Contar para sumar en el ámbito de la cultura

Así como la cultura tiene la función de colaborar en el entendimiento de los seres humanos y garantizar su derecho a vivir una vida plena, también tiene un impacto económico que genera empleos y es el sustento de muchas personas y familias.

Con el fin de cuantificar exactamente hasta qué nivel impactan las industrias creativas y culturales en la vida y en la economía de los panameños, el Ministerio de Cultura (MiCultura) lanzó recientemente la campaña “Cuéntanos para sumar”, con el fin de concienciar a la población de que la cultura es una herramienta que conduce a cambios y transformaciones sociales.

Marisa Montesano del Convenio Andrés Bello – que es el responsable y el ejecutor operativo de la elaboración de la Cuenta Satélite de Cultura – comentó en una entrevista a La Estrella de Panamá que la importancia de esta iniciativa radica en poner sobre la mesa la importancia de la cultura como pilar del desarrollo humano y social de los pueblos.

“La cultura no es nada más un baile típico, la pollera o los diablicos. La cultura trasciende y va mucho más allá. Nosotros tenemos el patrimonio natural de Panamá que es parte de nuestro acervo cultural. Hay mucho que se puede aportar al aspecto cultural”, señaló Montesano a este medio.

Es por eso que la cuenta satélite de cultura busca que se puedan incoporar nuevos actores de las industrias culturales y creativas y que no están claramente dimensionados en la actualidad. Los artesanos, los músicos, los emprendimientos y las casas editoriales son algunos de los actores a los que se espera incorporar próximamente durante el desarrollo de la primera etapa de la cuenta satélite de cultura, cuyos resultados se expondrán en el mes de diciembre.

Montesano además explicó que la iniciativa también busca como objetivo que la ciudadanía se sienta parte de la cultura y se acerque al trabajo que se está haciendo para llenar esos renglones en los que el aporte social y económico de la cultura tendrá su máxima visibilidad.

Uno de los datos preliminares que se pueden desprender de la primera etapa de la investigación cifra el aporte económico del carnaval de Las Tablas en alrededor de $10 millones. Una cifra que se explica por las ganancias adquiridas por los sectores de la hostelería y la moda, entre otros, durante los cuatro días de celebración de esta festividad característica de inicios de año.

Uno de los objetivos de las Cuentas Satélite de Cultura es la medición de los gastos e inversiones en el sector cultural. De acuerdo a las declaraciones recogidas por la agencia EFE de la anterior ministra de Cultura Giselle González, la iniciativa busca brindar una herramienta efectiva en este sentido.

“La Cuenta Satélite de Cultura nos ayuda a comprender el impacto que tiene la cultura en el desarrollo económico del país y nos invita a comprender cuánto es la inversión que se tiene en cultura, pero a la vez de esa inversión cuanto se está retornando al país”, dijo González, en el lanzamiento del proyecto que se llevó a cabo el pasado 26 de abril.

La iniciativa es desarrollada en conjunto con el Convenio Andrés Bello y MiCultura y busca cuantificar y calificar el aporte económico de las actividades económicas vinculadas con la cultura.

Posteriormente, esa información se utilizará para la formulación de políticas en el ámbito público y privado que servirán para fortalecer la actividad cultural en el país.

Montesano añadió en este sentido que la Cuenta Satélite de Cultura busca precisamente que los inversores y tomadores de decisiones vean el impacto que las actividades culturales tienen el Producto Interno Bruto del país. El antecedente de esta iniciativa tiene sus orígenes en una iniciativa similar creada por Francia a finales de los años 1970 para medir el impacto de sus actividades turísticas en la economía de esta nación europea e inyectar más fondos a esta actividad.

La elaboración de la Cuenta Satélite de Cultura en Panamá busca emular la experiencia de distintos países que ya la poseen como es el caso de México y España, entre otros.

“Nosotros vemos que hay patrimonio material e inmaterial cuyo aporte a la cultura nacional se ve de manera indirecta como lo puede ser el sombrero pintao. Hay algunos productos u objetos culturales que se pueden ver de manera directa e indirecta”, agregó.

Montesano prosiguió que debido a esta labor se está trabajando en paralelo en varios estudios con los que se busca tener la información de los distintos actores culturales para que sus actividades puedan ser organizadas sistemáticamente y se pueda aportar información permanente para crear una base de datos con la que el Instituto Nacional de Estadística y Censo clasifique los objetos de gastos y de inversiones.

La campaña Cuéntanos para sumar busca alimentar esa línea base de información con la que se pueda tener una dimensión real del impacto cultural en el país con la ayuda de distintos actores que dan vida a las industrias creativas y culturales.

“Nuestro lema es Cuéntanos para sumar porque buscamos sumar datos que demuestren en la inversión que hacen en la información que nos vayan facilitando. Hay actores como los artesanos, las empresas establecidas en el Casco Antiguo, las empresas publicitarias que se dedican a promocionar las actividades culturales, de danza, de artesanía, etc. Pero esa inversión no se ve sino de manera indirecta. También buscamos que los músicos que hacen actos musicales en restaurantes o actúan en las capillas puedan registrarse así como las obras de teatro que se hacen a lo largo del país. En fin, son distintos actores los que tenemos que tomar en cuenta”, destacó.

En este sentido, el Convenio Andrés Bello invita a las empresas de publicidad establecidas en Panamá a visibilizar su aporte a la economía nacional. Los interesados pueden subir sus datos a la página web www.convenioandresbello.org.

El estudio “Industria de la publicidad” busca demostrar el aporte de la publicidad en la generación de empleos, el producto interno bruto, la balanza de pagos y el consumo en el campo cultural y creativo.

Por otra parte, la investigación busca demostrar la capacidad de la industria publicitaria de convertirse en un sector generador de riqueza, promover la competencia empresarial, brindar información clave para el consumidor y apoyar a los distintos sectores de las industrias culturales y creativas.