Un tesoro llamado Matusagaratí
- 18/04/2025 00:00
La reciente designación de Matusagaratí como un humedal de relevancia internacional o sitio Ramsar, se apoya en la información generada a través de la investigación científica Cuando se pusieron en marcha las investigaciones científicas del equipo liderado por la doctora Indra Candanedo en Matusagaratí, provincia de Darién, uno de los objetivos de fondo era que toda la información generada a partir de los estudios in situ ayudara a elevar la protección de este sistema de humedales, el más extenso de Panamá.
Hablamos de una meta que hoy es tangible, tras el anuncio esta semana de la designación del complejo de humedales de Matusagaratí como “Humedal de Importancia Internacional” o sitio Ramsar, el 2.566 de la lista mundial y el sexto de Panamá tras las pasadas designaciones del golfo de Montijo (Veraguas), bahía de Panamá (Panamá), San San Pond Sak y Damani Guariviara (Bocas del Toro y la comarca Ngäbe Buglé) y Punta Patiño (Darién).
La Convención Ramsar es un tratado internacional establecido en 1971 que insta a los países a proteger y utilizar racionalmente los humedales. Más de 172 países han ratificado el tratado, incluyendo Panamá.
La selección de los humedales registrados en la Lista Ramsar se basa en su importancia internacional “en términos ecológicos, botánicos, zoológicos, limnológicos o hidrológicos” y con la inclusión en este inventario de humedales se espera que las partes contratantes de la convención “manejen los sitios a fin de mantener sus características ecológicas y sus funciones y valores esenciales para las generaciones futuras”, detalla el portal oficial de la convención www.ramsar.org.
“Nuestras investigaciones se utilizaron para cumplir los requisitos de información que la Convención Ramsar exige para que los países puedan hacer designaciones. ¡Fue un trabajo en el que participaron muchas personas!”, manifestó la doctora Candanedo instantes después de la designación de Matusagaratí.
La investigadora se refiere concretamente a dos proyectos de investigación que lideró en Matusagaratí, en conjunto con un equipo de unas 15 personas aproximadamente. Los proyectos fueron “Hidrología, vegetación y avifauna del complejo de humedales de Matusagaratí, Darién” (2019–2020) y “Proyecto hidrología, reservas de carbono, plantas y peces de Matusagaratí, Darién” (2022-2023). Ambos fueron ejecutados por la Universidad Tecnológica de Panamá (UTP) y el Centro de Estudios Multidisciplinarios en Ciencias, Ingeniería y Tecnología (Cemcit AIP) y ambos contaron con el financiamiento de la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Senacyt), por medio de convocatorias públicas de fomento a I+D.
A través de cinco años de levantamiento de información básica sobre la topografía, hidrología y biodiversidad, un grupo de investigadores interdisciplinarios acompañado por organizaciones no gubernamentales locales y nacionales, junto con asociaciones de productores, estudiantes y profesionales locales, fueron documentando todo el proceso investigativo que dio sustento a la información científica requerida para completar las fichas técnicas solicitadas por el organismo internacional de sitios Ramsar, además de realizar consultas abiertas para conocer la opinión de la comunidad y sus diferentes organizaciones sobre la declaración del humedal como sitio Ramsar, detallan Luz Cruz, jefa del Departamento de Capacidades al Investigador de la Senacyt, y Milagro Mainieri, directora de Investigación y Desarrollo (I+D) de la Senacyt.
“Desde la Senacyt acompañamos con mucha ilusión la investigación más importante del humedal más grande de Panamá y hemos sido testigos de los hallazgos científicos y del dimensionamiento del área del humedal y todos los servicios ecosistémicos que ofrece a la comunidad del Darién: agua, biodiversidad, captura de carbono, alta productividad pesquera y, al tiempo, documentar el papel de Darién como sitio de intercambio de especies entre el norte y el sur de América”, destacan Cruz y Mainieri.
El “Proyecto hidrología, reservas de carbono, plantas y peces de Matusagaratí, Darién”, el primero desarrollado por la doctora Candanedo, se centró en la dinámica hídrica, la vegetación y las aves del humedal.
