Revista Mía

Fucsia Bazar, más allá del ‘thrifting’

Actualizado
  • 27/06/2024 00:00
Creado
  • 26/06/2024 11:34

Con apenas 22 ediciones, Fucsia Bazar ha sabido cómo convertirse en un espacio seguro y una comunidad en donde personas de diferentes orígenes pueden disfrutar de una de sus actividades favoritas: salir de compras

Para Génesis Silva lo que inició en la habitación de su apartamento se convirtió en el bazar de ropa más grande en Panamá. Y es que Fucsia Bazar, evento que sucede regularmente una vez al mes en La Manzana de Santa Ana, no sólo reúne a decenas de emprendedores sino que también se ha convertido en el lugar que panameños de diferentes tallas, edades y contextos socioeconómicos asisten para hacer ‘thrifting’.

Es de esta manera que las personas se pasean por los diferentes ‘racks’ de ropa, zapatos, accesorios, bolsos y demás objetos que puedan encontrar toda la tarde; todo esto acompañado de bebidas y conversaciones amenas entre compradores e incluso con los propios emprendedores que forman parte del bazar.

Silva destaca que en un principio pensó en la venta de ropa de segunda mano después de darse cuenta de la gran cantidad de ropa que no utilizaba.

Así, junto a sus amigas realizó una primera venta en espacio pequeño sin pensar que años después Fucsia Bazar tendría la presencia de grandes fashion influencers del país como Vicky Di Lorenzo, Paola Molina, María Cristina Pérez, e incluso ex misses como Natasha Vargas, Gladys Brandao y Solaris Barba compartiendo parte de sus closets con quienes visitan el bazar.

“A mí se me quedó en la cabeza llevar este proyecto a algo un poco más grande, porque me di cuenta que habían muchas personas como yo y ahí fue cuando nació el concepto de Fucsia Bazar. Todos los meses abro una convocatoria para las personas que quisieran participar y básicamente hay algunos parámetros como que la ropa debe estar en buen estado y debe tener un rango de precios bastante accesible”, comentó la directora creativa de esta iniciativa en una conversación con Mía.

Moda en comunidad

Una de las cualidades que caracteriza al bazar es su capacidad de inclusión. Es un espacio en el que personas de diferentes orígenes tienen la oportunidad de encontrarse y compartir su amor por la ropa ‘pre-loved’, una tendencia que va en aumento en la capital del país.

“Ya siento que más allá de un evento, estamos en una comunidad que todos los días crece y en la que adicionalmente puedes ir a comprar ropa. Por ejemplo, hay clientes que pasan toda la tarde en el Bazar... Creo que ese sería el valor de Fucsia Bazar”, explicó Silva.

Por otro lado, para la directora creativa de la iniciativa destaca de que esta es una manera de no contribuir al hiperconsumismo que ya existe en la industria de la moda, además de dar opciones más económicas a personas de diferentes situaciones económicas, haciéndolo mucho más accesible.

El último evento de Fucsia Bazar se dio el pasado 15 de junio, en el cual la comunidad que acompaña a este espacio se dio cita en La Manzana. Aunque para el próximo mes no existe una fecha definida todavía, Silva destacó esperar contar con la presencia de muchas más personas que se atrevan a formar parte de la familia del bazar para compartir un día ameno entre compras.