Debajo de la escalera
- 09/11/2024 00:00
- 08/11/2024 19:29
¡Otra vez, debajo de la escalera!
Siempre me ha asustado esta escalera vieja, polvorienta y fría. Se cae a pedazos. Las cucarachas salen huyéndonos.
Mamá me abraza, me aprieta demasiado. Siento sus lágrimas caer sobre mi piel. Estamos, otra vez, debajo de la escalera. No sé por qué me siento bien. Me siento protegido, aunque le tengo miedo a los ratones y cucarachas que caminan con frecuencia allí.
Escucho una voz altisonante que dice: ¡dónde están, ¡dónde están!
Me aterroriza ese tono, áspero e imperativo. Es la voz de mi padre.
-¡Ajá! ¡Aquí están, como siempre! Debajo de la escalera.
Escuché un sonoro golpe. Mi madre me soltó. Sentí su mano inerte y vi cómo su sangre me empapaba.
Yo solo sabía decir, mamá, mamá, pero ya no me escuchó.
Él, mi padre, seguía vociferando, enojado, porque ella no se levantaba.
Llegaron los vecinos y la policía. Se lo llevaron.
Y yo sigo aquí, lleno de sangre, repitiendo una sola palabra:
-Mamá, ¡mamá! Y aquí estoy, solo, otra vez, debajo de la escalera.
Del libro No me extraña tu presencia.