado sostuvo que es solo una idea, pero podría conversarse porque si bien es cierto que hay actividad boxística, no hay calidad, mucho menos de los púgiles del patio.

“Aquí no es cuestión de cantidad de la actividad boxística sino de calidad”, afirmó.

Dominicana, un ejemplo

República Dominicana tiene actualmente dos campeones mundiales. Alberto Puello, monarca superligero de la AMB; y Carlos Adames, titular mediano del Consejo Mundial de boxeo.

Si bien, tanto Puello como Adames están desarrollando sus respectivas carreras en Estados Unidos desde el 2021, es obligante mirar hacia esas tierras, que actualmente tiene entre siete u ocho púgiles clasificados mundialmente.

Dos de ellos son: Eric ‘Mini Pacman’ Rosa, quien con solo siete peleas como profesional ya tiene un título acuesta (mínimo AMB) y Edwin De Los Santos, quien acaba de perder una decisión con Shakur Stevenson en disputa del cetro vacante ligero del CMB.

También vale mencionar a Héctor Luis García, quien fuera campeón superpluma de la AMB en 2022, y al año siguiente perdió dos pleitos por títulos del mundo con Gervonta Davis y Lamont Roach.

Para los Juegos Olímpicos de París, el país caribeño tendrá como representantes a Yunior Alcántara, María Moronta y Cristian Pinales, mientras que Panamá tendrá como única representación, a la excampeona mundial Ateyna Bylon.

Para Prado este país es un buen ejemplo porque reúnen la mayor parte de los elementos, que ha mencionado como necesarios para enrumbar el boxeo panameño.

“Necesitamos promotores que promuevan a los nuestros. En Dominicana, por ejemplo, hacen programas con los de ellos, mientras que aquí los promotores extranjeros traen a sus pupilos de afuera para promover sus carreras”, dijo.

“Los promotores internacionales hacen cartillas con los boxeadores de ellos y, claro, ponen a los nuestros, pero la idea es promover a sus púgiles, no a los panameños”, recalcó.

Prado indicó que durante su periodo como presidente de la Comibox “había promotores, peleadores con hambre de triunfos, peleas de calidad y la labor de la comisión también era la de involucrar a los organismos internacionales”.

Sobre el particular, el periodista y locutor panameño Héctor Villarreal, señaló que la diferencia entre Panamá y República Dominicana es su estructura dirigencial. “Allá los comisionados, anunciadores, entrenadores, son empleados del Ministerio de Deportes y los boxeadores y promotores reciben subsidio del gobierno”, explicó Villarreal, quien ha trabajado como anunciador y comentarista en el país caribeño.

“Acá nombran de comisionados a gente que no fueron boxeadores, ni entrenadores, ni narradores, ni promotores. Solo quieren figurar y no se les puede exigir, porque te dicen: ‘Es que yo hago esto gratis’”, detalló.

“Allá los promotores se apoyan y están unidos porque se trata de un proyecto de país”, matizó.

Por su parte, el experimentado periodista dominicano Carlos Nina Gómez indicó que en su país no hay un auge del boxeo como tal, pero aceptó que las funciones que se realizan, en su mayoría, son con púgiles nacionales y con buena calidad.

Precisó que los dos campeones que tienen, Puello y Adames, desarrollan mayormente su carrera en el extranjero, como lo están haciendo una gran parte de los púgiles dominicanos clasificados que, en ocasiones, ven acción en las funciones locales.