Fondo soberano de Panamá acumula un patrimonio de $1.461,1 millones
- 14/05/2024 23:00
- 14/05/2024 16:43
El Fondo de Ahorro Panamá cerró 2023 con un patrimonio de $1.416,1 millones. El fondo soberano creado en 2012 y que reemplazó al Fondo Fiduciario para el Desarrollo ha generado en utilidades unos $419,1 millones, de los cuales $236,5 millones fueron a las arcas del Tesoro Nacional y otros $105,0 millones para la emergencia nacional por la pandemia de covid-19. Actualmente, el proyecto de ley presentado en abril pasado por el MEF, que busca una dispensa por los años 2020, 2021 y 2022, aún no se discute en primer debate El Fondo de Ahorro Panamá (FAP) cuenta con un patrimonio de $1.416,1 millones al cierre de 2023, ganando $122,9 millones tras alcanzar el año anterior $1.293,3 millones, según un informe anual de la entidad.
En su reporte de resultados financieros, el FAP logró antes de costos una rentabilidad anual de 9,88%, una significativa mejora, ya que en 2022 se situó en -8,64%.
Además, el FAP tiene una utilidad acumulada desde 2012 de $419,1 millones. Estos recursos han servido de base para transferir al Tesoro Nacional un total de $236,5 millones en concepto de distribución de excedentes ($131,5 millones), y retiros para casos de emergencia nacional, en este caso relacionados a los efectos de la pandemia de la covid-19, por $105,0 millones, recoge el documento.
El FAP fue creado mediante la Ley 38 del 5 de junio de 2012, con la finalidad de establecer un fondo soberano que sirviera como mecanismo de estabilización para casos de emergencia y desaceleración económica, es así que sustituyó al Fondo Fiduciario para el Desarrollo, creado con la Ley 20 de 1995, que tenía el fin de promover inversiones públicas de desarrollo de país.
El año 2023 para el FAP se constituyó en la recuperación de un 95% de lo experimentado en 2022, y corrigieron la correlación atípica registrada en el año anterior, además de fortalecer su política de inversión conforme a los cambios introducidos en las directrices emitidas por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF). Esto potenció la eficiencia del portafolio estratégico del FAP, con la incorporación de bonos de alto rendimiento y una ampliación de los límites de inversión en activos alternativos.
Para 2024 la junta directiva del FAP espera robustecer el marco de gestión y estructura de los portafolios de inversión de efectivo, acciones, renta fija y capital privado. Para ello planifican la implementación de medidas para ampliar las inversiones alternativas y considerar otras clases de activos que constituyen elementos importantes de diversificación del riesgo y creación de valor para el portafolio del fondo soberano.
Sin embargo, el gobierno central le adeuda al FAP casi $1.000 millones, y la actual administración presentó una iniciativa para que le dispense el pago o aportes de los años pandémicos 2020, 2021 y 2022.
El proyecto 1141, que modifica la ley del FAP, para que sea discutido en esta administración que termina en junio próximo, el Ejecutivo tendría que llamar al Legislativo a secciones extraordinarias, debido a que el pleno de la Asamblea Nacional está en receso. No obstante, una vez se inicie el nuevo período constitucional habrá un nuevo gobierno, nueva junta directiva, así como diputados.
Propuesta de dispensa y capitalización La propuesta presentada por Héctor Alexander, titular del MEF, busca una dispensa para que el gobierno central no aporte al FAP el dinero que por la Ley 5 de 2012 está obligado a transferir –casi $1.000 millones–, es decir, contemplando los años 2020, 2021 y 2022, justo cuando la pandemia de la covid-19 afectó las finanzas de Panamá y el mundo.
Según la Ley 38 del 5 de junio de 2012, el gobierno central debe pagarle al FAP por la vigencia del año 2020, unos $270 millones, para el año 2021 otros $282 millones y para el año 2022 –que se calcula con el año 2021– eran $386 millones.
