Panamá invierte $900 millones en reducir la pobreza en adultos mayores
- 13/11/2024 00:00
- 12/11/2024 18:38
El Gobierno ha sustentado que programas como 120 a los 65 contribuyen al bienestar de los sectores de la sociedad que viven en condiciones de pobreza y pobreza extrema. La Cepal, por su parte, destacó que, en Centroamérica, Panamá se destaca por sus niveles de cobertura alcanzados con este programa Para reducir la pobreza en personas mayores de 60 años, el Gobierno panameño ha destinado cerca de $899.8 millones en el programa 120 a los 65 años.
La cifra corresponde al desglose que lleva el Ministerio de Desarrollo Social (Mides) desde 2019 hasta 2023, y que ha incluido a 2.3 millones de panameños.
Sólo en el tercer pago correspondiente a los meses de julio, agosto y septiembre de 2024, el Mides ha invertido $43.4 millones para transferencias a 120.774 panameños.
Los 120 a los 65 es un programa de transferencia monetaria condicionada que hace el Gobierno Nacional a los adultos mayores, hombres y mujeres, de 60 años o más. Consiste en la entrega de $120 mensuales a las personas adultas mayores de 65 años o más sin jubilación ni pensión por vejez, en condiciones de riesgo social, vulnerabilidad, marginación o pobreza.
El 86 % de las personas beneficiadas ha indicado que el programa ayudó mucho o suficiente a mejorar su calidad de vida, mientras que el 100 % reportó una mejora en su alimentación. En tanto, el 73% de los beneficiarios también indicó que el programa ayudó con la asistencia escolar de los niños, niñas y adolescentes de su hogar, según los resultados de la primera evaluación de los Programas de Transferencias Monetarias Condicionadas (PTMC) que realizó el Mides en 2023.
Encuesta Hasta 2023, la pobreza general de Panamá se ubicó en 21,7 % y en 9,6 % la pobreza extrema, según la Encuesta de Hogares del 2022 y 2023 del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), que habla sobre la pobreza y la distribución de los ingresos de los hogares.
Para el MEF, las transferencias monetarias que brinda el Gobierno Nacional (Red de Oportunidades, Bono alimenticio, 120 a los 65, Ángel Guardián y PASE- U), que procuran mejorar el nivel de bienestar de la población más vulnerable del país, continuaron impactando positivamente en contener que los niveles de pobreza extrema y pobreza general no fuesen más altos.
Estimó que el porcentaje de pobreza general en 2023 fue de 21,7 %, pero sin las transferencias estatales la proporción se hubiese ubicado en 26,4 %, lo que equivale a decir que sin estos programas hubiera 4,7 puntos porcentuales (p.p.) de incremento en la pobreza general en el país. Principalmente, en las áreas rurales se mantiene el mayor impacto en dicho segmento de la población.
Expresado de otra manera, la reducción que provocan las transferencias monetarias por parte del Estado en los niveles de pobreza general es de aproximadamente 6,9 p.p. en estas áreas y de 3,8 p.p. en las urbanas.
A raíz de estos resultados, la Encuesta de Hogares del 2022 y 2023 del MEF enfatizó en la necesidad de mejorar la redistribución de los programas sociales que brinda el Estado, ya que un porcentaje importante de hogares que no viven en condiciones de pobreza son beneficiarios de estos.
Esta distorsión, detalló, limita incluso a que estos recursos sean transferidos a hogares pobres que son elegibles o que no cuentan con dichas asistencias. En otras palabras, los PTMC merecen especial atención en cuanto a su focalización.
En 2023, del total de personas que recibieron algún PTMC, el 67,6 % era no pobre, mientras que 32,4 % vivía en condición de pobreza general (constituida por pobres extremos y pobres no extremos).
