Economía

Cciap: Proceso de cierre de mina de Cobre Panamá debe ser ordenado y autofinanciado

Entre esas acciones se encuentra la de determinar qué se va a hacer con las más de 130.000 toneladas de concentrado de cobre ROBERTO CISNEROS | AFP
Para que las políticas regulatorias de la minería tengan éxito, estas no pueden depender de banderas políticas. Cedida | CCIAP
Actualizado
  • 14/06/2024 00:00
Creado
  • 13/06/2024 18:10

El líder de la Cámara de Comercio, Industrias y Agricultura de Panamá, Juan Arias, señaló que el cierre de la mina ha quedado en un limbo, y que urge tomar una decisión sobre el concentrado de cobre, antes de que haya más riesgos ambientales

El proceso de cierre de la mina de cobre en Donoso, Colón, no tiene precedentes, así lo definió ayer el presidente de la Cámara de Comercio, Industrias y Agricultura de Panamá (Cciap), Juan Arias, durante el foro ‘Desafío minero en la región’.

“En ningún lugar del mundo se ha paralizado una mina de un día para otro. Todas las minas tienen un plan de cierre, ordenado y autofinanciado, que demora años, en vez de que sea de un día para otro”, dijo el empresario.

Arias consideró que el proceso de cierre de la mina ha quedado en un “limbo”, obligando a la empresa a tener que invertir en la preservación y mantenimiento de la mina, de manera “indefinida” hasta que se tomen decisiones al respecto, algo que “no es justo”.

“El cierre debe hacerse de forma ordenada y autofinanciada. La mina debe comenzar a producir para comenzar a pagar su propio cierre. El país está en números rojos y no se puede permitir financiar un cierre”, valoró.

El empresario alegó que para que el cierre de la mina se haga de manera correcta, todos los sectores de la sociedad van a tener que ceder, porque no hay una alternativa que sea idónea.

“Ya es momento de que el gobierno tome decisiones concretas al respecto, porque la inacción no es una opción”, añadió.

Entre estas acciones se encuentra la de determinar qué se va a hacer con las más de 130.000 toneladas de concentrado de cobre que están almacenadas en Donoso, desde finales de noviembre de 2023, y que representan un potencial peligro ambiental en la zona.

“Eso hay que sacarlo de Panamá y venderlo, para luego dejar las ganancias en un fideicomiso, hasta determinar a quién pertenece”, añadió el principal de la Cciap.

La idea de que el proceso de cierre de la mina de Cobre Panamá ha sido “inédito” es respaldada por el exministro de ambiente chileno Pablo Badenier, quien indicó a este medio que ordenar un proceso de cierre de forma tan rápida como lo hizo Panamá “no es muy común”. “No es muy habitual, porque son procesos que si se desean hacer bien, requieren de tiempo”, explicó.

Badenier agregó que en la experiencia de Chile, un país con una larga trayectoria minera, lo que les ha ayudado es tener tribunales especializados en materia ambiental, que sean independientes del poder ejecutivo para tener mayor “credibilidad” en la toma de decisiones.

El exministro dijo que el caso chileno ha tenido éxito debido a que se basa en políticas que trascienden los colores partidistas. “En Chile, aunque hemos tenido gobiernos con distintos signos políticos, hay temas generales en los que hemos logrado un consenso estable, algo que representa un desafío para los sistemas políticos”, destacó.

La abogada Wendy Ancieta, coordinadora política del programa de Política y Gobernanza Ambiental, de la Sociedad Peruana de Derecho Ambiental (SPDA), puntualizó que para lograr tener instituciones y legislaciones ambientales sólidas, que permitan el desarrollo sostenible de actividades como la minería, es fundamental que estos cuenten con independencia y un presupuesto adecuado.

“A esto hay que sumarle un sistema regulatorio sólido, que cuente con una normativa clara y predecible, para que cualquier tipo de industria se desarrolle cumpliendo estándares ambientales que protejan el medio ambiente y garanticen el derecho de los ciudadanos de vivir en un ambiente sano”, resaltó la especialista.

Ancieta recalcó la importancia de que las políticas públicas logren tener una visión de país, más allá de una partidista. “Muchas veces las políticas ambientales se vuelven víctima de una agenda electoral, haciendo que cambien cuando las prioridades del gobierno en turno lo hagan”, valoró.

Otro punto relevante es la necesidad de crear confianza en las instituciones que regulan los temas ambientales. “La confianza tarda en ganarse, pero se pierde en un solo minuto. Nosotros en el Perú hemos construido esa confianza, basados en la preponderancia de instituciones independientes, sin intereses partidistas”, recalcó la abogada.

Desde el SPDA mencionaron que algo que también añade credibilidad es el no flexibilizar de forma arbitraria los marcos de cumplimiento ambiental. “Eso le quita legitimidad a los Estados, porque no muestran voluntad de cumplir con sus políticas”, analizó.

La jurista peruana también hizo hincapié en la necesidad de limpiar la corrupción de los gobiernos. “La corrupción es un cáncer que corroe a las instituciones locales, de allí que sea fundamental que las políticas ambientales sean lo suficientemente sólidas como para enfrentar los incumplimientos, pese a la presencia de actos de corrupción”, agregó.

Ancieta consideró que también es importante que la ciudadanía se mantenga bien informada sobre el tema, para poder solicitar al Estado, de forma oportuna, rendición de cuentas sobre las decisiones ambientales y políticas que toma.

La falta de información es precisamente lo que, a criterio del presidente del Cciap, hizo que el tema minero generase tanto conflicto social en Panamá.

“El proceso en el que se aprobó el contrato minero no fue el correcto, pudo haberse hecho de manera más explicativa, prolongada e inclusiva”, ponderó Arias, quien cree que a la sociedad panameña le faltó “educarse más sobre la minería” y que el gobierno tuvo que consultar y comunicar más a detalle todo el proceso.

“Entre más se explique algo, más se entiende y más confianza se genera, pero si apruebas un contrato de esa magnitud, de manera apresurada, el desenlace no va a ser positivo, algo que quedó demostrado“, dijo el empresario.

En consecuencia, el país perdió una inversión que hubiese ayudado en un momento en el que los indicadores económicos del país no son muy positivos y hay que debatir cómo salvar la Caja de Seguro Social. La mina representa un 4% del producto interno bruto.

En el año 2023, las finanzas públicas fueron impactadas adversamente por el cese del proyecto Cobre Panamá, debido a que la economía hubiera crecido 9,0% en vez de 7,3%, según las cifras del Ministerio de Economía y Finanzas.

El exministro chileno Badenier declaró que es normal que el tema minero ocasione desconfianza en la ciudadanía, porque a simple vista puede parecer que este solo contribuye a destruir el ambiente, algo que es falso, ya que minerales críticos como el cobre, el litio y el cobalto son fundamentales en el proceso de transición energética.

“Yo sé que parece contra intuitivo, pero si queremos electrificar nuestro transporte y otros procesos, para dejar de ser dependientes de los combustibles fósiles, la minería es tremendamente importante”, ponderó.

El exfuncionario resaltó que las fuentes de energía renovables ocupan “muchos más minerales” que los combustibles tradicionales, por lo que si se desea preservar el ambiente, es vital entender que la minería hace falta.

“Nuestros patrones de consumo cada vez son más demandantes. Todos quieren tener la tecnología más actualizada al alcance de la mano, y para eso hay que apostar por la minería”, concluyó Badenier.