En la propuesta también se compromete a transferir los recursos para cubrir los aportes pendientes de las vigencias fiscales 2018 y 2019.
En reiteradas ocasiones, Alexander ha dicho que el MEF no ha tocado el fondo, pero con la pandemia, la junta directiva aprobó dos. La propuesta del Ejecutivo modifica el artículo 3 de la Ley 38 de 2012, que crea el Fondo de Ahorro de Panamá y dicta otras disposiciones.
A juicio del ministro, esto “implica transferir al patrimonio del Fondo de Ahorro $200 millones todos los años a partir del año 2025 y $50 millones cada cinco años a partir del año 2034”.
Explicó que en 10 años se estará duplicando el patrimonio en más de $2.000 millones. Además, para fortalecer este cúmulo de recursos, según el titular del MEF, se elimina el artículo 3 de la Ley 38 de 2012, que se refiere a los rendimientos del FAP.
Inversiones Abdiel Santiago, secretario del FAP, destacó en el informe anual que el rendimiento de 9,88% es el mejor retorno de la historia del fondo, logrando 107 puntos básicos. “Este hito, si bien laudable, conlleva el reconocimiento de la posibilidad de que resultados similares no sean fácilmente repetibles en un futuro de corto a mediano plazo”, dijo.
Santiago aboga a la importancia de ceñirse a los llamados primeros principios en materia de inversión para el FAP, ya que son guias básicas que enfatizan la creación de valor a largo plazo, evitando las distracciones a corto plazo, especialmente, ante las complejidades presentes en el panorama financiero.
Entre las complejidades, indicó, está la transición hacia un nuevo régimen de tasas de interés de Estados Unidos y las más altas de la última década, debido a que estas determinan el costo del dinero para inversores globales, como es el FAP.
Y añadió que la estrategia para lograr el rendimiento ante el escenario de transición de las tasas se debió a los cuatro portafolios individuales del FAP, porque el de efectivo, acciones renta fija y capital privado, rindieron 5,3%, 22,7%, 6,8% y 20,5%, respectivamente.
“Este sólido desempeño en medio de un entorno de tasas en ascenso subraya la fortaleza de nuestro enfoque de diversificación, otro ejemplo de nuestra adhesión a primeros principios. Sin diversificación, el FAP no hubiese presentado resultados óptimos”, enfatizó Santiago.
El Fondo de Ahorro Panamá (FAP) cuenta con un patrimonio de $1.416,1 millones al cierre de 2023, ganando $122,9 millones tras alcanzar el año anterior $1.293,3 millones, según un informe anual de la entidad.
En su reporte de resultados financieros, el FAP logró antes de costos una rentabilidad anual de 9,88%, una significativa mejora, ya que en 2022 se situó en -8,64%.
Además, el FAP tiene una utilidad acumulada desde 2012 de $419,1 millones. Estos recursos han servido de base para transferir al Tesoro Nacional un total de $236,5 millones en concepto de distribución de excedentes ($131,5 millones), y retiros para casos de emergencia nacional, en este caso relacionados a los efectos de la pandemia de la covid-19, por $105,0 millones, recoge el documento.
El FAP fue creado mediante la Ley 38 del 5 de junio de 2012, con la finalidad de establecer un fondo soberano que sirviera como mecanismo de estabilización para casos de emergencia y desaceleración económica, es así que sustituyó al Fondo Fiduciario para el Desarrollo, creado con la Ley 20 de 1995, que tenía el fin de promover inversiones públicas de desarrollo de país.
El año 2023 para el FAP se constituyó en la recuperación de un 95% de lo experimentado en 2022, y corrigieron la correlación atípica registrada en el año anterior, además de fortalecer su política de inversión conforme a los cambios introducidos en las directrices emitidas por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF). Esto potenció la eficiencia del portafolio estratégico del FAP, con la incorporación de bonos de alto rendimiento y una ampliación de los límites de inversión en activos alternativos.