De igual manera, se estimó que, aproximadamente, del total de recursos invertidos por parte del Estado en estos programas (incluyendo PASE-U), el 69,6 % es transferido a personas no pobres y 30,4 % a personas en pobreza general (12,2 % a pobreza extrema y 18,2 % a los pobres no extremos).
Con excepción del Programa de Asistencia Social Educativa – Panamá (PASE-U), el cual es de característica universal, el MEF señaló que los PTMC como Red de Oportunidades, el Bono Alimentario Nutricional de la Secretaría Nacional para el Plan de Seguridad Alimentaria y Nutricional, el destinado a adultos mayores (120 a los 65) y Ángel Guardián, representan asistencias sociales por parte del Estado que buscan ayudar en el nivel de bienestar de los sectores de la sociedad que viven en condiciones de pobreza y pobreza extrema”.
Visión regional El secretario ejecutivo de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), José Manuel Salazar-Xirinachs, destacó este martes que Panamá, junto a República Dominicana, han logrado avances y una importante expansión de la cobertura de programas de transferencias monetarias y de inversión a personas vulnerables en todo Centroamérica.
Salazar-Xirinachs explicó que “en los sistemas no contributivos en la vejez, destacan los niveles de cobertura alcanzados en Panamá con el programa 120 a los 65”.
Durante la presentación del estudio “Panorama Social de América Latina y el Caribe 2024: desafíos de la protección social no contributiva para avanzar hacia el desarrollo social inclusivo”, el secretario ejecutivo de la Cepal comentó que las transferencias de ingresos, especialmente los sistemas de pensiones no contributivos, juegan un papel fundamental en la reducción de la pobreza en la vejez.
En los últimos 20 años, mencionó que la cobertura de los sistemas de pensiones no contributivos entre las personas de 65 años y más aumentó en cerca de 27 p.p. Durante este período la pobreza en esta misma población se redujo en 14,3 puntos porcentuales.
“Ha habido un avance fundamental y que se refleja en resultados en términos de la reducción de la pobreza. Hay evidencia contundente de la importancia de las transferencias en la vejez y las pensiones”, acotó el representante de la Cepal.
José Manuel Salazar-XirinachsSecretario ejecutivo de la CepalEn los sistemas no contributivos en la vejez, destacan los niveles de cobertura alcanzados en Panamá con el programa 120 a los 65”. Cantidad de dinero que ha destinado el Gobierno al programa 120 a los 65 InversiónEn 2019: $182.5 millones, para el beneficio de 381.863 personas.
Para reducir la pobreza en personas mayores de 60 años, el Gobierno panameño ha destinado cerca de $899.8 millones en el programa 120 a los 65 años.
La cifra corresponde al desglose que lleva el Ministerio de Desarrollo Social (Mides) desde 2019 hasta 2023, y que ha incluido a 2.3 millones de panameños.
Sólo en el tercer pago correspondiente a los meses de julio, agosto y septiembre de 2024, el Mides ha invertido $43.4 millones para transferencias a 120.774 panameños.
Los 120 a los 65 es un programa de transferencia monetaria condicionada que hace el Gobierno Nacional a los adultos mayores, hombres y mujeres, de 60 años o más. Consiste en la entrega de $120 mensuales a las personas adultas mayores de 65 años o más sin jubilación ni pensión por vejez, en condiciones de riesgo social, vulnerabilidad, marginación o pobreza.
El 86 % de las personas beneficiadas ha indicado que el programa ayudó mucho o suficiente a mejorar su calidad de vida, mientras que el 100 % reportó una mejora en su alimentación. En tanto, el 73% de los beneficiarios también indicó que el programa ayudó con la asistencia escolar de los niños, niñas y adolescentes de su hogar, según los resultados de la primera evaluación de los Programas de Transferencias Monetarias Condicionadas (PTMC) que realizó el Mides en 2023.
Hasta 2023, la pobreza general de Panamá se ubicó en 21,7 % y en 9,6 % la pobreza extrema, según la Encuesta de Hogares del 2022 y 2023 del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), que habla sobre la pobreza y la distribución de los ingresos de los hogares.
