Desaceleración y presión fiscal frenan el sistema bancario en el primer semestre 2024
- 12/09/2024 00:00
- 11/09/2024 19:39
El dato se desprende del Informe de Estabilidad Financiera del primer semestre del 2024, de la Superintendencia de Bancos de Panamá La Superintendencia de Bancos de Panamá (SBP) concluyó, en su Informe de Estabilidad Financiera del primer semestre 2024, que este período se ha caracterizado por importantes desafíos económicos.
Entre los retos, destacó la desaceleración del crecimiento económico, la creciente presión sobre la sostenibilidad fiscal y un entorno externo incierto que podría seguir impactando negativamente las perspectivas a corto y mediano plazo.
Los factores anteriores, advirtió la SBP, seguirán planteando serias amenazas para el sistema bancario, con posibles repercusiones en las condiciones operativas y financieras.
“La combinación de estos elementos podría restringir la expansión del crédito, al tiempo que aumenta el riesgo de un incremento en los activos improductivos en los próximos 12 meses, lo que podría debilitar aún más el dinamismo económico del país”, subrayó.
La SBP explicó que se reportó una desaceleración porque la actividad económica solamente creció un 2,1 % en el primer semestre de 2024 versus el 2,9 % reportado en el mismo período.
Indicó que este crecimiento estuvo impulsado por sectores como: transporte, almacenamiento, construcción, manufactura y comercio, de acuerdo con datos del Índice Mensual de Actividad Económica de 2024.
Según la SBP, esta desaceleración está muy relacionada con las proyecciones de crecimiento estimadas para el país este 2024, del 2,5 %, después del fuerte crecimiento observado en años anteriores. En 2023, el producto interno bruto (PIB) de Panamá creció 7,5 %; en 2022 aumentó 10,8 %, y en 2021 fue de 15,3 %.
“Esta ralentización se debe en gran medida al cierre de Minera Panamá, una mina de cobre que representaba aproximadamente el 5 % del PIB del país y el 7,5 % de sus exportaciones”, justificó la SBP, el ente de supervisión bancaria y fiduciaria.
Perspectivas La SBP estimó que la pérdida de ingresos fiscales por el menor desempeño podría equivaler al 0,6 % del PIB y que el déficit del Sector Público no Financiero, proyectó cerrará con un déficit fiscal en torno al 4 % del PIB.
“Un crecimiento económico más lento a corto plazo podría obstaculizar el desempeño fiscal de Panamá este año, lo que agregaría desafíos adicionales”, advirtió.
Crédito y liquidez La distribución del crédito por sectores, por su parte, reflejó un creciente peso del crédito a los hogares, lo que pone una presión significativa sobre el sistema económico, dado que el sector productivo, que normalmente sostiene la viabilidad financiera de las empresas, ha ido perdiendo participación crediticia frente al consumo. Sin embargo, el comportamiento crediticio sectorial mantuvo un desempeño estable
Con respecto a la liquidez, la SBP aseguró que el Sistema Bancario Nacional mantiene niveles adecuados de resiliencia para enfrentar flujos de salidas de depósitos en escenarios severos. Las cifras se mantuvieron en un 57 %, por encima del mínimo requerido del 30 %.
La Superintendencia de Bancos de Panamá (SBP) concluyó, en su Informe de Estabilidad Financiera del primer semestre 2024, que este período se ha caracterizado por importantes desafíos económicos.
Entre los retos, destacó la desaceleración del crecimiento económico, la creciente presión sobre la sostenibilidad fiscal y un entorno externo incierto que podría seguir impactando negativamente las perspectivas a corto y mediano plazo.
Los factores anteriores, advirtió la SBP, seguirán planteando serias amenazas para el sistema bancario, con posibles repercusiones en las condiciones operativas y financieras.
“La combinación de estos elementos podría restringir la expansión del crédito, al tiempo que aumenta el riesgo de un incremento en los activos improductivos en los próximos 12 meses, lo que podría debilitar aún más el dinamismo económico del país”, subrayó.
La SBP explicó que se reportó una desaceleración porque la actividad económica solamente creció un 2,1 % en el primer semestre de 2024 versus el 2,9 % reportado en el mismo período.
Indicó que este crecimiento estuvo impulsado por sectores como: transporte, almacenamiento, construcción, manufactura y comercio, de acuerdo con datos del Índice Mensual de Actividad Económica de 2024.
Según la SBP, esta desaceleración está muy relacionada con las proyecciones de crecimiento estimadas para el país este 2024, del 2,5 %, después del fuerte crecimiento observado en años anteriores. En 2023, el producto interno bruto (PIB) de Panamá creció 7,5 %; en 2022 aumentó 10,8 %, y en 2021 fue de 15,3 %.
“Esta ralentización se debe en gran medida al cierre de Minera Panamá, una mina de cobre que representaba aproximadamente el 5 % del PIB del país y el 7,5 % de sus exportaciones”, justificó la SBP, el ente de supervisión bancaria y fiduciaria.
La SBP estimó que la pérdida de ingresos fiscales por el menor desempeño podría equivaler al 0,6 % del PIB y que el déficit del Sector Público no Financiero, proyectó cerrará con un déficit fiscal en torno al 4 % del PIB.
“Un crecimiento económico más lento a corto plazo podría obstaculizar el desempeño fiscal de Panamá este año, lo que agregaría desafíos adicionales”, advirtió.
La distribución del crédito por sectores, por su parte, reflejó un creciente peso del crédito a los hogares, lo que pone una presión significativa sobre el sistema económico, dado que el sector productivo, que normalmente sostiene la viabilidad financiera de las empresas, ha ido perdiendo participación crediticia frente al consumo. Sin embargo, el comportamiento crediticio sectorial mantuvo un desempeño estable
Con respecto a la liquidez, la SBP aseguró que el Sistema Bancario Nacional mantiene niveles adecuados de resiliencia para enfrentar flujos de salidas de depósitos en escenarios severos. Las cifras se mantuvieron en un 57 %, por encima del mínimo requerido del 30 %.