Utilizando imágenes satelitales, drones y trabajo de campo, se identificaron 10 tipos de humedales, incluyendo algunos nuevos para Panamá, y se estimó, en un principio un área total de 56.250 hectáreas.
Gracias a esta primera investigación se confirmó que Matusagaratí es el humedal más extenso de Panamá y que, en realidad, no es un humedal, sino un complejo de humedales con su dinámica e interacciones propias.
También se evidenció la presencia de 259 especies de aves, 409 especies de plantas y 51 especies de peces, además de turberas en diversos bosques del sitio, las cuales estarían almacenando alrededor de 3.200 kilotoneladas de carbono.
Mientras que el segundo proyecto “Hidrología, reservas de carbono, plantas y peces de Matusagaratí” amplió la anterior investigación, incorporando estudios sobre el carbono almacenado en los bosques de cativo, orey y mixtos, así como sobre las especies de peces y su importancia para las comunidades locales.
Como parte de este estudio también se documentaron 32 especies de mamíferos, incluyendo murciélagos, roedores, primates, puercos salvajes y felinos como ocelote, puma y jaguar.
Diez artículos científicos, cuatro documentos técnicos y el portal matusagarati.com (con los detalles de las investigaciones realizadas en el sitio, informes, mapas digitales, fotografías y demás), son otros resultados que dejaron los estudios en Matusagaratí, apunta la doctora Candanedo, especialista en biología de la conservación y docente e investigadora de la UTP, Centro Regional de Panamá Oeste.
Los procesos que usan la información generada por una investigación científica para políticas públicas suelen requerir de tiempo, añade la investigadora. Y amplía: “Nos ha tomado cuatro años de trabajo paralelo lograr la aprobación como sitio Ramsar. La Convención Ramsar exige toda una serie de datos, una ficha técnica, y todos fueron aportados gracias a las investigaciones científicas”.
La página www.ramsar.org destaca que Matusagaratí cuenta con 64.750 hectáreas y que no solo es el mayor humedal de Panamá, sino uno de los más extensos de América Central.
Cuando se pusieron en marcha las investigaciones científicas del equipo liderado por la doctora Indra Candanedo en Matusagaratí, provincia de Darién, uno de los objetivos de fondo era que toda la información generada a partir de los estudios in situ ayudara a elevar la protección de este sistema de humedales, el más extenso de Panamá.
Hablamos de una meta que hoy es tangible, tras el anuncio esta semana de la designación del complejo de humedales de Matusagaratí como “Humedal de Importancia Internacional” o sitio Ramsar, el 2.566 de la lista mundial y el sexto de Panamá tras las pasadas designaciones del golfo de Montijo (Veraguas), bahía de Panamá (Panamá), San San Pond Sak y Damani Guariviara (Bocas del Toro y la comarca Ngäbe Buglé) y Punta Patiño (Darién).
La Convención Ramsar es un tratado internacional establecido en 1971 que insta a los países a proteger y utilizar racionalmente los humedales. Más de 172 países han ratificado el tratado, incluyendo Panamá.
La selección de los humedales registrados en la Lista Ramsar se basa en su importancia internacional “en términos ecológicos, botánicos, zoológicos, limnológicos o hidrológicos” y con la inclusión en este inventario de humedales se espera que las partes contratantes de la convención “manejen los sitios a fin de mantener sus características ecológicas y sus funciones y valores esenciales para las generaciones futuras”, detalla el portal oficial de la convención www.ramsar.org.
“Nuestras investigaciones se utilizaron para cumplir los requisitos de información que la Convención Ramsar exige para que los países puedan hacer designaciones. ¡Fue un trabajo en el que participaron muchas personas!”, manifestó la doctora Candanedo instantes después de la designación de Matusagaratí.
