‘Aída’ regresa a los escenarios doce años después

Faltan pocos días para que dé inicio en el Teatro Nacional la nueva temporada del musical Aída. Una historia creada por Linda Woolverton, Robert Falls y David Henry Hwang, y que toca temas como el amor, la valentía y la guerra en una trama que contiene elementos con los que la audiencia podría sentirse identificada.

La obra – con música de Elton John y letra de Tim Rice – presentará las actuaciones y coreografías de más de 80 artistas y músicos bajo la batuta de un equipo conformado por Aaron Zebede en la dirección artística, Dino Nugent en la dirección de orquesta, José Pepe Casis en la dirección vocal y en el diseño de sonido, y Maryelin Barahona en la dirección coreográfica.

Algunos de los miembros del elenco y de la dirección de la obra contactados por La Estrella de Panamá manifestaron su emoción y entusiasmo a medida que se va acercando la fecha del gran estreno del musical, que es una adaptación pop de la ópera de Giuseppe Verdi y que es originalmente producida por Disney Theatrical Group.

Janelle Davidson, quien fungirá como Aída en la obra, destacó que este es un musical que se caracteriza por tener en el centro de la historia a dos princesas cuyo rasgo principal es el carácter fuerte y la hidalguía con la que afrontan las situaciones de la vida. La actriz piensa que lo que tiene en común con el personaje de Aída es la testarudez que se traduce en la insistencia de hacer y concretar las cosas y una voluntad a prueba de hierro cuando se trata de defender a los suyos.

“El deber principal de Aída es salvar a su pueblo y durante la trama tiene que tomar una decisión trascendental: escoger entre el amor o su gente. Es un personaje muy lindo porque desde el inicio muestra su fuerza pero como todas las mujeres es sentimental y cae rendida ante el amor. Por otro lado, estamos en esos días donde los ensayos son intensos y corregimos lo que hay que corregir para dar lo mejor ante el público. Es en este momento, en el que el director Aaron Zebede nos hace repetir y repetir hasta lograr el mejor resultado. Hay una energía increíble en el elenco que es maravilloso y que tiene buena química entre sí. La fuerza cultural de esta obra se puede encontrar en los bailes y en la música, y la historia sigue siendo la original pero tiene toques modernos como la inclusión de distintos géneros musicales como el reggae y el motown, entre otros. Lo que no lo hace necesariamente una ópera en la que veremos una mezcla interesante de culturas”, agregó la también productora del espectáculo.

Otra de las princesas es Amneris, la hija del faraón, quien es interpretada por la actriz Cristina de La Fuente. Ella está enamorada de su primo Radamés, y vive mimada en un ambiente de comodidades desconectada de la realidad que sucede más allá del palacio en el que se encuentra. Si bien se hace pasar por una mujer superficial, ella devela luego en la obra que dista mucho de tener esta personalidad.

De La Fuente se identifica mucho con la fortaleza de Amneris a la vez que comentó que aunque ellas son de diferentes épocas, se siente familiarizada con esa capacidad de verle el lado bueno a las cosas a pesar de la adversidad.

“Siento ansiedad, adrenalina y felicidad a pocos días de que comience la obra. Son tantos preparativos, no sólo en la creación del personaje, sino con tantos detalles de producción que hay que dejar listo. Sumado a ello, me cuido mucho la salud y la voz. Por otro lado, invito al público a sumergirse por un par de horas en un espectáculo que les hará vibrar con cada fibra de su ser”, dijo.

Leonte Bordanea, quien desempeñará el papel de Radamés, destacó que lo que lo une a él con su personaje es lo autoritario de su carácter.

“Me siento súper contento porque voy a trabajar con extraordinarias colegas en el escenario como lo son Janelle y Cristina, y estaré acompañado de un gran cuerpo de baile. Estoy bastante acostumbrado a que los espectáculos en Panamá sean de gran magnitud y estoy contento porque es una obra muy bonita y además es una producción tan ambiciosa realizada por panameños y eso es algo que me llena de mucho orgullo”, expresó.

En tanto, Julio Chamorro quien se meterá en la piel del antagonista Zoser confesó a este diario que le impresiona la manera premeditada y maquiavélica en la que este personaje planea y ejecuta sus acciones para salirse con la suya.

“Es un tipo muy manipulador que envenena gradualmente al faraón para lograr su propósito y, paralelamente, arma la relación entre Radamés y Amneris para que al final su primogénito tuviera una posición de poder. Me impresiona su paciencia porque es alguien que estuvo trabajando por años su plan. Zoser trabaja como el diablo: espera hasta que tú te caigas”, describió.

Chamorro manifestó lo feliz que está por trabajar con grandes profesionales que están acostumbrados a dar lo mejor de sí en este tipo de proyectos como Rock of Ages o Mamma Mia.

Esa sensación previa a la apertura definitiva del telón también la experimenta el director artístico Aaron Zebede, quien adelantó a este diario que se están afinando los detalles finales para ofrecer una obra óptima para el deleite del público.

“Estamos ahora en la parte difícil y tediosa de los últimos ensayos. Para mí, es muy especial este proyecto porque Aída fue el primer musical que yo dirigí hace 12 años. Tener esa oportunidad en aquel entonces siendo un director novato fue grandioso y ahora es un privilegio poder regresar y aplicar los conceptos que he aprendido a lo largo de los años además de poder innovar. Esa parte para mí es la más entretenida y por ser un musical de Disney, ellos ponen muchas reglas y parámetros. El hecho de tenerlos atrás tuyo, te hace también querer hacer las cosas mucho mejor porque ellos están muy pendientes de lo que uno hace, desde el espectáculo hasta la publicidad de la obra. Esto en realidad es algo bueno porque te obliga a ser mejor, más aún porque tienes a una gran marca detrás. Además de lo imprescindible que es tener un buen equipo de trabajo como el que tenemos para que todo funcione, todos son muy buenos en lo que hacen y eso lo que produce es que todo fluya fácilmente. Uno no tiene que estar tan detrás de ellos para que hagan lo que tienen que hacer. Simplemente lo saben y como director uno no tiene que corregirlos tanto”, explicó.

Por su parte, el director musical de la obra Dino Nugent – que tendrá a su mando a la orquesta que tocará en el musical- expresó que todo el trabajo del equipo musical, desde los preparativos iniciales hasta llegar al mismo día del estreno, es un proceso laborioso que involucra en una perfecta sincronía a todos los equipos actorales, musicales, de sonido, vestuaristas y maquillistas, entre otros.

“Finalmente, todo ese esfuerzo forma parte de un embudo que se va construyendo y en donde confluyen todas las disciplinas artísticas con sus respectivos equipos para tenerlo todo listo antes de que abra el telón. Todo esto es un proceso de acumulación de ansiedad y entusiasmo para culminar hasta que llegue el día del estreno y de las siguientes presentaciones”, consideró.