‘Miguelito Sostenible’ pretende atender la problemática de la basura
- 27/01/2024 00:00
- 26/01/2024 19:20
Se trata de un proyecto de reciclaje que recompensa al ciudadano por contribuir con el medioambiente y su comunidad Generar nuevas fuentes de empleo, reactivar la economía local, promover la inclusión financiera para los ciudadanos y comercios, dar incentivos a las personas por reciclar; son algunos de los beneficios que aporta el proyecto Miguelito Sostenible.
Un proyecto de reciclaje desarrollado por la Fundación Somos San Miguelito bajo el concepto de economía circular, cuyo objetivo es atender de inmediato la problemática de la basura del distrito, crear conciencia y ofrecerle beneficios a los ciudadanos que se unan.
Con estas acciones pretenden fomentar la práctica de la sostenibilidad del medioambiente ofreciéndole otra oportunidad a productos, materiales y recursos para que se mantengan en la economía durante el mayor tiempo posible, reduciendo al mínimo la generación de residuos.
El abanderado de la Fundación, Luis Oliva, manifestó que “la tendencia mundial va dirigida hacia la eliminación de los vertederos, por tanto, no podemos quedarnos rezagados. Miguelito Sostenible es un proyecto innovador de economía circular que no solo tiene un impacto en el medio ambiente, sino en la calidad de vida de las personas”.
Añade que están “conscientes del tema de la basura en San Miguelito y este modelo creado por nosotros lo ataca directamente, pero lo más importante es el beneficio colectivo; es una inversión que conlleva cero riesgos y tiene un beneficio garantizado y de eso trata la economía circular, un ganar- ganar”.
El proyecto piloto comenzó en noviembre de 2023 y estará activo hasta el 31 de enero de este 2024. Inició en tres comunidades del distrito, “estamos hablando de unas 120 casas que hoy están trabajando en pro del proyecto. Se tiene establecido un área de recolección en un parque de la comunidad, una vez a la semana se pasa por todas las calles recolectando las bolsas”.
A los residentes que están participando del proyecto se les entregó el Kit Miguelito Sostenible, 30 bolsas amarillas para reciclaje que poseen un código de barra personalizado y enlazado al número de cédula, más un tríptico informativo.
Luego, desde cada residencia se inicia un proceso sencillo de reciclaje que no requiere de segmentación de desechos. Se debe introducir en las bolsas artículos como aluminio, cartón, plástico y papel previamente lavados.
El equipo de la Fundación Somos San Miguelito se encarga de escanear el código de barra, pesar y segmentar los desechos; automáticamente se transfieren los “migue tokens” acumulados al número cédula; lo que equivale al peso de lo reciclado, y finalmente la persona debe acercarse a los comercios afiliados para canjear los puntos.
“Los habitantes de estas comunidades decidieron que todo lo que se recaudara sería para hacer mejores al parque; pero, el objetivo de este proyecto es que cada persona reciba el valor de lo que está recolectando. Estamos trabajando con Recicladora Nacional que es la que paga”; agrega Oliva.
El ingeniero explica, además, que han generado plazas de empleo para jóvenes de las comunidades involucradas, quienes van una vez a la semana a la Recicladora Nacional a separar materiales del proyecto y reciben un pago. Durante el tiempo que lleva el plan piloto, la Fundación ha estado evaluando el comportamiento de la comunidad. “Como cada personas está enlazada con un código de barra podemos identificar qué ciudadanos están cooperando con el proyecto y cuánto están recolectando. El 80% de los habitantes están colaborando en esto y están muy contentos”.
“El desecho que se está recolectando va a ser procesado en la recicladora y convertido en materia prima. Lo que queremos es que los ciudadanos utilicen la materia prima y la utilicen para hacer artesanías. Queremos generar arte para darle un valor agregado”, detalla Oliva.
La economía circular es un modelo económico que pretende aplicar los conceptos de reutilizar, reciclar y reparar a gran escala en las industrias, organización es reduciendo de esta manera los desechos al mínimo, por tanto, también se reduce la extracción de los recursos naturales, preservando el medio ambiente para las generaciones futuras.
