Álvarez de Soto sobre apelación ante la OMC: ‘Panamá no está planteando una diplomacia pragmática y realista’
- 30/01/2025 14:00
- 30/01/2025 13:57
El excanciller Álvarez de Soto es de la opinión de que el país debe ampliar su relación con Costa Rica y aprovechar de su experiencia y adherirse a la OCDE La apelación al laudo arbitral que presentó Panamá ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) llevó al excanciller panameño, Francisco Álvarez de Soto a emitir su opinión del tema, ya que el país en lugar de mantener medidas proteccionistas debería buscar un mecanismo conciliador y focalizar su objetivo en tomar la experiencia de Costa Rica para adherirse a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
“La decisión tomada por las autoridades panameñas de apelar, ante el Órgano de Apelaciones de la OMC, el fallo proferido en contra de las medidas adoptadas por Panamá en perjuicio de Costa Rica, no creo que obra en el mejor interés de Panamá”, dijo Álvarez de Soto, quien entre 2009-2011 fue viceministro de Negociaciones Comerciales Internacionales del Ministerio de Comercio e Industrias (MICI).
“El fallo emitido por el OSD rechaza todas las medidas proteccionistas adoptadas por la administración del entonces presidente, Laurentino Cortizo para frenar importaciones costarricenses. Las mismas eran, claramente, barreras no arancelarias al comercio que no contaban, ni cuentan, con sustento legal ni técnico y así se ha visto”, comentó.
“Sabedores que el Órgano de Apelaciones de la OMC se encuentra paralizado desde hace años, anunciar una apelación significa, de facto, que Panamá busca dilatar el desmantelamiento de las medidas que, de otra forma, debería revocar. Costa Rica, en un gesto, a mi modo de ver, conciliador, ofreció a Panamá una alternativa arbitral para que se pudiera realizar una revisión de dicho fallo de forma tal que Panamá pudiera presentar sus argumentos en contra de los hallazgos del panel del OSD. Sin embargo, Panamá no aceptó dicha alternativa generando con ello un evidente malestar entre las autoridades y sector exportador costarricense que no hará más que enturbiar las relaciones económicas bilaterales entre dos naciones vecinas que, juntas, ganarían mucho más que enfrentadas”, aseveró.
“En mi humilde opinión, este es un caso en el que Panamá no está planteando una diplomacia pragmática y realista. En estos momentos, el país enfrenta varios retos internacionales de importancia, entre los que destaca la problemática de las mal llamadas ‘listas discriminatorias’. Estas listas en las que se incluye a Panamá emanan, de una forma u otra, del seno de la OECD-OCDE y, como he planteado en reiteradas ocasiones, es ahí donde se debería romper el ‘nudo gordiano’ que las ata. Pareciera que en Panamá se olvidan que Costa Rica es un estado miembro de la OCDE particularmente activo, hasta el punto de haber alcanzado la presidencia de la cumbre de ministros de esa organización este año. Es evidente que una relación bilateral amplia, constructiva y en positivo con Costa Rica permitirá contar con su experiencia y apoyo en el seno de la OCDE para buscar la solución final a las listas discriminatorias que pasa, insisto, por lanzar el proceso de adhesión a la OCDE, tome el tiempo que tome”.
“En consecuencia, mi humilde recomendación a las autoridades comerciales panameñas sería meditar, con atención, la decisión de apelar el fallo de la OMC a espaldas de un acuerdo amistoso con Costa Rica para tal fin y evitar así que nuestro vecino y más importante aliado político y económico en Centroamérica, —no lo olvidemos— se vea forzado a tomar acciones y adoptar posiciones en defensa de sus intereses que no surtirán efecto solo en el foro de la OMC sino en otros, como la OCDE, donde Costa Rica se ‘sienta a una mesa donde, lamentablemente, Panamá es hoy por hoy, parte del menú’. Seamos pragmáticos e inteligentes!”, concluyó Álvarez de Soto en su escrito por Linkedin.
La apelación al laudo arbitral que presentó Panamá ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) llevó al excanciller panameño, Francisco Álvarez de Soto a emitir su opinión del tema, ya que el país en lugar de mantener medidas proteccionistas debería buscar un mecanismo conciliador y focalizar su objetivo en tomar la experiencia de Costa Rica para adherirse a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
“La decisión tomada por las autoridades panameñas de apelar, ante el Órgano de Apelaciones de la OMC, el fallo proferido en contra de las medidas adoptadas por Panamá en perjuicio de Costa Rica, no creo que obra en el mejor interés de Panamá”, dijo Álvarez de Soto, quien entre 2009-2011 fue viceministro de Negociaciones Comerciales Internacionales del Ministerio de Comercio e Industrias (MICI).
“El fallo emitido por el OSD rechaza todas las medidas proteccionistas adoptadas por la administración del entonces presidente, Laurentino Cortizo para frenar importaciones costarricenses. Las mismas eran, claramente, barreras no arancelarias al comercio que no contaban, ni cuentan, con sustento legal ni técnico y así se ha visto”, comentó.
“Sabedores que el Órgano de Apelaciones de la OMC se encuentra paralizado desde hace años, anunciar una apelación significa, de facto, que Panamá busca dilatar el desmantelamiento de las medidas que, de otra forma, debería revocar. Costa Rica, en un gesto, a mi modo de ver, conciliador, ofreció a Panamá una alternativa arbitral para que se pudiera realizar una revisión de dicho fallo de forma tal que Panamá pudiera presentar sus argumentos en contra de los hallazgos del panel del OSD. Sin embargo, Panamá no aceptó dicha alternativa generando con ello un evidente malestar entre las autoridades y sector exportador costarricense que no hará más que enturbiar las relaciones económicas bilaterales entre dos naciones vecinas que, juntas, ganarían mucho más que enfrentadas”, aseveró.
“En mi humilde opinión, este es un caso en el que Panamá no está planteando una diplomacia pragmática y realista. En estos momentos, el país enfrenta varios retos internacionales de importancia, entre los que destaca la problemática de las mal llamadas ‘listas discriminatorias’. Estas listas en las que se incluye a Panamá emanan, de una forma u otra, del seno de la OECD-OCDE y, como he planteado en reiteradas ocasiones, es ahí donde se debería romper el ‘nudo gordiano’ que las ata. Pareciera que en Panamá se olvidan que Costa Rica es un estado miembro de la OCDE particularmente activo, hasta el punto de haber alcanzado la presidencia de la cumbre de ministros de esa organización este año. Es evidente que una relación bilateral amplia, constructiva y en positivo con Costa Rica permitirá contar con su experiencia y apoyo en el seno de la OCDE para buscar la solución final a las listas discriminatorias que pasa, insisto, por lanzar el proceso de adhesión a la OCDE, tome el tiempo que tome”.
“En consecuencia, mi humilde recomendación a las autoridades comerciales panameñas sería meditar, con atención, la decisión de apelar el fallo de la OMC a espaldas de un acuerdo amistoso con Costa Rica para tal fin y evitar así que nuestro vecino y más importante aliado político y económico en Centroamérica, —no lo olvidemos— se vea forzado a tomar acciones y adoptar posiciones en defensa de sus intereses que no surtirán efecto solo en el foro de la OMC sino en otros, como la OCDE, donde Costa Rica se ‘sienta a una mesa donde, lamentablemente, Panamá es hoy por hoy, parte del menú’. Seamos pragmáticos e inteligentes!”, concluyó Álvarez de Soto en su escrito por Linkedin.