La falta de confianza, una barrera para adoptar la inteligencia artificial
- 13/11/2024 14:41
- 13/11/2024 12:31
Todavía hay organizaciones que no confían en los beneficios que podrían otorgar la inteligencia artificial En el mundo moderno en que vivimos hemos visto cómo las tecnologías se han vuelto herramientas indispensables en nuestra vida cotidiana.
Una de ellas ha sido el arribo de la inteligencia artificial (IA), que parece ser una herramienta que ha llegado para quedarse por varios años, sobre todo en el mundo de las telecomunicaciones.
A estas alturas muchas organizaciones han empezado a emplear esa herramienta para diferentes usos, pero esto no quiere decir que la confianza que se tiene en la IA sea al 100 %.
Un informe revelado por Deloitte AI Institute sobre el estado de la inteligencia artificial planteó que muchas organizaciones aún no están motivadas en usar la IA y su gran barrera ha sido la falta de confianza.
“Los líderes se concentran en cómo la IA generativa puede ayudarlos a alcanzar sus objetivos de eficiencia y ahorro de costos y muchos consideran reinvertir los ahorros en innovación y crecimiento. Está claro cómo escalar, medir con precisión el progreso y seleccionar los correctos usos, los casos serán factores críticos para lograr la generación de valor”, señala Costi Perricos, líder de IA Generativa de Deloitte Global, en una publicación de la revista Estrategia y Negocios.
El mencionado informe señala que 4 de cada 10 (37%) líderes de diferentes organizaciones aún no están preparados completamente para emplear la IA en sus empresas.
A pesar de que un 72% de los encuestados por el estudio resalta que ha crecido la confianza en el IA desde su aparición en el 2022, solo 36 % de las organizaciones destaca que “medir la confianza y el compromiso de los trabajadores es parte de su estrategia de talento” y menos de la mitad de los encuestados realizan procesos para hacer crecer la confianza en la IA.
Del otro lado de la moneda, las empresas que si han decidido apostar por la IA han visto reflejado un aumento en sus producciones. El 70 % de las empresas reporta una mejora en productos y servicios existentes, mientras que el 63 % ha fomentado la innovación y crecimiento.
En otro informe titulado “Trust inartificial intelligence”, del 2023, en la que participó la Universidad de Queensland de Australia, se señaló que un 85 % de las personas reconoce el beneficio que la IA, pero que aún un 61 % presenta desconfianza en ella.
El IA en situaciones de bajo riesgo
La IA modernos, si bien es muy útil para muchas cosas, se ha mencionado que para las situaciones en la que nuestra vida puede correr riesgo, no es tan eficiente.
El fundador de OpenAI, Sam Altman, durante la reunión anual del Foro Económico Mundial 2024, precisó que esta herramienta no puede ser muy sutil en situaciones de vida o muerte, pero que si puede ser efectiva en situaciones de bajo riesgo.
“El tipo de IA de OpenAI es buena en algunas cosas, pero no es tan buena en situaciones de vida o muerte”, señaló. Esto deja en evidencia que no podremos confiar en este modelo en situaciones de alto riesgo.
Luciano Floridi, director del Centro de Ética Digital de la Universidad de Yale, también llegó a opinar sobre la IA en una entrevista, señalando que “debemos diseñar una sociedad en la que todos ganen, en la que los operadores tecnológicos puedan tener un impacto positivo en los mercados, la sociedad y el medio ambiente”.
La IA desde su llegada generó muchos comentarios a favor y otros en contra, pero lo que parece cierto es que la confianza provocada en torno a ella será un tema que se seguirá comentando por un tiempo.
En el mundo moderno en que vivimos hemos visto cómo las tecnologías se han vuelto herramientas indispensables en nuestra vida cotidiana.
Una de ellas ha sido el arribo de la inteligencia artificial (IA), que parece ser una herramienta que ha llegado para quedarse por varios años, sobre todo en el mundo de las telecomunicaciones.
A estas alturas muchas organizaciones han empezado a emplear esa herramienta para diferentes usos, pero esto no quiere decir que la confianza que se tiene en la IA sea al 100 %.
Un informe revelado por Deloitte AI Institute sobre el estado de la inteligencia artificial planteó que muchas organizaciones aún no están motivadas en usar la IA y su gran barrera ha sido la falta de confianza.
“Los líderes se concentran en cómo la IA generativa puede ayudarlos a alcanzar sus objetivos de eficiencia y ahorro de costos y muchos consideran reinvertir los ahorros en innovación y crecimiento. Está claro cómo escalar, medir con precisión el progreso y seleccionar los correctos usos, los casos serán factores críticos para lograr la generación de valor”, señala Costi Perricos, líder de IA Generativa de Deloitte Global, en una publicación de la revista Estrategia y Negocios.
El mencionado informe señala que 4 de cada 10 (37%) líderes de diferentes organizaciones aún no están preparados completamente para emplear la IA en sus empresas.
A pesar de que un 72% de los encuestados por el estudio resalta que ha crecido la confianza en el IA desde su aparición en el 2022, solo 36 % de las organizaciones destaca que “medir la confianza y el compromiso de los trabajadores es parte de su estrategia de talento” y menos de la mitad de los encuestados realizan procesos para hacer crecer la confianza en la IA.
Del otro lado de la moneda, las empresas que si han decidido apostar por la IA han visto reflejado un aumento en sus producciones. El 70 % de las empresas reporta una mejora en productos y servicios existentes, mientras que el 63 % ha fomentado la innovación y crecimiento.
En otro informe titulado “Trust inartificial intelligence”, del 2023, en la que participó la Universidad de Queensland de Australia, se señaló que un 85 % de las personas reconoce el beneficio que la IA, pero que aún un 61 % presenta desconfianza en ella.
El IA en situaciones de bajo riesgo
La IA modernos, si bien es muy útil para muchas cosas, se ha mencionado que para las situaciones en la que nuestra vida puede correr riesgo, no es tan eficiente.
El fundador de OpenAI, Sam Altman, durante la reunión anual del Foro Económico Mundial 2024, precisó que esta herramienta no puede ser muy sutil en situaciones de vida o muerte, pero que si puede ser efectiva en situaciones de bajo riesgo.
“El tipo de IA de OpenAI es buena en algunas cosas, pero no es tan buena en situaciones de vida o muerte”, señaló. Esto deja en evidencia que no podremos confiar en este modelo en situaciones de alto riesgo.
Luciano Floridi, director del Centro de Ética Digital de la Universidad de Yale, también llegó a opinar sobre la IA en una entrevista, señalando que “debemos diseñar una sociedad en la que todos ganen, en la que los operadores tecnológicos puedan tener un impacto positivo en los mercados, la sociedad y el medio ambiente”.
La IA desde su llegada generó muchos comentarios a favor y otros en contra, pero lo que parece cierto es que la confianza provocada en torno a ella será un tema que se seguirá comentando por un tiempo.