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El reto del Seguro Social

Actualizado
  • 14/08/2024 00:00
Creado
  • 13/08/2024 12:47

[...] le corresponde al director general, tal como ha estructurado el Ejecutivo la hoja de ruta, realizar la necesaria transición para objetivar la situación caótica en que se encuentra la institución [...]

Lo que la mayoría de los asegurados esperábamos se dio, con la celeridad y sensatez necesaria, el presidente, José Raúl Mulino designó al actuario Dino Mon como nuevo director general de la Caja de Seguro Social.

Ahora le corresponde al director general, tal como ha estructurado el Ejecutivo la hoja de ruta, realizar la necesaria transición para objetivar la situación caótica en que se encuentra la institución, no solo en los aspectos económicos y financieros, si no, en los que es el elemento más impactante, por la inmediatez: la atención médica y los medicamentos. De forma que, oportunamente, pueda elaborar los ajustes pertinentes que nos lleven a estructurar una nueva relación en la seguridad social de este país.

Para lograr esta tarea es menester que todos los panameños, asegurados o no, veamos con claridad que esta institución demanda un proceso de reingeniería para adecuarla a las necesidades actuales de nuestra población. Algunos pensarán que solo es problema de los asegurados, sin embargo, en algún momento cada uno de los panameños cotizará seguro social, o tiene un hijo que iniciará un trabajo, por ende, también cotizará. Por lo antes expuesto, es el momento para deponer personalismos y diferencias para unificar criterios en torno a esta tarea.

Vemos, por un lado, los grupos sindicales, que deberían mirar con claridad que, por las diferencias personales y la falta de visión, se invirtió, o más bien, se perdió un tiempo valioso en una mesa de diálogo cuyos resultados se engavetaron y no se le dio curso a ninguna de las propuestas que se concluyeron. Por otro lado, tenemos los gremios de médicos, quienes, habiendo generado, algunos, la información y conclusiones para enrumbar la salud, se debaten en los espacios, sin ver con claridad que el derecho a la salud, además de humano, es constitucional, pero, también se hace necesario, en un momento como el que vivimos, objetivar la necesidad, de racionalizar y adecuar los recursos médicos, de equipo e instalaciones, de forma que pueda la salud, funcionar armónicamente para todos los panameños.

Frente a esta situación, está el sector empresarial que debe visualizar la gran oportunidad de unir esfuerzos con los otros sectores, de forma que, el mejoramiento de la salud de la población trabajadora se traduzca en mejores niveles de productividad, siempre garantizando condiciones de seguridad e higiene dentro de los centros de trabajo que permitan un trabajo seguro.

La mesa está servida, tenemos la disposición del Ejecutivo, el liderazgo y conocimiento de quien dirige; ahora nos toca a los panameños en general, empresarios, trabajadores y gremios de la salud, actuar con una visión de patria. Nuestros hijos y nietos lo agradecerán.

El autor es especialista en medicina del trabajo