Revista Mía

Atheyna Bylon ‘Soy una atleta que no le gustan las derrotas; me dicen que tengo un ego deportivo’

fotografías: eric marsciscano
Actualizado
  • 29/08/2024 18:10
Creado
  • 22/08/2024 11:41

La boxeadora panameña luchó por una victoria en París y la consiguió. Tocó suelo panameño con una medalla de plata y compartió con MÍA su amor e inicios en el deporte, su vida como parte de la Policía Nacional y lo que desea para los atletas panameños

‘Soy una atleta que no le gustan las derrotas; me dicen que tengo un ego deportivo’

Creer que nada en la vida es casualidad se vuelve una realidad casi palpable al conocer a Atheyna Bylon. La panameña de 35 años llegó a sus dos pasiones porque el universo así lo quiso, pero también fue gracias a su dedicación, tenacidad y por sobre todo, su humildad.

La atleta conversó con revista MÍA en la sede de la Policía Nacional en Ancón muy poco después de recibir una condecoración en su honor por su medalla de plata en los Juegos Olímpicos París 2024. El sol a las 7:00 a.m. brillaba sin perdón alguno y el recinto se encontraba acompañado de medios de comunicación, los niños del Centro de Atención Integral a la Primera Infancia (CAIPI) de Balboa y el cuerpo de seguridad panameño.

La boxeadora en esta ocasión no vestía su característica ropa deportiva, sino un segundo uniforme que la ha acompañado por años y que ahora le regala otro nombre: sargento primero. Sonríe mientras se encoge al recibir su medalla y agradece por las palabras del director general de la Policía Nacional, Jaime Fernández.

”Es un honor tener entre nuestras filas a una mujer tan valiente y dedicada como la sargento primero Atheyna Bylon. Su triunfo en los Juegos Olímpicos es un reflejo del espíritu de sacrificio y amor por la patria que todos los policías llevan en el corazón”, enunció Fernández.

Pero a pesar del enorme logro, Bylon permanece fiel a su esencia. “Espero no cambiar nunca y ser siempre Atheyna”, expresó a MÍA. Con una sonrisa y a pesar de notarse agotada del sol, dio inicio a la entrevista entre risas, anécdotas y muchos sueños cumplidos.

¿Qué recuerdos tiene de su infancia?

Nací en San Miguelito y recuerdo una infancia feliz, llena de mucho juego. Crecí con mi abuela, mamá y hermana quienes me criaron y estuvieron conmigo. Sin duda fue una niñez que disfruté al máximo.

¿En qué momento comienza su amor por el boxeo?

Comencé el boxeo en la Policía Nacional. En aquel entonces hacía turno en El Chorrillo y fue por motivación de mis compañeros que comencé en el deporte. Al principio me rehusaba ya que no me gustaba. Tenía esta idea de que el boxeo era un deporte muy masculino y que no era bien visto entre las mujeres. Mis compañeros y jefes de trabajo me dieron la motivación para iniciar en ese mundo del que solo pensé participar en un evento, pero aquí estoy once años después dedicándome a la disciplina y mira lo lejos que he llegado.

¿Y ha cambiado ese pensamiento de que el boxeo es solo para hombres?

Definitivamente. Después de un año de practicar el deporte, he tenido la oportunidad de ver el boxeo con otra mirada. He visto que las mujeres podemos darlo todo y lograr lo que nos proponemos y veía que yo lo estaba haciendo bien, sin necesidad de ser un niño o verme como uno.

¿Y su decisión de ser parte de la Policía Nacional nace por algún motivo en especial?

En realidad, no. Vi un comercial en la televisión sobre la Policía Nacional y quise intentarlo, pero nunca hubo un motivo como tal. Yo quería ser abogada, pero estudié arquitectura porque también me gustaba dibujar. Luego ingresé en la Policía Nacional y termino con una licenciatura en educación física y entrenamiento personal. Siempre me ha gustado enseñar.

