Economía

Directivo del FAP no descarta otra modificación en 2027

Imagen ilustrativa que muestra el área de la vía España. Román Dibulet | La Estrella de Panamá
Actualizado
  • 30/10/2024 00:00
Creado
  • 29/10/2024 18:27

Moisés Cohen, vicepresidente del fondo soberano, comentó que en los próximos tres años la junta directiva podría sentarse con el MEF para analizar modificaciones para mejorar, pero siempre que se analice la situación del país

En el año 2027, el Fondo de Ahorro de Panamá (FAP) podría ser reestructurado para que genere un mayor rendimiento, ya que su junta directiva está dispuesta a explorar junto con el titular del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) posibles ajustes a la norma, siempre que se analice la situación del país; así lo confirmó a este diario el vicepresidente del FAP, Moisés David Cohen Mugrabi.

Este 28 de octubre, el pleno de la Asamblea Nacional aprobó en tercer debate modificar el FAP, suspendiendo por los años 2024, 2025 y 2026 los aportes de excedentes del Canal de Panamá.

“La medida inicial era suprimir los aportes del Canal, de la ley”, precisó Cohen —quien lleva siete años en el cargo— pero en una reunión, tras la presentación del MEF en la Asamblea Nacional, la directiva decidió proponerle al titular del MEF, Felipe Chapman, y a su equipo de trabajo, suspender por tres años los aportes, que se reanudarían en 2027.

“En tres años estamos dispuestos a sentarnos con el MEF y analizar las mejoras, siempre que se analice la situación del país”, apuntó Cohen.

Por su parte, el MEF, a través de una nota de prensa, aclaró que la única modificación al FAP es la suspensión por tres años. “Manteniendo el resto de los aportes establecidos por ley, a fin de permitir que el Estado honre ampliamente los compromisos con proveedores y demás, fortaleciendo las finanzas públicas y así disminuir la necesidad de incurrir en instrumentos de deuda, para posteriormente retomar el ahorro”, precisó.

“Al FAP no hay que darle ni un solo centavo más hasta que se reestructure. En 2022 perdió más de $125 millones y, si vemos históricamente, en los últimos 10 años no ha rendido ni 3 %, o sea, rinde menos que los ahorros del Seguro en el Banco Nacional. Realmente, el FAP está dando muy poco y tiene gastos de $10 millones que no se justifican. Cuando era el Fondo Fiduciario para el Desarrollo rendía más que ahora como Fondo Soberano, por eso hay que reestructurarlo. No está rindiendo lo que debería. [La reestructuración] debe hacerse rápido, pero, mientras tanto, no hay que darle dinero”, sentenció el economista Felipe Argote, tras darse a conocer la aprobación de la suspensión de los aportes del Canal.

Creado mediante la Ley 38 del 5 de junio de 2012, el FAP sustituyó al Fondo Fiduciario para el Desarrollo, originado con la Ley 20 de 15 de mayo de 1995, con el objeto de promover inversiones públicas de desarrollo de país.

El Fondo Soberano tiene el objetivo de proteger a los ciudadanos en casos de emergencia, como desastres naturales o desaceleración económica, así como sucedió con la pandemia de Covid-19, cuando la junta directiva del FAP apoyó al Gobierno, transfiriendo $105 millones al Tesoro Nacional en 2020.

La junta directiva del FAP la integran siete directores nombrados por el Ejecutivo y ratificados por la Asamblea Nacional. Actualmente, la preside Mario Roberto Amaya Pineda, y Moisés David Cohen Mugrabi ocupa la vicepresidencia. A estos les acompañan los directores Anamae Maduro de Ardito Barletta, Jean-Pierre Leignadier, José Abbo, Fred Kardonski y Mayra Kam Rauschkolb. Y, este martes, 29 de octubre, la Comisión de Credenciales, Reglamento, Ética Parlamentaria y Asuntos Judiciales tenía en agenda considerar el nombramiento de Jaime Gilinski Bacal, como miembro de la junta directiva del FAP.

Este fondo soberano logró durante el primer trimestre de 2024, una rentabilidad bruta acumulada de 2,27 %; un excedente de ingresos sobre gastos acumulados por $30,2 millones, según su reporte de resultados financieros.

En cuanto a intereses y dividendos, generó $12,4 millones, y cuenta con activos netos (patrimonio) por el orden de los $1.446.4 millones, con base en los datos al 31 de marzo.

En abril pasado, el extitular del MEF, Héctor Alexander, buscó con un anteproyecto de ley la exoneración de los aportes de los años pandémicos, pero no lo logró, así que los pagos pendientes en la figura de pagarés fueron entregados a José Abbo, quien en ese momento ostentaba la presidencia. Los pagarés correspondientes a los aportes pendientes de los años 2021, 2022, 2023 y 2024 (por los años de acumulación 2020, 2021, 2022 y 2023) tienen un monto que asciende a $1.272,3 millones, y serán cancelados en cuotas semestrales en un lapso de 10 años, generando un rendimiento de 7,45 %.

El MEF informó que Alexander había aprobado que los pagos correspondientes a los periodos de acumulación 2018 y 2019 serían pagados en efectivo por $31,9 millones y con cargo a la vigencia fiscal 2024, mientras que el periodo de acumulación de aportes de 2024 será contemplado en el presupuesto 2025, de acuerdo con lo establecido en la ley, con lo cual debería regularizarse el flujo de aportes anuales.