MEF pide eximir el pago de tres años al FAP
- 22/04/2024 06:05
- 21/04/2024 22:47
En reunión sostenida entre el Ministerio de Economía y Finanzas y la directiva del FAP se acordó mantener los aportes de 2018 y 2019 y eximir el pago de 2020, 2021 y 2022 por efecto de la pandemia El Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) acudirá hoy a la Asamblea Nacional para sustentar el proyecto de ley 1141 que pretende modificar la ley del Fondo de Ahorro de Panamá (FAP). El cambio consiste en un único artículo que exime al MEF a hacer los aportes al ahorro cuando se experimente una desaceleración económica igual o superior a la establecida en la ley 34 de 2008 o cuando se decrete un estado de emergencia nacional por hechos que tengan la capacidad de impactar de forma negativa el déficit fiscal.
Siguiendo la lógica de la fórmula planteada en la ley existente, en teoría el MEF debería aportar $1,300 millones al FAP. Sin embargo, la fórmula en cuestión no contempla los años negativos en la economía del país.
En 2018 y 2019 los aportes totalizaron aproximadamente de $51 millones, monto que el MEF se comprometió a cancelar antes de abandonar el poder. En estos años el diferencial del PIB fue menor a 2.5%, casi el 1%, según la fórmula que estipula la ley. En cambio, en 2023 se reflejaron excedentes $375 millones. Por tanto, el MEF estima pagar la totalidad adeudada al FAP con los ingresos recaudados. “Hoy probablemente no tengo todo el dinero, puedo tener una parte. En el transcurso del año se puede completar”, manifestó Carlos González, viceministro de Economía del MEF a La Estrella de Panamá. La intención, añadió, es hacerlo antes del cambio de gobierno. La buena noticia es que la implementación de la factura electrónica ha generado resultados positivos, un 30% más en ingresos en comparación al año pasado.
En reunión sostenida entre el MEF y la directiva del FAP, se acordó mantener “los aportes de 2018 y 2019, y eximir el pago de 2020, 2021 y 2022 por efecto de la Pandemia COVID-19”, dijo González. De igual forma reconocer 2023 con la fórmula original vinculada a los excedentes del Canal con relación al PIB. En adelante que se aplique la misma fórmula original, con excepción de los años en que se declare una Emergencia Nacional o cuando la Economía muestre condiciones de debilidad.
Todo esto partiendo de que en 2025 el país debe recuperar la senda de crecimiento mayor al 5% anual. “Eso dará la oportunidad de generar ahorros de $200 millones al FAP hasta el año 2035 y posteriormente aumentar $50 millones por año. Es decir, $250 millones anuales después del 2035”, indicó González.
De acuerdo al viceministro, la directiva del FAP “prefirió mantener la fórmula actual vinculada a los aportes del Canal en función de los excedentes superiores al 2.5% del PIB”, pero se eximir los años de crisis, cuando ocurra una declaratoria de emergencia nacional o una situación de depresión de la economía. Con esto en mente, y tomando en cuenta el desempeño económico de los próximos años, el MEF estima que los aportes al FAP serán de $200 millones, según el pronóstico financiero de la entidad.
“El fondo es para usarlo en momentos de bonanza, por tanto, en años en que no se registran vacas gordas, el gobierno no debe aportar al FAP”, agregó González. En la Asamblea se discutirá con los diputados de la Comisión de Economía y Finanzas la propuesta, aunque ya enfrenta ciertas oposiciones, el funcionario dijo que han logrado un consenso con la mayoría de los actores y espera que el proyecto se convierta en ley de la República. Según González, la nueva fórmula busca fortalecer en forma sostenida el fondo, “algo que desde 1995 no se ha logrado y que en la modificación de 2018 tampoco se concretó”.