Para 2024 la junta directiva del FAP espera robustecer el marco de gestión y estructura de los portafolios de inversión de efectivo, acciones, renta fija y capital privado. Para ello planifican la implementación de medidas para ampliar las inversiones alternativas y considerar otras clases de activos que constituyen elementos importantes de diversificación del riesgo y creación de valor para el portafolio del fondo soberano.
Sin embargo, el gobierno central le adeuda al FAP casi $1.000 millones, y la actual administración presentó una iniciativa para que le dispense el pago o aportes de los años pandémicos 2020, 2021 y 2022.
El proyecto 1141, que modifica la ley del FAP, para que sea discutido en esta administración que termina en junio próximo, el Ejecutivo tendría que llamar al Legislativo a secciones extraordinarias, debido a que el pleno de la Asamblea Nacional está en receso. No obstante, una vez se inicie el nuevo período constitucional habrá un nuevo gobierno, nueva junta directiva, así como diputados.
La propuesta presentada por Héctor Alexander, titular del MEF, busca una dispensa para que el gobierno central no aporte al FAP el dinero que por la Ley 5 de 2012 está obligado a transferir –casi $1.000 millones–, es decir, contemplando los años 2020, 2021 y 2022, justo cuando la pandemia de la covid-19 afectó las finanzas de Panamá y el mundo.
Según la Ley 38 del 5 de junio de 2012, el gobierno central debe pagarle al FAP por la vigencia del año 2020, unos $270 millones, para el año 2021 otros $282 millones y para el año 2022 –que se calcula con el año 2021– eran $386 millones.
En la propuesta también se compromete a transferir los recursos para cubrir los aportes pendientes de las vigencias fiscales 2018 y 2019.
En reiteradas ocasiones, Alexander ha dicho que el MEF no ha tocado el fondo, pero con la pandemia, la junta directiva aprobó dos. La propuesta del Ejecutivo modifica el artículo 3 de la Ley 38 de 2012, que crea el Fondo de Ahorro de Panamá y dicta otras disposiciones.
A juicio del ministro, esto “implica transferir al patrimonio del Fondo de Ahorro $200 millones todos los años a partir del año 2025 y $50 millones cada cinco años a partir del año 2034”.
Explicó que en 10 años se estará duplicando el patrimonio en más de $2.000 millones. Además, para fortalecer este cúmulo de recursos, según el titular del MEF, se elimina el artículo 3 de la Ley 38 de 2012, que se refiere a los rendimientos del FAP.
Abdiel Santiago, secretario del FAP, destacó en el informe anual que el rendimiento de 9,88% es el mejor retorno de la historia del fondo, logrando 107 puntos básicos. “Este hito, si bien laudable, conlleva el reconocimiento de la posibilidad de que resultados similares no sean fácilmente repetibles en un futuro de corto a mediano plazo”, dijo.
Santiago aboga a la importancia de ceñirse a los llamados primeros principios en materia de inversión para el FAP, ya que son guias básicas que enfatizan la creación de valor a largo plazo, evitando las distracciones a corto plazo, especialmente, ante las complejidades presentes en el panorama financiero.
Entre las complejidades, indicó, está la transición hacia un nuevo régimen de tasas de interés de Estados Unidos y las más altas de la última década, debido a que estas determinan el costo del dinero para inversores globales, como es el FAP.
Y añadió que la estrategia para lograr el rendimiento ante el escenario de transición de las tasas se debió a los cuatro portafolios individuales del FAP, porque el de efectivo, acciones renta fija y capital privado, rindieron 5,3%, 22,7%, 6,8% y 20,5%, respectivamente.
“Este sólido desempeño en medio de un entorno de tasas en ascenso subraya la fortaleza de nuestro enfoque de diversificación, otro ejemplo de nuestra adhesión a primeros principios. Sin diversificación, el FAP no hubiese presentado resultados óptimos”, enfatizó Santiago.