Fundación Somos San Miguelito
La organización nace de la necesidad de servir a la población
De acuerdo con la vocera, Somos San Miguelito “se constituye con el fin de contribuir socialmente en la educación, difusión y defensa de las áreas vulnerables; promoviendo el desarrollo sostenible, innovación educativa, alfabetización digital, actividades sociales, estrategias y educación en aspectos de Reciclaje, Economía circular y aportación en áreas del distrito”.
Hernández expresa que la Fundación se presenta como una alternativa que tiene un planteamiento social para velar por el mejor interés de la educación, fomentando la conciencia ambiental y promoviendo prácticas sostenibles en esta comunidad”.Entre las iniciativas más destacadas que están desarrollando se encuentra Miguelito participa, un espacio para que las ideas, inquietudes y necesidades de la comunidad no solo sean escuchadas, sino que sean la inspiración detrás de proyectos y políticas para mejorar la comunidad.
“Para ello, el ciudadano tendrá a su disposición una app que le permitirá emitir sus opiniones y consideraciones sobre diferentes temas de interés para el distrito de San Miguelito. Pronto tendrás esta innovadora herramienta a tu disposición para que puedas ser parte activa en la toma de decisiones locales y hagamos de la Participación Ciudadana sea la fuerza que impulse nuestro progreso”, dijo Hernández.
También forman parte del programa She is astronauta. En el 2023, durante cinco días, 10 niñas y jóvenes panameñas se sumergieron en el fascinante mundo de la ciencia y la tecnología en el Centro Espacial Johnson de la NASA.
Allí, vivieron una experiencia única y mágica que las formó como agentes de cambio y futuras astronautas o ingenieras del país.Del 4 al 8 de diciembre, las tripulantes tuvieron una intensa agenda académica junto a 20 niñas pertenecientes a la misión de Costa Rica y República Dominicana, enfrentándose a diversos desafíos que pusieron a prueba sus conocimientos y habilidades.
Esto incluyó la construcción y lanzamiento de cohetes, un menú exclusivo para los astronautas de misión, el diseño de hábitats lunares sostenibles para la vida humana, la construcción y programación de robots, la creación de aterrizadores y una barrera de protección contra los rayos del sol para astronautas.
Generar nuevas fuentes de empleo, reactivar la economía local, promover la inclusión financiera para los ciudadanos y comercios, dar incentivos a las personas por reciclar; son algunos de los beneficios que aporta el proyecto Miguelito Sostenible.
Un proyecto de reciclaje desarrollado por la Fundación Somos San Miguelito bajo el concepto de economía circular, cuyo objetivo es atender de inmediato la problemática de la basura del distrito, crear conciencia y ofrecerle beneficios a los ciudadanos que se unan.
Con estas acciones pretenden fomentar la práctica de la sostenibilidad del medioambiente ofreciéndole otra oportunidad a productos, materiales y recursos para que se mantengan en la economía durante el mayor tiempo posible, reduciendo al mínimo la generación de residuos.
El abanderado de la Fundación, Luis Oliva, manifestó que “la tendencia mundial va dirigida hacia la eliminación de los vertederos, por tanto, no podemos quedarnos rezagados. Miguelito Sostenible es un proyecto innovador de economía circular que no solo tiene un impacto en el medio ambiente, sino en la calidad de vida de las personas”.
Añade que están “conscientes del tema de la basura en San Miguelito y este modelo creado por nosotros lo ataca directamente, pero lo más importante es el beneficio colectivo; es una inversión que conlleva cero riesgos y tiene un beneficio garantizado y de eso trata la economía circular, un ganar- ganar”.
El proyecto piloto comenzó en noviembre de 2023 y estará activo hasta el 31 de enero de este 2024. Inició en tres comunidades del distrito, “estamos hablando de unas 120 casas que hoy están trabajando en pro del proyecto. Se tiene establecido un área de recolección en un parque de la comunidad, una vez a la semana se pasa por todas las calles recolectando las bolsas”.
A los residentes que están participando del proyecto se les entregó el Kit Miguelito Sostenible, 30 bolsas amarillas para reciclaje que poseen un código de barra personalizado y enlazado al número de cédula, más un tríptico informativo.