El MEF proyecta que a partir de este año los aportes del Canal de Panamá al Estado serán entre 3.5% y 4% con relación al PIB, lo que garantizará que entren a la bolsa de ahorro entre $300 y $400 millones anuales. No obstante, el monto está sujeto al crecimiento de la economía y al desempeño de la vía interoceánica. En esto no cambia la fórmula. González describe que en el 2018 y 2019 la economía creció 4% y 2.9% respectivamente. Pero cuando la curva empezó a tomar vuelo, se atravesó la pandemia y reflejó un decrecimiento de hasta el 18%, y luego el país comenzó un periodo de recuperación. “El próximo año la curva continuará en crecimiento y a partir de ahí la fórmula debe generar aportes al FAP arriba de $200 millones anuales provenientes de la operación del Canal, cuando antes eran $30 millones”, indicó González a La Estrella de Panamá. Además, las operaciones de la vía interoceánica deben complementarse con el canal seco multimodal entre el Atlántico y el Pacífico, proyecto aprobado el 13 de marzo pasado en Consejo de Gabinete. Una nueva conexión terrestre mediante la cual la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) busca modernizar la plataforma logística, agilizar los trámites aduaneros y mantener la competitividad en el sector, a fin de generar mayor movilidad de carga y aumentar la eficiencia como país.
La visita de Moody’s
Hoy el MEF sostendrá una reunión con representantes de la calificadora Moody’s para analizar el escenario económico y financiero que le espera al próximo gobierno. La preocupación de la calificadora se centra, entre otras cosas, en la capacidad de recaudación reflejada por la Dirección General de Ingresos en comparación a los gastos del gobierno, entre los que resaltan la planilla y subsidios.
Las proyecciones económicas del MEF entran en contradicción con las estimaciones de la calificadora Moody’s, que proyecta un crecimiento del país al 3% para este año. El MEF sustenta que la evaluadora no ha tomado en cuenta las mejoras en la recaudación tributaria. “Lo que usualmente hacen las calificadoras es que comparan recaudaciones históricas. Cuando les compartamos la información sobre el comportamiento de los ingresos y gastos ellos podrán actualizar sus pronósticos”, indicó González.
La apuesta del crecimiento económico se posa en el turismo, que empieza a despegar arriba del 9% del Producto Interno Bruto, la construcción del embalse de Río Indio, así como el sector logístico que junto con la vía interoceánica y el canal seco tendrán un efecto de complementariedad en la economía. “Esto arrojará números distintos a los de la calificadora”, según González.
Deudas por pagar
A pocos meses del relevo gubernamental, el MEF adeuda aproximadamente mil millones de dólares a proveedores locales. Antes de entregar la llave, el gobierno espera pagar unos $600 millones, que se suman a los $375 millones del FAP. Con todo y eso, aseguró González, entregarán las finanzas mejor de lo que las encontraron. “Habrá dinero en las arcas. Nosotros logramos el financiamiento que requiere el presupuesto de este año en más de un 70%, las medidas tributarias generadas han dado los resultados. Estamos viendo un buen desempeño en la aplicación de la factura fiscal”, manifestó.
El funcionario aseguró que están limpiando más de $900 millones pendientes. “La idea es que las deudas por pagar respondan a un ciclo predecible de seis meses. “Que esa cifra baje a una manejable para la administración que tome el poder”, zanjó.
Sobre el proyecto 1141
En el proyecto presentado a la Asamblea se estipularon las reglas de acumulación del FAP, que deberían estar constituidas por la totalidad de los activos del extinto Fondo Fiduciario de Desarrollo y se acumularan con los aportes del 50% de toda contribución de la ACP al Tesoro Nacional superior al 2.5% del PIB nominal para la vigencia fiscal 2018 y 2019, y de 2.25% a partir de la vigencia fiscal 2020.
Este excedente se transferirá en la vigencia fiscal siguiente después de la publicación del PIB de la Contraloría General de la República. No obstante, señala la propuesta, no existe una cláusula de excepción para dejar de alimentar el ahorro en momentos de crisis económica. Es decir, cuando se requiere actuar de manera anticíclica e inyectar recursos a la economía para su estabilización, como ocurrió durante la pandemia. Entre 2020-2023, cuando se requirieron fuertes sumas de dinero para estabilizar la economía, el gobierno estuvo obligado a transferir al FAP más de mil millones de dólares. Originalmente se planteó establecer un aporte mínimo anual de $200 millones del presupuesto del MEF que será transferido al FAP a partir de 2025 hasta el 2033. Luego será incrementado en $50 millones cada cinco años a partir del 2034. No obstante, el aporte del MEF al FAP no será transferido cuando se experimente una desaceleración económica igual o superior a la establecida en la ley 34 de 2008 y cuando se decrete un estado de emergencia nacional por el Consejo de Gabinete por hechos que tengan la capacidad de impactar de forma negativa el déficit fiscal. Como consecuencia, el numeral 2 de la propuesta dispone que quedan extinguidas las obligaciones de aportes del Estado al FAP para las vigencias fiscales de 2020 al 2024, según se lee en el proyecto presentado por el ministro de la cartera Héctor Alexander.
El Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) acudirá hoy a la Asamblea Nacional para sustentar el proyecto de ley 1141 que pretende modificar la ley del Fondo de Ahorro de Panamá (FAP). El cambio consiste en un único artículo que exime al MEF a hacer los aportes al ahorro cuando se experimente una desaceleración económica igual o superior a la establecida en la ley 34 de 2008 o cuando se decrete un estado de emergencia nacional por hechos que tengan la capacidad de impactar de forma negativa el déficit fiscal.
Siguiendo la lógica de la fórmula planteada en la ley existente, en teoría el MEF debería aportar $1,300 millones al FAP. Sin embargo, la fórmula en cuestión no contempla los años negativos en la economía del país.
En 2018 y 2019 los aportes totalizaron aproximadamente de $51 millones, monto que el MEF se comprometió a cancelar antes de abandonar el poder. En estos años el diferencial del PIB fue menor a 2.5%, casi el 1%, según la fórmula que estipula la ley. En cambio, en 2023 se reflejaron excedentes $375 millones. Por tanto, el MEF estima pagar la totalidad adeudada al FAP con los ingresos recaudados. “Hoy probablemente no tengo todo el dinero, puedo tener una parte. En el transcurso del año se puede completar”, manifestó Carlos González, viceministro de Economía del MEF a La Estrella de Panamá. La intención, añadió, es hacerlo antes del cambio de gobierno. La buena noticia es que la implementación de la factura electrónica ha generado resultados positivos, un 30% más en ingresos en comparación al año pasado.
En reunión sostenida entre el MEF y la directiva del FAP, se acordó mantener “los aportes de 2018 y 2019, y eximir el pago de 2020, 2021 y 2022 por efecto de la Pandemia COVID-19”, dijo González. De igual forma reconocer 2023 con la fórmula original vinculada a los excedentes del Canal con relación al PIB. En adelante que se aplique la misma fórmula original, con excepción de los años en que se declare una Emergencia Nacional o cuando la Economía muestre condiciones de debilidad.
Todo esto partiendo de que en 2025 el país debe recuperar la senda de crecimiento mayor al 5% anual. “Eso dará la oportunidad de generar ahorros de $200 millones al FAP hasta el año 2035 y posteriormente aumentar $50 millones por año. Es decir, $250 millones anuales después del 2035”, indicó González.
De acuerdo al viceministro, la directiva del FAP “prefirió mantener la fórmula actual vinculada a los aportes del Canal en función de los excedentes superiores al 2.5% del PIB”, pero se eximir los años de crisis, cuando ocurra una declaratoria de emergencia nacional o una situación de depresión de la economía. Con esto en mente, y tomando en cuenta el desempeño económico de los próximos años, el MEF estima que los aportes al FAP serán de $200 millones, según el pronóstico financiero de la entidad.
“El fondo es para usarlo en momentos de bonanza, por tanto, en años en que no se registran vacas gordas, el gobierno no debe aportar al FAP”, agregó González. En la Asamblea se discutirá con los diputados de la Comisión de Economía y Finanzas la propuesta, aunque ya enfrenta ciertas oposiciones, el funcionario dijo que han logrado un consenso con la mayoría de los actores y espera que el proyecto se convierta en ley de la República. Según González, la nueva fórmula busca fortalecer en forma sostenida el fondo, “algo que desde 1995 no se ha logrado y que en la modificación de 2018 tampoco se concretó”.
El MEF proyecta que a partir de este año los aportes del Canal de Panamá al Estado serán entre 3.5% y 4% con relación al PIB, lo que garantizará que entren a la bolsa de ahorro entre $300 y $400 millones anuales. No obstante, el monto está sujeto al crecimiento de la economía y al desempeño de la vía interoceánica. En esto no cambia la fórmula. González describe que en el 2018 y 2019 la economía creció 4% y 2.9% respectivamente. Pero cuando la curva empezó a tomar vuelo, se atravesó la pandemia y reflejó un decrecimiento de hasta el 18%, y luego el país comenzó un periodo de recuperación. “El próximo año la curva continuará en crecimiento y a partir de ahí la fórmula debe generar aportes al FAP arriba de $200 millones anuales provenientes de la operación del Canal, cuando antes eran $30 millones”, indicó González a La Estrella de Panamá. Además, las operaciones de la vía interoceánica deben complementarse con el canal seco multimodal entre el Atlántico y el Pacífico, proyecto aprobado el 13 de marzo pasado en Consejo de Gabinete. Una nueva conexión terrestre mediante la cual la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) busca modernizar la plataforma logística, agilizar los trámites aduaneros y mantener la competitividad en el sector, a fin de generar mayor movilidad de carga y aumentar la eficiencia como país.
