Eduquemos sobre seguridad social
- 14/08/2024 00:00
- 13/08/2024 12:46
En palabras sencillas, la seguridad social es un sistema que nos ayuda a enfrentar problemas que afecten nuestra capacidad de ganar dinero. Esto incluye situaciones como: enfermedad, maternidad, accidentes del trabajo, invalidez, vejez, muerte Con la elección del nuevo director general de la Caja de Seguro Social, cuyo periodo de gestión comprenderá el quinquenio 2024 – 2029 y la necesidad de hacer reformas sustanciales a la institución para afrontar los graves problemas que esta padece, que además pueden impactar en su sostenibilidad a largo plazo, considero necesario educar a la población en general sobre la importancia de la seguridad social en nuestras vidas.
Veo a muchos panameños opinar, con todo derecho, sobre las medidas y acciones que deben tomarse para resolver la crisis de la institución de seguridad social de nuestro país, por excelencia. Sin embargo, preocupa algunas opiniones que dejan entrever el poco conocimiento existente sobre seguridad social y su importancia para la sociedad panameña. Ejemplo, son aquellas opiniones que se enmarcan solo en el tema de citas y atención médica, medicamentos, aumento de la edad para pensionarse, entre otras tantas. Lamento decirles que la seguridad social es mucho más que eso. Es la suma de todo ello, y más; de allí la complejidad del problema.
En este contexto, es necesario comprender que la Caja de Seguro Social (CSS) es la principal entidad de seguridad social, si no la única, del Estado. ¿A qué nos referimos con seguridad social? Según la Organización Internacional de Trabajo (OIT) “la seguridad social es la protección que la sociedad otorga ante las contingencias económicas y sociales derivadas de la pérdida de ingresos a consecuencia de enfermedad, maternidad, riesgo del trabajo, invalidez, vejez y muerte, incluyendo la asistencia médica”.
En palabras sencillas, la seguridad social es un sistema que nos ayuda a enfrentar problemas que afecten nuestra capacidad de ganar dinero. Esto incluye situaciones como: enfermedad, maternidad, accidentes del trabajo, invalidez, vejez, muerte. También incluye el acceso a servicios médicos, lo que significa que podemos recibir atención médica sin tener que incurrir en estos gastos.
En síntesis, es un sistema diseñado para proteger a las personas en momentos difíciles relacionados con su salud y su capacidad para generar ingresos, asegurando así un nivel básico de bienestar económico y acceso a atención médica.
Educar a la población en este tema es fundamental, más aún cuando la institución enfrenta severos problemas en todos sus programas y servicios. A este respecto, es importante destacar que la institución ya ha realizado esfuerzos para dar a conocer a la población sobre su naturaleza e importancia en la vida de los panameños. Muestra de ello, fue el convenio suscrito en el año 2013, ente la CSS y el ministerio de Educación, mediante el cual se capacitaron a más de dos mil docentes y se beneficiarían a más de 65 mil estudiantes a partir del año 2014. Sin embargo, por causas políticas, el Convenio fue suspendido una vez asumió el nuevo Gobierno en julio de 2014. Estas son las consecuencias nefastas cuando la política se interpone a los programas de Estado.
Todos los panameños debemos avocarnos y apoyar todos los esfuerzos para salvar a la institución más noble que tenemos en nuestro país. La CSS, por su parte, debe diseñar estrategias de comunicación y divulgación enfocadas en dar a conocer su rol fundamental en la provisión de servicios de salud y prestaciones económicas. Deben incluirse a expertos en seguridad social que puedan abordar las inquietudes de la población, así como proporcionar información clara sobre cómo la crisis financiera impacta la calidad y disponibilidad de estos servicios. Además, será necesario utilizar una variedad de plataformas de comunicación, convencionales y digitales, para asegurar que la información llegue a un público amplio y diverso.
También será fundamental involucrar al servidor público de la CSS. Esto puede lograrse mediante la implementación de programas de capacitación enfocados en el clima y la cultura organizacional, promoviendo un sentido de pertenencia y compromiso del personal. Al fomentar un ambiente de trabajo positivo y motivador, se puede cultivar el orgullo de ser parte de la institución que ha sido fundamental en la protección social de los panameños.
Además, será crucial implementar un programa de retroalimentación que permita a los ciudadanos expresar sus preocupaciones y sugerencias respecto a los servicios de la institución. Esto no solo fomentará un sentido de pertenencia y participación, sino que también ayudará a la CSS a identificar áreas de mejora. La creación de un canal de comunicación directa facilitaría el acceso a la información y permitiría a los asegurados recibir actualizaciones sobre la situación financiera de la institución y las medidas que se están tomando para mitigar sus efectos. Este enfoque proactivo no solo aumentará la transparencia, sino que también fortalecerá la confianza de la población en la CSS y sus servicios.