Luego, desde cada residencia se inicia un proceso sencillo de reciclaje que no requiere de segmentación de desechos. Se debe introducir en las bolsas artículos como aluminio, cartón, plástico y papel previamente lavados.
El equipo de la Fundación Somos San Miguelito se encarga de escanear el código de barra, pesar y segmentar los desechos; automáticamente se transfieren los “migue tokens” acumulados al número cédula; lo que equivale al peso de lo reciclado, y finalmente la persona debe acercarse a los comercios afiliados para canjear los puntos.
“Los habitantes de estas comunidades decidieron que todo lo que se recaudara sería para hacer mejores al parque; pero, el objetivo de este proyecto es que cada persona reciba el valor de lo que está recolectando. Estamos trabajando con Recicladora Nacional que es la que paga”; agrega Oliva.
El ingeniero explica, además, que han generado plazas de empleo para jóvenes de las comunidades involucradas, quienes van una vez a la semana a la Recicladora Nacional a separar materiales del proyecto y reciben un pago. Durante el tiempo que lleva el plan piloto, la Fundación ha estado evaluando el comportamiento de la comunidad. “Como cada personas está enlazada con un código de barra podemos identificar qué ciudadanos están cooperando con el proyecto y cuánto están recolectando. El 80% de los habitantes están colaborando en esto y están muy contentos”.
“El desecho que se está recolectando va a ser procesado en la recicladora y convertido en materia prima. Lo que queremos es que los ciudadanos utilicen la materia prima y la utilicen para hacer artesanías. Queremos generar arte para darle un valor agregado”, detalla Oliva.
La economía circular es un modelo económico que pretende aplicar los conceptos de reutilizar, reciclar y reparar a gran escala en las industrias, organización es reduciendo de esta manera los desechos al mínimo, por tanto, también se reduce la extracción de los recursos naturales, preservando el medio ambiente para las generaciones futuras.
Fundación Somos San Miguelito
La organización nace de la necesidad de servir a la población
De acuerdo con la vocera, Somos San Miguelito “se constituye con el fin de contribuir socialmente en la educación, difusión y defensa de las áreas vulnerables; promoviendo el desarrollo sostenible, innovación educativa, alfabetización digital, actividades sociales, estrategias y educación en aspectos de Reciclaje, Economía circular y aportación en áreas del distrito”.
Hernández expresa que la Fundación se presenta como una alternativa que tiene un planteamiento social para velar por el mejor interés de la educación, fomentando la conciencia ambiental y promoviendo prácticas sostenibles en esta comunidad”.Entre las iniciativas más destacadas que están desarrollando se encuentra Miguelito participa, un espacio para que las ideas, inquietudes y necesidades de la comunidad no solo sean escuchadas, sino que sean la inspiración detrás de proyectos y políticas para mejorar la comunidad.
“Para ello, el ciudadano tendrá a su disposición una app que le permitirá emitir sus opiniones y consideraciones sobre diferentes temas de interés para el distrito de San Miguelito. Pronto tendrás esta innovadora herramienta a tu disposición para que puedas ser parte activa en la toma de decisiones locales y hagamos de la Participación Ciudadana sea la fuerza que impulse nuestro progreso”, dijo Hernández.
También forman parte del programa She is astronauta. En el 2023, durante cinco días, 10 niñas y jóvenes panameñas se sumergieron en el fascinante mundo de la ciencia y la tecnología en el Centro Espacial Johnson de la NASA.
Allí, vivieron una experiencia única y mágica que las formó como agentes de cambio y futuras astronautas o ingenieras del país.Del 4 al 8 de diciembre, las tripulantes tuvieron una intensa agenda académica junto a 20 niñas pertenecientes a la misión de Costa Rica y República Dominicana, enfrentándose a diversos desafíos que pusieron a prueba sus conocimientos y habilidades.
Esto incluyó la construcción y lanzamiento de cohetes, un menú exclusivo para los astronautas de misión, el diseño de hábitats lunares sostenibles para la vida humana, la construcción y programación de robots, la creación de aterrizadores y una barrera de protección contra los rayos del sol para astronautas.