La visita de Moody’s
Hoy el MEF sostendrá una reunión con representantes de la calificadora Moody’s para analizar el escenario económico y financiero que le espera al próximo gobierno. La preocupación de la calificadora se centra, entre otras cosas, en la capacidad de recaudación reflejada por la Dirección General de Ingresos en comparación a los gastos del gobierno, entre los que resaltan la planilla y subsidios.
Las proyecciones económicas del MEF entran en contradicción con las estimaciones de la calificadora Moody’s, que proyecta un crecimiento del país al 3% para este año. El MEF sustenta que la evaluadora no ha tomado en cuenta las mejoras en la recaudación tributaria. “Lo que usualmente hacen las calificadoras es que comparan recaudaciones históricas. Cuando les compartamos la información sobre el comportamiento de los ingresos y gastos ellos podrán actualizar sus pronósticos”, indicó González.
La apuesta del crecimiento económico se posa en el turismo, que empieza a despegar arriba del 9% del Producto Interno Bruto, la construcción del embalse de Río Indio, así como el sector logístico que junto con la vía interoceánica y el canal seco tendrán un efecto de complementariedad en la economía. “Esto arrojará números distintos a los de la calificadora”, según González.
Deudas por pagar
A pocos meses del relevo gubernamental, el MEF adeuda aproximadamente mil millones de dólares a proveedores locales. Antes de entregar la llave, el gobierno espera pagar unos $600 millones, que se suman a los $375 millones del FAP. Con todo y eso, aseguró González, entregarán las finanzas mejor de lo que las encontraron. “Habrá dinero en las arcas. Nosotros logramos el financiamiento que requiere el presupuesto de este año en más de un 70%, las medidas tributarias generadas han dado los resultados. Estamos viendo un buen desempeño en la aplicación de la factura fiscal”, manifestó.
El funcionario aseguró que están limpiando más de $900 millones pendientes. “La idea es que las deudas por pagar respondan a un ciclo predecible de seis meses. “Que esa cifra baje a una manejable para la administración que tome el poder”, zanjó.
Sobre el proyecto 1141
En el proyecto presentado a la Asamblea se estipularon las reglas de acumulación del FAP, que deberían estar constituidas por la totalidad de los activos del extinto Fondo Fiduciario de Desarrollo y se acumularan con los aportes del 50% de toda contribución de la ACP al Tesoro Nacional superior al 2.5% del PIB nominal para la vigencia fiscal 2018 y 2019, y de 2.25% a partir de la vigencia fiscal 2020.
Este excedente se transferirá en la vigencia fiscal siguiente después de la publicación del PIB de la Contraloría General de la República. No obstante, señala la propuesta, no existe una cláusula de excepción para dejar de alimentar el ahorro en momentos de crisis económica. Es decir, cuando se requiere actuar de manera anticíclica e inyectar recursos a la economía para su estabilización, como ocurrió durante la pandemia. Entre 2020-2023, cuando se requirieron fuertes sumas de dinero para estabilizar la economía, el gobierno estuvo obligado a transferir al FAP más de mil millones de dólares. Originalmente se planteó establecer un aporte mínimo anual de $200 millones del presupuesto del MEF que será transferido al FAP a partir de 2025 hasta el 2033. Luego será incrementado en $50 millones cada cinco años a partir del 2034. No obstante, el aporte del MEF al FAP no será transferido cuando se experimente una desaceleración económica igual o superior a la establecida en la ley 34 de 2008 y cuando se decrete un estado de emergencia nacional por el Consejo de Gabinete por hechos que tengan la capacidad de impactar de forma negativa el déficit fiscal. Como consecuencia, el numeral 2 de la propuesta dispone que quedan extinguidas las obligaciones de aportes del Estado al FAP para las vigencias fiscales de 2020 al 2024, según se lee en el proyecto presentado por el ministro de la cartera Héctor Alexander.