Para el MEF, las transferencias monetarias que brinda el Gobierno Nacional (Red de Oportunidades, Bono alimenticio, 120 a los 65, Ángel Guardián y PASE- U), que procuran mejorar el nivel de bienestar de la población más vulnerable del país, continuaron impactando positivamente en contener que los niveles de pobreza extrema y pobreza general no fuesen más altos.
Estimó que el porcentaje de pobreza general en 2023 fue de 21,7 %, pero sin las transferencias estatales la proporción se hubiese ubicado en 26,4 %, lo que equivale a decir que sin estos programas hubiera 4,7 puntos porcentuales (p.p.) de incremento en la pobreza general en el país. Principalmente, en las áreas rurales se mantiene el mayor impacto en dicho segmento de la población.
Expresado de otra manera, la reducción que provocan las transferencias monetarias por parte del Estado en los niveles de pobreza general es de aproximadamente 6,9 p.p. en estas áreas y de 3,8 p.p. en las urbanas.
A raíz de estos resultados, la Encuesta de Hogares del 2022 y 2023 del MEF enfatizó en la necesidad de mejorar la redistribución de los programas sociales que brinda el Estado, ya que un porcentaje importante de hogares que no viven en condiciones de pobreza son beneficiarios de estos.
Esta distorsión, detalló, limita incluso a que estos recursos sean transferidos a hogares pobres que son elegibles o que no cuentan con dichas asistencias. En otras palabras, los PTMC merecen especial atención en cuanto a su focalización.
En 2023, del total de personas que recibieron algún PTMC, el 67,6 % era no pobre, mientras que 32,4 % vivía en condición de pobreza general (constituida por pobres extremos y pobres no extremos).
De igual manera, se estimó que, aproximadamente, del total de recursos invertidos por parte del Estado en estos programas (incluyendo PASE-U), el 69,6 % es transferido a personas no pobres y 30,4 % a personas en pobreza general (12,2 % a pobreza extrema y 18,2 % a los pobres no extremos).
Con excepción del Programa de Asistencia Social Educativa – Panamá (PASE-U), el cual es de característica universal, el MEF señaló que los PTMC como Red de Oportunidades, el Bono Alimentario Nutricional de la Secretaría Nacional para el Plan de Seguridad Alimentaria y Nutricional, el destinado a adultos mayores (120 a los 65) y Ángel Guardián, representan asistencias sociales por parte del Estado que buscan ayudar en el nivel de bienestar de los sectores de la sociedad que viven en condiciones de pobreza y pobreza extrema”.
El secretario ejecutivo de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), José Manuel Salazar-Xirinachs, destacó este martes que Panamá, junto a República Dominicana, han logrado avances y una importante expansión de la cobertura de programas de transferencias monetarias y de inversión a personas vulnerables en todo Centroamérica.
Salazar-Xirinachs explicó que “en los sistemas no contributivos en la vejez, destacan los niveles de cobertura alcanzados en Panamá con el programa 120 a los 65”.
Durante la presentación del estudio “Panorama Social de América Latina y el Caribe 2024: desafíos de la protección social no contributiva para avanzar hacia el desarrollo social inclusivo”, el secretario ejecutivo de la Cepal comentó que las transferencias de ingresos, especialmente los sistemas de pensiones no contributivos, juegan un papel fundamental en la reducción de la pobreza en la vejez.
En los últimos 20 años, mencionó que la cobertura de los sistemas de pensiones no contributivos entre las personas de 65 años y más aumentó en cerca de 27 p.p. Durante este período la pobreza en esta misma población se redujo en 14,3 puntos porcentuales.
“Ha habido un avance fundamental y que se refleja en resultados en términos de la reducción de la pobreza. Hay evidencia contundente de la importancia de las transferencias en la vejez y las pensiones”, acotó el representante de la Cepal.