Sol y playa, la opción predilecta de los turistas para Semana Santa
- 29/03/2024 00:00
- 28/03/2024 18:33
El presidente de la Cámara Panameña de Turismo, Ovidio Díaz, explicó que el sector tiene prevista una ocupación media durante los días de asueto Las cifras de ocupación hotelera que el sector turismo espera recibir por Semana Santa están entre normales y bajas, confirmó el presidente de la Cámara Panameña de Turismo (Camtur), Ovidio Díaz, en entrevista con La Estrella de Panamá.
“Basándonos en un estudio que realizamos hace unos días, sobre las reservas en hoteles para esta época, podemos afirmar que algunas regiones que tradicionalmente han tenido una ocupación superior al 80% seguirán esta tendencia, pero que otras, que también tenían cifras similares, han mermado”, ponderó el especialista.
Desde Camtur explican que se tiene previsto que la ciudad de Panamá tenga una ocupación cercana al 50%, debido principalmente a los turistas que llegan en los cruceros. “Es un dato un poco bajo en comparación con años anteriores. La verdad no está muy bien”, valoró Díaz.
Durante la semana mayor de 2023, la ciudad capital tenía cerca de 85.000 turistas, según datos obtenidos de la Contraloría General de la República, aunque Díaz aclara que el renglón nunca ha contado con una data “sólida” dentro de su sector, lo que hace complejo analizar el comportamiento de los visitantes de un año a otro.
“Los datos que posee el sector siempre han sido muy débiles, porque no tenemos una estructura que nos permita obtener las cifras correctas y en tiempo real”, indicó.
La expectativa en el interior del país es mixta; por un lado se tiene una alta expectativa de ocupación en la ribera Pacífica, que va desde Punta Chame (provincia Panamá Oeste) hasta Farallón (provincia de Coclé), incluyendo El Valle de Antón. Desde Camtur estiman que los números estarán por encima del 90%. “Esta zona es la más económica para los turistas locales, porque tiene menos costos en lo que a movilidad se refiere”, explicó.
En provincias centrales (Herrera, Los Santos y Veraguas) se espera una ocupación baja, que ronda el 50%. “Esta es la zona que más nos preocupa, porque suele ser de las más visitadas. Nuestra teoría es que la carencia de agua potable está mermando el interés en esta región, pero esto hay que investigarlo”, confesó.
Los datos de Chiriquí son mixtos. La zona de Tierras Altas prevé tener una ocupación que ronda el 50%, pero en Boquete se estima que habrá una ocupación hotelera que ronda el 95%.
La realidad de Bocas del Toro no ha variado con los años, porque esta región está esperando una ocupación cercana al 80%, motivada por el ingreso de turistas costarricenses.
“Es evidente que el impacto económico será alto, con cifras que superen los $100 millones, a nivel nacional, porque involucra no solo la parte hotelera, sino todas las actividades aledañas”, resaltó el presidente de Camtur.
Identidad turística Aunque la Semana Santa suele ser un buen escenario para atraer turismo religioso a los países de la zona, “Nosotros no hemos desarrollado a cabalidad el turismo religioso, porque tenemos carencias en su diseño, estructura y promoción”, dijo Díaz, quien considera que otros destinos, como Colombia, lo tienen más desarrollado.
Datos de la única Encuesta de Turismo Receptor, realizada en Panamá, arrojaron que para 2018 solo un 1% de los turistas que el país recibió ese año, ingresó por motivos religiosos.
El Plan Maestro de Turismo Sostenible de Panamá 2020-2025 establece el turismo religioso como una de las aristas que desea potenciar, con Portobelo y Santa Isabel (ambas zonas ubicadas en Colón), como la región bandera de los esfuerzos.
El calendario de estrategias y proyectos del documento muestra que se hicieron preparaciones de iniciativas para estimular este tipo de turismo en 2021 y 2022, pero el líder de Camtur aboga porque los esfuerzos sean constantes si se desea marcar una tendencia.
“Para comenzar a diseñar un turismo religioso en el país es necesario establecer un producto que se promocione a nivel internacional, durante muchos meses previos a la semana mayor”, analizó Díaz.
El desafío, según el especialista, es que la industria turística en el país es “muy joven” y encuentra su principal fortaleza en las playas y lugares veraniegos. “Todas las empresas de turismo en el mundo señalan que nuestro producto turístico por excelencia es el sol y la playa, no nos hemos diversificado lo suficiente para potenciar el turismo religioso”, remarcó.
Es por eso que el líder de Camtur ve una oportunidad buena en este tipo de actividad, para solventar la carencia de turistas que tiene la ciudad de Panamá en esta época, con visitantes extranjeros, dado que la mayor parte de las personas locales se mueven hacia el interior del país.
La Autoridad de Turismo de Panamá (ATP) mencionó en un comunicado, emitido el pasado 18 de marzo, que se estaban desarrollando algunas iniciativas que iban en esta dirección, tanto en la capital como en la ribera Pacífica.
“Estamos apoyando las actividades que por tradición desarrolla el Comité de Amigos de las Iglesias del Casco Antiguo, quienes durante 12 años han restaurado templos y montado una auténtica Semana Santa al estilo sevillano, reviviendo tradiciones de las cofradías del viejo San Felipe y rescatando hitos de nuestro patrimonio histórico cultural”, alegaron.
