Cultura

Belém do Pará, 30 años contra la violencia de género

Belém do Pará ha reconocido nuevas formas de violencia contra la mujer en sus 30 años. UNFPA
Latinoamérica sigue siendo una de las regiones en el mundo con mayores índices de violencia contra la mujer. UNFPA
Actualizado
  • 10/06/2024 00:00
Creado
  • 09/06/2024 21:36

El mecanismo que busca erradicar la violencia las mujeres celebra sus tres décadas con una reunión en la cual expertos de la región analizarán sus desafíos y logros

El mecanismo regional para contrarrestar la violencia de género en la región, la Convención de Belém do Pará, celebra 30 años entre las reflexiones de Estados, la sociedad civil y demás expertos internacionales durante una cumbre en Santiago de Chile. Todos estos sectores estarán analizando los logros de este mecanismo en sus diferentes enfoques así como los desafíos pendientes en América Latina hasta el próximo 12 de junio.

Actualmente la Convención de Belém do Pará busca la prevención, sanción y erradicación de la violencia en contra de la mujer en 32 de los 34 países de América Latina y el Caribe. Esta convención fue adoptada el 9 de junio de 1994 por la Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) y fue ratificada posteriormente por las naciones de la región.

La Convención de Belém do Pará fue pionera a nivel mundial, ya que se trató del primer tratado que reconoció la violencia contra la mujer como una violación a los derechos humanos. Desde ese momento Belém do Pará se ha convertido en el marco regional de referencia para desarrollar leyes, políticas y planes de acción frente la violencia de género.

Al mismo tiempo, este mecanismo ha servido para establecer estándares jurídicos a nivel nacional e interamericano que amplían la protección de las mujeres y niñas.

Para instituciones internacionales como el Centro por la Justicia y el Derecho Internacional (Cejil), la cual realiza aportes a los derechos humanos en las Américas a través del uso eficaz de los instrumentos del Sistema Interamericano de Derechos Humanos (SIDH) y otros mecanismos internacionales de protección de los derechos humanos, la importancia de Belém do Pará reside en las obligaciones que impone a los diferentes países.

Esto se debe a que la convención exige a los Estados que la ratifican diseñar e implementar políticas públicas amplias que den cuenta de los diferentes espacios en los que se expresa la violencia hacia la mujer así como detallar la situación de violencia y los obstáculos que las entidades o activistas defensores de derechos humanos enfrentan para llevar a cabo su labor y prevenir la violencia de género.

Desafíos actuales

Sin embargo, a pesar de los avances y esfuerzos de este mecanismo, la región sigue registrando altos niveles de violencia contra las mujeres.

Por ejemplo, de acuerdo a datos del Fondo de Población de las Naciones Unidas (Unfpa), en América Latina y el Caribe, se encuentran 14 de los 25 países con mayor número de femicidios en el mundo.

Además, según esta misma entidad, las tasas más altas de feminicidios por cada 100,000 mujeres se registran en Honduras (6,2), El Salvador (3,3), República Dominicana (2,7) y Bolivia (2,1).

Además, una de las manifestaciones más invisibilizadas de violencia de género es una de las más prevalentes en la región, siendo esta el matrimonio infantil y las uniones tempranas. De acuerdo a Unfpa, la región se encuentra en un estancamiento y en los últimos 25 años no se ha podido reducir, actualmente una de cada cuatro adolescentes se casa o une antes de los 18 años.

El matrimonio infantil así como las uniones tempranas son una violación a los derechos humanos “que causa daños irreversibles en la vida, en la salud y salud sexual y reproductiva, y la educación de las niñas y adolescentes, pero también tienen efectos nocivos en sus familias, comunidades e impactos en el desarrollo sostenible de sus países”.

Nuevas acciones

Belém do Pará seguirá siendo una herramienta fundamental tanto para los Estados como para la sociedad civil y los movimientos sociales, para poder avanzar la agenda de los derechos de las mujeres y consagrar una vida libre de violencia, logrando hacer cambios profundos.

Sin embargo, se reconoce que la convención ha permitido que se conozca sobre nuevas formas de violencia como la económica, la obstétrica, la simbólica, la violencia en el ámbito público y político y más recientemente la violencia ejercida a través de la tecnología.

En este contexto, las diversas partes involucradas en la convención Belém do Pará se reúnen para conmemorar la convención y abordar acciones para acelerar su implementación así como buscar mecanismos de acción para atacar las nuevas formas de violencia reconocidas.

Así, los Estados Parte del Mecanismo de Seguimiento de la Convención de Belém do Pará (Mesecvi), órgano creado para realizar seguimiento a su implementación, llevarán a cabo su IX Conferencia de Estados Parte, encuentro que convoca a las ministras de la Mujer y más altas autoridades en materia de protección de las mujeres frente a la violencia.

Con estos eventos, se abre un año de conmemoración, no sólo del 30 aniversario de la Convención de Belém do Pará, sino también de los 20 años de la creación del Mesecvi, el cual fue establecido por la Asamblea General de la OEA en octubre de 2004, como parte de un compromiso de los Estados Parte para garantizar su progresiva implementación.