Llegó a los Juegos Olímpicos 2024. ¿Qué sintió al enterarse que iba a París?

Celebré muchísimo. Es un orgullo representar al país en estos eventos. En esta ocasión participé por tercera vez en los Juegos Olímpicos así que me sentía enfocada. Sabía que este había sido mi mejor ciclo olímpico y reconocía encontrarme en las mejores condiciones, que estaba haciendo las cosas bien y podía lograr mi objetivo.

¿Tiene alguna rutina antes de una pelea?

Siempre escucho música: típico, vallenato, y artistas panameños. Siempre estoy relajada y hago conversación con las personas a mi alrededor para no sentir ningún tipo de presión. No tengo ritual como tal.

Obtuvo medalla de plata y no solo eso, sino que se convirtió en la primera mujer panameña en conseguir dicho logro. ¿Cómo fue su preparación?

Fue un proceso muy fuerte y puedo decir que ha sido el año más duro de mi carrera. Comencé el 2024 lesionada y aun así tenía que prepararme. Salía del entrenamiento y me dirigía a fisioterapia, después me realizaban acupuntura y fortalecimiento. Fue un trabajo también mentalmente difícil porque quería esforzarme lo más que podía a pesar de que a veces mis entrenadores me pedían lo contrario.

Sabía que no me dirigía a cualquier competencia, sino los Juegos Olímpicos y eso requería un esfuerzo extra. Entrené en Brasil y Portugal y ese apoyo internacional fue importante. Fue un trabajo duro, pero todo sacrificio tiene su recompensa.

¿Qué le dice a las mujeres que cómo usted les interesa este deporte?

Tienen que cambiar ese mismo pensamiento que yo tenía de que el deporte es para los hombres. Las mujeres podemos lograr todo lo que nos proponemos. En el mundo deportivo, somos quienes estamos dejando alto a Panamá y eso lo evidenciamos al asistir a los Juegos Olímpicos. Eramos más mujeres atletas que hombres quienes representamos al país.

A las mujeres: no se rindan, luchan por sus sueños, sean como un ave fénix. Las mujeres podemos lograr todo porque somos el sexo más fuerte que existe en Panamá y el mundo.

El boxeo se ha convertido en un posible ‘no’ para los Juegos Olímpicos en Los Ángeles 2028. ¿Hubiese pensado en participar nuevamente de no ser así?

Todavía tengo fe de que el deporte será registrado para los próximos Juegos Olímpicos. Y si, tengo pensado realizar dicho ciclo porque no me cabe duda que son solo problemas administrativos que serán solucionados.

¿Qué podemos esperar de Atheyna en los próximos años?

La misma Atheyna que ha estado luchando por representar a su país, que se ha esforzado, que es disciplinada, y crean que seguiré haciéndolo de la mejor manera y con la mejor actitud.

Hablemos de las voces interiores de Atheyna. ¿Qué le dicen previo a una pelea?

Que no me puedo dejar, que lo puedo lograr, si me pegan una vez, yo pego dos. También tengo esas voces que me dicen que estoy representando un país y por ende, debo dejarlo en alto. Salgo al ´ring´con esa mentalidad positiva de que debo hacer las cosas bien.

¿Siente presión por esa voz interna que exige siempre dejar a Panamá en alto?

No, todo lo contrario. Esa voz es un impulso de que puedo hacer las cosas cada vez mejor y cumplir una meta más.

Y en el caso de vivir una derrota. ¿Qué dicen las voces de Atheyna?

Primero lloro por tres semanas más o menos (risas). No quiero hablar con nadie, no lo supero. Después de eso, encuentro la motivación para seguir y las voces cambian a darme el impulso que necesito para continuar y mejorar cada día.

No lo negaré, perder me da duro. Soy una atleta que no le gustan las derrotas y mis jefes me dicen que tengo un ego deportivo por ello. Y si, una pérdida duele. Creo que todos se dieron cuenta estando en París porque mientras todos celebraran, yo lloraba (risas).