Otro punto que mencionaron fue que se acogió la iniciativa del chef Jorge Jurado de organizar un circuito de atención a turistas y peregrinos, en donde se brindará información y se contará con un área de esparcimiento, además de una vitrina cultural, en el Conjunto Monumental del Arco Chato.
Las cifras de ocupación hotelera que el sector turismo espera recibir por Semana Santa están entre normales y bajas, confirmó el presidente de la Cámara Panameña de Turismo (Camtur), Ovidio Díaz, en entrevista con La Estrella de Panamá.
“Basándonos en un estudio que realizamos hace unos días, sobre las reservas en hoteles para esta época, podemos afirmar que algunas regiones que tradicionalmente han tenido una ocupación superior al 80% seguirán esta tendencia, pero que otras, que también tenían cifras similares, han mermado”, ponderó el especialista.
Desde Camtur explican que se tiene previsto que la ciudad de Panamá tenga una ocupación cercana al 50%, debido principalmente a los turistas que llegan en los cruceros. “Es un dato un poco bajo en comparación con años anteriores. La verdad no está muy bien”, valoró Díaz.
Durante la semana mayor de 2023, la ciudad capital tenía cerca de 85.000 turistas, según datos obtenidos de la Contraloría General de la República, aunque Díaz aclara que el renglón nunca ha contado con una data “sólida” dentro de su sector, lo que hace complejo analizar el comportamiento de los visitantes de un año a otro.
“Los datos que posee el sector siempre han sido muy débiles, porque no tenemos una estructura que nos permita obtener las cifras correctas y en tiempo real”, indicó.
La expectativa en el interior del país es mixta; por un lado se tiene una alta expectativa de ocupación en la ribera Pacífica, que va desde Punta Chame (provincia Panamá Oeste) hasta Farallón (provincia de Coclé), incluyendo El Valle de Antón. Desde Camtur estiman que los números estarán por encima del 90%. “Esta zona es la más económica para los turistas locales, porque tiene menos costos en lo que a movilidad se refiere”, explicó.
En provincias centrales (Herrera, Los Santos y Veraguas) se espera una ocupación baja, que ronda el 50%. “Esta es la zona que más nos preocupa, porque suele ser de las más visitadas. Nuestra teoría es que la carencia de agua potable está mermando el interés en esta región, pero esto hay que investigarlo”, confesó.
Los datos de Chiriquí son mixtos. La zona de Tierras Altas prevé tener una ocupación que ronda el 50%, pero en Boquete se estima que habrá una ocupación hotelera que ronda el 95%.
La realidad de Bocas del Toro no ha variado con los años, porque esta región está esperando una ocupación cercana al 80%, motivada por el ingreso de turistas costarricenses.
“Es evidente que el impacto económico será alto, con cifras que superen los $100 millones, a nivel nacional, porque involucra no solo la parte hotelera, sino todas las actividades aledañas”, resaltó el presidente de Camtur.
Aunque la Semana Santa suele ser un buen escenario para atraer turismo religioso a los países de la zona, “Nosotros no hemos desarrollado a cabalidad el turismo religioso, porque tenemos carencias en su diseño, estructura y promoción”, dijo Díaz, quien considera que otros destinos, como Colombia, lo tienen más desarrollado.
Datos de la única Encuesta de Turismo Receptor, realizada en Panamá, arrojaron que para 2018 solo un 1% de los turistas que el país recibió ese año, ingresó por motivos religiosos.
El Plan Maestro de Turismo Sostenible de Panamá 2020-2025 establece el turismo religioso como una de las aristas que desea potenciar, con Portobelo y Santa Isabel (ambas zonas ubicadas en Colón), como la región bandera de los esfuerzos.
El calendario de estrategias y proyectos del documento muestra que se hicieron preparaciones de iniciativas para estimular este tipo de turismo en 2021 y 2022, pero el líder de Camtur aboga porque los esfuerzos sean constantes si se desea marcar una tendencia.
“Para comenzar a diseñar un turismo religioso en el país es necesario establecer un producto que se promocione a nivel internacional, durante muchos meses previos a la semana mayor”, analizó Díaz.
El desafío, según el especialista, es que la industria turística en el país es “muy joven” y encuentra su principal fortaleza en las playas y lugares veraniegos. “Todas las empresas de turismo en el mundo señalan que nuestro producto turístico por excelencia es el sol y la playa, no nos hemos diversificado lo suficiente para potenciar el turismo religioso”, remarcó.
Es por eso que el líder de Camtur ve una oportunidad buena en este tipo de actividad, para solventar la carencia de turistas que tiene la ciudad de Panamá en esta época, con visitantes extranjeros, dado que la mayor parte de las personas locales se mueven hacia el interior del país.
La Autoridad de Turismo de Panamá (ATP) mencionó en un comunicado, emitido el pasado 18 de marzo, que se estaban desarrollando algunas iniciativas que iban en esta dirección, tanto en la capital como en la ribera Pacífica.
“Estamos apoyando las actividades que por tradición desarrolla el Comité de Amigos de las Iglesias del Casco Antiguo, quienes durante 12 años han restaurado templos y montado una auténtica Semana Santa al estilo sevillano, reviviendo tradiciones de las cofradías del viejo San Felipe y rescatando hitos de nuestro patrimonio histórico cultural”, alegaron.
Otro punto que mencionaron fue que se acogió la iniciativa del chef Jorge Jurado de organizar un circuito de atención a turistas y peregrinos, en donde se brindará información y se contará con un área de esparcimiento, además de una vitrina cultural, en el Conjunto Monumental del Arco Chato.