La investigadora se refiere concretamente a dos proyectos de investigación que lideró en Matusagaratí, en conjunto con un equipo de unas 15 personas aproximadamente. Los proyectos fueron “Hidrología, vegetación y avifauna del complejo de humedales de Matusagaratí, Darién” (2019–2020) y “Proyecto hidrología, reservas de carbono, plantas y peces de Matusagaratí, Darién” (2022-2023). Ambos fueron ejecutados por la Universidad Tecnológica de Panamá (UTP) y el Centro de Estudios Multidisciplinarios en Ciencias, Ingeniería y Tecnología (Cemcit AIP) y ambos contaron con el financiamiento de la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Senacyt), por medio de convocatorias públicas de fomento a I+D.
A través de cinco años de levantamiento de información básica sobre la topografía, hidrología y biodiversidad, un grupo de investigadores interdisciplinarios acompañado por organizaciones no gubernamentales locales y nacionales, junto con asociaciones de productores, estudiantes y profesionales locales, fueron documentando todo el proceso investigativo que dio sustento a la información científica requerida para completar las fichas técnicas solicitadas por el organismo internacional de sitios Ramsar, además de realizar consultas abiertas para conocer la opinión de la comunidad y sus diferentes organizaciones sobre la declaración del humedal como sitio Ramsar, detallan Luz Cruz, jefa del Departamento de Capacidades al Investigador de la Senacyt, y Milagro Mainieri, directora de Investigación y Desarrollo (I+D) de la Senacyt.
“Desde la Senacyt acompañamos con mucha ilusión la investigación más importante del humedal más grande de Panamá y hemos sido testigos de los hallazgos científicos y del dimensionamiento del área del humedal y todos los servicios ecosistémicos que ofrece a la comunidad del Darién: agua, biodiversidad, captura de carbono, alta productividad pesquera y, al tiempo, documentar el papel de Darién como sitio de intercambio de especies entre el norte y el sur de América”, destacan Cruz y Mainieri.
El “Proyecto hidrología, reservas de carbono, plantas y peces de Matusagaratí, Darién”, el primero desarrollado por la doctora Candanedo, se centró en la dinámica hídrica, la vegetación y las aves del humedal.
Utilizando imágenes satelitales, drones y trabajo de campo, se identificaron 10 tipos de humedales, incluyendo algunos nuevos para Panamá, y se estimó, en un principio un área total de 56.250 hectáreas.
Gracias a esta primera investigación se confirmó que Matusagaratí es el humedal más extenso de Panamá y que, en realidad, no es un humedal, sino un complejo de humedales con su dinámica e interacciones propias.
También se evidenció la presencia de 259 especies de aves, 409 especies de plantas y 51 especies de peces, además de turberas en diversos bosques del sitio, las cuales estarían almacenando alrededor de 3.200 kilotoneladas de carbono.
Mientras que el segundo proyecto “Hidrología, reservas de carbono, plantas y peces de Matusagaratí” amplió la anterior investigación, incorporando estudios sobre el carbono almacenado en los bosques de cativo, orey y mixtos, así como sobre las especies de peces y su importancia para las comunidades locales.
Como parte de este estudio también se documentaron 32 especies de mamíferos, incluyendo murciélagos, roedores, primates, puercos salvajes y felinos como ocelote, puma y jaguar.
Diez artículos científicos, cuatro documentos técnicos y el portal matusagarati.com (con los detalles de las investigaciones realizadas en el sitio, informes, mapas digitales, fotografías y demás), son otros resultados que dejaron los estudios en Matusagaratí, apunta la doctora Candanedo, especialista en biología de la conservación y docente e investigadora de la UTP, Centro Regional de Panamá Oeste.
Los procesos que usan la información generada por una investigación científica para políticas públicas suelen requerir de tiempo, añade la investigadora. Y amplía: “Nos ha tomado cuatro años de trabajo paralelo lograr la aprobación como sitio Ramsar. La Convención Ramsar exige toda una serie de datos, una ficha técnica, y todos fueron aportados gracias a las investigaciones científicas”.
La página www.ramsar.org destaca que Matusagaratí cuenta con 64.750 hectáreas y que no solo es el mayor humedal de Panamá, sino uno de los más extensos de América Central.