Panamá: un país comprometido con la seguridad alimentaria y nutricional

El 2024 ha sido un año de significativos avances para Panamá, pero también un año que nos ha presentado grandes oportunidades de mejora para seguir contribuyendo en la seguridad alimentaria y nutricional de la población de este país.

Este año, Panamá fue anfitrión de importantes encuentros internacionales para promover los temas de producción, nutrición, alimentación escolar, sanidad animal y medio ambiente, en donde representantes de diversos países de la región reafirmaron su compromiso por contribuir a estos temas.

Junto a otros países del Sistema de la Integración Centroameri-cana (SICA), en 2024 Panamá continuó procesos de gestión altamente relevantes para ofrecer mejores condiciones de vida a las poblaciones del corredor seco y zonas áridas.

Algunos de estos son iniciativas como “Mano de la Mano”, “Un país, un producto prioritario”, o bien, las acciones de digitalización en la agricultura, las alianzas por la restauración de paisajes para la implementación de las Metas Nacionales de Neutralidad de la Degradación de la Tierra, el fortalecimiento de capacidades en zonificación agrícola ante el riesgo climático, entre otros temas impulsados por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y sus socios estratégicos.

Adicionalmente, Panamá fue el segundo país de la región del SICA en arrancar con los preparativos para el “Programa Regional de Adaptación Basada en Ecosiste-mas, para Aumentar la Resiliencia al Cambio Climático en el Corredor Seco Centroamericano y las Zonas Áridas de la República Dominicana”, que se implementa bajo el liderazgo del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), con el apoyo técnico de la FAO, la Comisión Centroamericana de Ambiente y Desarrollo (CCAD), el Consejo Agropecuario Centroamericano (CAC) y, por supuesto, el Gobierno Nacional. No podemos dejar de mencionar que este 2024 hubo un importante avance en Panamá con la actualización de las guías alimentarias basadas en sistemas agroalimentarios, y el fortalecimiento de capacidades de los territorios indígenas de este país, que son aliados clave y eficaces para apoyar la consecución de la seguridad alimentaria para todas las personas de forma sostenible.

Más recientemente, Panamá fue el lugar en donde la FAO y el Parlamento Latinoamericano y Caribeño (Parlatino) destacaron los logros alcanzados durante más de 15 años de alianza estratégica, reafirmando su compromiso con la cooperación regional para erradicar el hambre, la promoción de sistemas agroalimentarios sostenibles y el fortalecimiento de las capacidades parlamentarias en estos sentidos.

Y, por supuesto, la agenda fito-zoosanitaria ha sido y seguirá siendo tema prioritario durante este periodo y el año que se aproxima. En toda la región, la FAO y las direcciones de sanidad vegetal y animal de los ministerios de Agricultura, así como los servicios veterinarios, junto a otros socios, estamos trabajando por la prevención, control y erradicación de enfermedades como el fusarium raza 4 tropical, la peste porcina africana, la fiebre aftosa y plagas como el gusano barrenador del ganado, la mosca de la fruta y la langosta centroamericana, desde el diagnóstico, la vigilancia, la cuarentena y los sistemas de alerta temprana, bajo el enfoque “Una sola salud”, dado el impacto que esto supone para el comercio y en la seguridad alimentaria de la población. Todo esto no habría sido posible sin el apoyo de nuestras contrapartes: Gobierno Nacional, parlamentarios, socios de recursos, organizaciones de la sociedad civil, organismos regionales e internacionales, sector privado, agencias hermanas del Sistema de Naciones Unidas, pueblos indígenas, entre otros.

Con ustedes hemos trabajado incansablemente para situar la alimentación y la agricultura como una prioridad en la agenda internacional, por el bien de las personas y de nuestro planeta, porque los sistemas agroalimentarios son una de las soluciones clave a la problemática del cambio climático, tal como lo ha expresado nuestro director general, Qu Dongyu, en varias ocasiones.

El 2024 cerró para Panamá con cifras alentadoras, en comparación con el resto de la región, ya que según el último informe de las Naciones Unidas sobre el Estado de la Seguridad Alimentaria y la Nutrición en el Mundo (2024) para el periodo 2021-2023, la cifra de subalimentación para Panamá fue de 5,6 %, por debajo del promedio regional (6,6 %) y el promedio mundial (9,1 %) para este mismo periodo. Sin embargo, nuestro trabajo no puede detenerse. No nos podemos confiar.

Panamá sigue enfrentando altas cifras de sobrepeso entre niños y niñas (11,4 %), por encima del nivel regional (8,6 %) y de la estimación global (5,6 %). Así como altos índices de obesidad entre adultos para el año 2022 (36,1 %), por encima del promedio regional (29,9 %) y del nivel mundial (15,8 %).

Estos porcentajes subrayan la necesidad urgente de seguir trabajando por adoptar políticas públicas integrales y prácticas que promuevan una alimentación saludable y el bienestar desde una edad temprana. Solo trabajando juntas y juntos lo podremos lograr.

Finalmente, este año la FAO lanzó como campaña del Día Mundial de la Alimentación “El derecho a una alimentación adecuada”, reafirmando una vez más que asegurar que todos tengan acceso a alimentos nutritivos y asequibles requiere la colaboración de gobiernos, sector privado, agricultores, academia, sociedad civil y de cada uno de nosotros como ciudadanos.

Como dijo el director general de la FAO a inicios de este año: “la nueva y dinámica FAO está en buenas condiciones para prestar más apoyo a los miembros y aunar esfuerzos con los asociados en aras de una mejor producción, una mejor nutrición, un mejor medio ambiente y una mejor vida”. ¡Cuenten con nosotros! ¡Felices fiestas a todo el pueblo panameño!