Vacunación, la agenda pendiente en Panamá y las Américas
- 26/04/2024 00:00
- 25/04/2024 16:19
A pesar de los grandes avances que se han realizado en cuanto al tema de vacunas, los niveles de inmunización en la región siguen por debajo de lo requerido, ¿a qué se debe esto? La vacunación tiene un papel importante en América Latina en la prevención de enfermedades infecciosas. Después del control de la propagación del virus SARS-CoV-2, se ha demostrado lo necesaria que es la rápida inmunización de las personas para evitar epidemias y pandemias.
El doctor Francisco Becerra Posada, médico, investigador y ex subdirector de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), destaca que este es un objetivo por el cual este organismo viene trabajando hace 50 años con el Programa Ampliado de Inmunización (PAI) en las Américas.
“Esta comienza en 1974 como una estrategia de la Organización Mundial de la Salud para trabajar de una manera ordenada y lograr que la vacunación llegue a todos lados. De ahí vino mucho avance [en cuanto a las vacunas] y creo que ahí es donde tenemos que entender cómo es una estrategia que puede abrir las puertas a muchos otros”, destacó.
La iniciativa fue adoptada por la región latinoamericana cuatro años después de su inicio, en 1977. Antes de su implementación solo se contaba con seis vacunas en las Américas y actualmente hay más de 16 esquemas de vacunación en estos países, lo que es importante porque demuestra la gran evolución de esta tecnología para la prevención de enfermedades.
Sin embargo, no todo es positivo en América Latina. Después de la pandemia existe una gran deficiencia en las tasas de vacunación, que venían decayendo desde antes de 2019, de acuerdo con el infectólogo pediatra Carlos Torres.
Caso Panamá De hecho, en el caso de Panamá se destaca que aunque hay éxito en la vacunación en la mayoría de la población de recién nacidos y niños en edades escolares, adolescentes, mujeres embarazadas, las personas adultas y la población adulta mayor queda rezagada en cuanto a las inmunizaciones.
El doctor Becerra mencionó a ‘La Decana’ que esto podría deberse a la poca información en las personas, así como las creencias populares; por ejemplo, en diferentes países se cree que la vacuna por el virus del papiloma humano (VPH) es una invitación a que adolescentes inicien su vida sexual.
Realmente la vacuna busca prevenir enfermedades peligrosas como el cáncer cervicouterino, que es uno de los tres cánceres más prevalentes entre las mujeres y con un gran porcentaje de mortalidad.
Por otro lado, el doctor Torres señala que debería estudiarse el seguimiento de las vacunas a lo largo de la vida en el país. “Sería maravilloso explorar la vacunación a lo largo de la vida, porque la vacunación no es de los niños solamente, sino de todos”, dijo a La Estrella de Panamá.
Panamá no es el único país afectado por la falta de equidad en la vacunación entre los diferentes grupos que conforman la ciudadanía de los países latinoamericanos.
Otros países que se encuentran por debajo de Panamá son Cuba, Guatemala, Brasil, México, Argentina y Colombia; estos cuentan con problemas similares a los de Panamá en cuanto a la inmunización de las personas.
El futuro Para contrarrestar esto, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ideó en 2021 la Agenda de Inmunización 2030 (AI2030), la cual establece una visión integral para lograr la vacuna durante este decenio con el objetivo de que la vacunación llegue a la mayor cantidad de personas posible.
Para esto se basan en el reconocimiento de los problemas persistentes en las diferentes regiones del mundo, las enseñanzas extraídas de momentos como la pandemia por SARS-CoV-2 y las nuevas oportunidades para afrontar las enfermedades infecciosas.
De acuerdo con la AI2030, la inmunización es un factor clave para respetar el derecho fundamental de las personas a disfrutar del mayor grado posible de salud física y mental, situándola como una inversión de futuro a través de la creación de un mundo más sano, seguro y próspero para todos.
Con esta agenda se aspira a conseguir que mantengamos los avances alcanzados con tanto esfuerzo y también que logremos más sin dejar a nadie atrás, en ninguna circunstancia o etapa de la vida.
La iniciativa AI2030 se diseñó para motivar y coordinar las actividades de diversos actores a nivel comunitario, nacional, regional y mundial, incluidos gobiernos nacionales, organismos regionales, agencias globales, socios para el desarrollo, profesionales de la salud, instituciones académicas y de investigación, desarrolladores y fabricantes de vacunas, el sector privado y la sociedad civil.
Su impacto se maximizará si se utilizan los recursos de manera más eficaz y eficiente, se fomenta la innovación para mejorar el rendimiento y se implementan estrategias para lograr la sostenibilidad tanto financiera como programática.
El éxito de esta iniciativa dependerá de establecer y fortalecer alianzas dentro y fuera del sector de la salud, como parte de un esfuerzo coordinado para mejorar el acceso a atención primaria de salud asequible y de alta calidad, avanzar hacia la cobertura sanitaria universal y acelerar el progreso hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) 2030.