Al final, nos corresponde a todos proteger y salvar a una institución que está presente en nuestras vidas desde antes de nuestra concepción, hasta más allá de nuestro fallecimiento. Si no actuamos, nos condenaríamos a destruir los cimientos de nuestra seguridad social.
El autor es licenciado en administración de empresas
Con la elección del nuevo director general de la Caja de Seguro Social, cuyo periodo de gestión comprenderá el quinquenio 2024 – 2029 y la necesidad de hacer reformas sustanciales a la institución para afrontar los graves problemas que esta padece, que además pueden impactar en su sostenibilidad a largo plazo, considero necesario educar a la población en general sobre la importancia de la seguridad social en nuestras vidas.
Veo a muchos panameños opinar, con todo derecho, sobre las medidas y acciones que deben tomarse para resolver la crisis de la institución de seguridad social de nuestro país, por excelencia. Sin embargo, preocupa algunas opiniones que dejan entrever el poco conocimiento existente sobre seguridad social y su importancia para la sociedad panameña. Ejemplo, son aquellas opiniones que se enmarcan solo en el tema de citas y atención médica, medicamentos, aumento de la edad para pensionarse, entre otras tantas. Lamento decirles que la seguridad social es mucho más que eso. Es la suma de todo ello, y más; de allí la complejidad del problema.
En este contexto, es necesario comprender que la Caja de Seguro Social (CSS) es la principal entidad de seguridad social, si no la única, del Estado. ¿A qué nos referimos con seguridad social? Según la Organización Internacional de Trabajo (OIT) “la seguridad social es la protección que la sociedad otorga ante las contingencias económicas y sociales derivadas de la pérdida de ingresos a consecuencia de enfermedad, maternidad, riesgo del trabajo, invalidez, vejez y muerte, incluyendo la asistencia médica”.
En palabras sencillas, la seguridad social es un sistema que nos ayuda a enfrentar problemas que afecten nuestra capacidad de ganar dinero. Esto incluye situaciones como: enfermedad, maternidad, accidentes del trabajo, invalidez, vejez, muerte. También incluye el acceso a servicios médicos, lo que significa que podemos recibir atención médica sin tener que incurrir en estos gastos.
En síntesis, es un sistema diseñado para proteger a las personas en momentos difíciles relacionados con su salud y su capacidad para generar ingresos, asegurando así un nivel básico de bienestar económico y acceso a atención médica.
Educar a la población en este tema es fundamental, más aún cuando la institución enfrenta severos problemas en todos sus programas y servicios. A este respecto, es importante destacar que la institución ya ha realizado esfuerzos para dar a conocer a la población sobre su naturaleza e importancia en la vida de los panameños. Muestra de ello, fue el convenio suscrito en el año 2013, ente la CSS y el ministerio de Educación, mediante el cual se capacitaron a más de dos mil docentes y se beneficiarían a más de 65 mil estudiantes a partir del año 2014. Sin embargo, por causas políticas, el Convenio fue suspendido una vez asumió el nuevo Gobierno en julio de 2014. Estas son las consecuencias nefastas cuando la política se interpone a los programas de Estado.
Todos los panameños debemos avocarnos y apoyar todos los esfuerzos para salvar a la institución más noble que tenemos en nuestro país. La CSS, por su parte, debe diseñar estrategias de comunicación y divulgación enfocadas en dar a conocer su rol fundamental en la provisión de servicios de salud y prestaciones económicas. Deben incluirse a expertos en seguridad social que puedan abordar las inquietudes de la población, así como proporcionar información clara sobre cómo la crisis financiera impacta la calidad y disponibilidad de estos servicios. Además, será necesario utilizar una variedad de plataformas de comunicación, convencionales y digitales, para asegurar que la información llegue a un público amplio y diverso.
También será fundamental involucrar al servidor público de la CSS. Esto puede lograrse mediante la implementación de programas de capacitación enfocados en el clima y la cultura organizacional, promoviendo un sentido de pertenencia y compromiso del personal. Al fomentar un ambiente de trabajo positivo y motivador, se puede cultivar el orgullo de ser parte de la institución que ha sido fundamental en la protección social de los panameños.
Además, será crucial implementar un programa de retroalimentación que permita a los ciudadanos expresar sus preocupaciones y sugerencias respecto a los servicios de la institución. Esto no solo fomentará un sentido de pertenencia y participación, sino que también ayudará a la CSS a identificar áreas de mejora. La creación de un canal de comunicación directa facilitaría el acceso a la información y permitiría a los asegurados recibir actualizaciones sobre la situación financiera de la institución y las medidas que se están tomando para mitigar sus efectos. Este enfoque proactivo no solo aumentará la transparencia, sino que también fortalecerá la confianza de la población en la CSS y sus servicios.
Al final, nos corresponde a todos proteger y salvar a una institución que está presente en nuestras vidas desde antes de nuestra concepción, hasta más allá de nuestro fallecimiento. Si no actuamos, nos condenaríamos a destruir los cimientos de nuestra seguridad social.