Carlos TorresInfectólogo pediatraSería maravilloso explorar la vacunación a lo largo de la vida, porque la vacunación no es de los niños solamente, sino de todos”
La vacunación tiene un papel importante en América Latina en la prevención de enfermedades infecciosas. Después del control de la propagación del virus SARS-CoV-2, se ha demostrado lo necesaria que es la rápida inmunización de las personas para evitar epidemias y pandemias.
El doctor Francisco Becerra Posada, médico, investigador y ex subdirector de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), destaca que este es un objetivo por el cual este organismo viene trabajando hace 50 años con el Programa Ampliado de Inmunización (PAI) en las Américas.
“Esta comienza en 1974 como una estrategia de la Organización Mundial de la Salud para trabajar de una manera ordenada y lograr que la vacunación llegue a todos lados. De ahí vino mucho avance [en cuanto a las vacunas] y creo que ahí es donde tenemos que entender cómo es una estrategia que puede abrir las puertas a muchos otros”, destacó.
La iniciativa fue adoptada por la región latinoamericana cuatro años después de su inicio, en 1977. Antes de su implementación solo se contaba con seis vacunas en las Américas y actualmente hay más de 16 esquemas de vacunación en estos países, lo que es importante porque demuestra la gran evolución de esta tecnología para la prevención de enfermedades.
Sin embargo, no todo es positivo en América Latina. Después de la pandemia existe una gran deficiencia en las tasas de vacunación, que venían decayendo desde antes de 2019, de acuerdo con el infectólogo pediatra Carlos Torres.
De hecho, en el caso de Panamá se destaca que aunque hay éxito en la vacunación en la mayoría de la población de recién nacidos y niños en edades escolares, adolescentes, mujeres embarazadas, las personas adultas y la población adulta mayor queda rezagada en cuanto a las inmunizaciones.
El doctor Becerra mencionó a ‘La Decana’ que esto podría deberse a la poca información en las personas, así como las creencias populares; por ejemplo, en diferentes países se cree que la vacuna por el virus del papiloma humano (VPH) es una invitación a que adolescentes inicien su vida sexual.
Realmente la vacuna busca prevenir enfermedades peligrosas como el cáncer cervicouterino, que es uno de los tres cánceres más prevalentes entre las mujeres y con un gran porcentaje de mortalidad.
Por otro lado, el doctor Torres señala que debería estudiarse el seguimiento de las vacunas a lo largo de la vida en el país. “Sería maravilloso explorar la vacunación a lo largo de la vida, porque la vacunación no es de los niños solamente, sino de todos”, dijo a La Estrella de Panamá.
Panamá no es el único país afectado por la falta de equidad en la vacunación entre los diferentes grupos que conforman la ciudadanía de los países latinoamericanos.
Otros países que se encuentran por debajo de Panamá son Cuba, Guatemala, Brasil, México, Argentina y Colombia; estos cuentan con problemas similares a los de Panamá en cuanto a la inmunización de las personas.
Para contrarrestar esto, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ideó en 2021 la Agenda de Inmunización 2030 (AI2030), la cual establece una visión integral para lograr la vacuna durante este decenio con el objetivo de que la vacunación llegue a la mayor cantidad de personas posible.
Para esto se basan en el reconocimiento de los problemas persistentes en las diferentes regiones del mundo, las enseñanzas extraídas de momentos como la pandemia por SARS-CoV-2 y las nuevas oportunidades para afrontar las enfermedades infecciosas.
De acuerdo con la AI2030, la inmunización es un factor clave para respetar el derecho fundamental de las personas a disfrutar del mayor grado posible de salud física y mental, situándola como una inversión de futuro a través de la creación de un mundo más sano, seguro y próspero para todos.
Con esta agenda se aspira a conseguir que mantengamos los avances alcanzados con tanto esfuerzo y también que logremos más sin dejar a nadie atrás, en ninguna circunstancia o etapa de la vida.
La iniciativa AI2030 se diseñó para motivar y coordinar las actividades de diversos actores a nivel comunitario, nacional, regional y mundial, incluidos gobiernos nacionales, organismos regionales, agencias globales, socios para el desarrollo, profesionales de la salud, instituciones académicas y de investigación, desarrolladores y fabricantes de vacunas, el sector privado y la sociedad civil.
Su impacto se maximizará si se utilizan los recursos de manera más eficaz y eficiente, se fomenta la innovación para mejorar el rendimiento y se implementan estrategias para lograr la sostenibilidad tanto financiera como programática.
El éxito de esta iniciativa dependerá de establecer y fortalecer alianzas dentro y fuera del sector de la salud, como parte de un esfuerzo coordinado para mejorar el acceso a atención primaria de salud asequible y de alta calidad, avanzar hacia la cobertura sanitaria universal y acelerar el progreso hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) 2030.