Panamá sufrió, pero cumplió en su último partido del año
- 19/11/2024 12:53
- 19/11/2024 11:24
El seleccionado panameño disputó su último partido de 2024 ante una Costa Rica que hizo su trabajo y complicó los últimos 20 minutos del encuentro Misión cumplida. Panamá se instaló por tercera vez consecutiva en el Final Four de la Liga de Naciones de la Concacaf y consiguió su boleto directo a la fase de grupos de la Copa Oro 2025.
Este partido decidía la ruta de acción de la selección para el 2025, año en la que tendrán partidos de hasta tres competiciones diferentes (Liga de Naciones, Copa Oro y eliminatorias al Mundial 2026).
A pesar de haber conseguido el ansiado boleto, gracias a la victoria en la ida 1-0, lo cierto es que para el partido de vuelta, Costa Rica identificó los flecos de los panameños para hacerles daño y se quedaron a un gol de dejar a Panamá fuera del Final Four, obligándolos a jugar una ronda previa para ingresar a la Copa Oro.
El estadio Rommel Fernández fue testigo de como más de 20 mil almas presenciaron este empate 2-2, apoyando a los suyos a todo pulmón, pero las cosas empezaron de una manera poco ortodoxa.
Ambos equipos, con sistemas parecidos, utilizaron línea de tres atrás en ofensiva con carrileros profundos e intentaron poblar la mitad de la cancha para que la pelota rodara en gran medida por ambas bandas.
Los panameños sabían que tenían la ventaja en el marcador, pero una imprudencia de Edgardo Fariña apenas a los cuatro minutos del encuentro puso a esas más de 20 mil almas en el estadio a sufrir, ya que el defensor cometió una falta dentro del área, luego de haber empezado a dominar el esférico dentro del área.
Una decisión del jugador del FK Khimki ruso poco entendible, pero así sucedieron las cosas. Por suerte, Panamá cuenta bajo los tres palos con porteros de mucha calidad y Orlando Mosquera fue uno de los héroes de la noche al atajarle el penal a Warren Madrigal.
Hablando de este último, también fue un poco sorpresivo como un jugador de tan solo 20 años haya tomado tal responsabilidad de ejecutar el tiro desde los 12 pasos, a sabiendas de la importancia del disparo penal.
Madrigal, quien llegó esta temporada al Valencia B (juega en la tercera división de España), tiene más de 20 goles a nivel profesional en sus espaldas, pero en la cancha habían otros jugadores más experimentados como Manfred Ugalde, Brandon Aguilera, o inclusive el propio defensor Francisco Calvo.
Se consolida la dupla Carrasquilla-Martínez
El relevo de Aníbal Godoy ya es una completa realidad. Por mucho tiempo existió el temor de no encontrar a tiempo un relevo para el capitán de la selección de Panamá, sin embargo, el tiempo le ha dado la razón a Cristian Martínez, quien ha crecido exponencialmente dentro del seno del equipo y en la cancha lo ha demostrado.
El Fulo Martínez ha obtenido su “título de graduación” en estos dos duelos frente a Costa Rica, formando una dupla bastante sólida junto con Adalberto Carrasquilla.
En varios instantes del partido se vio al Fulo tomando la responsabilidad de romper la línea y unirse al ataque, mientras que Coco hacía de las labores defensivas. Incluso, entre los dos, era Martínez quien salía a la presión cuando los defensores de Costa Rica intentaban salir jugando con sus mediocampistas, y Carrasquilla se quedaba un poco más retrasado.
El único detalle está en que Thomas Christiansen, técnico de la selección de Panamá, le ha pedido a Carrasquilla que toque más el área y el Fulo es un jugador con características en ofensiva, por lo que la comunicación siempre será el aspecto más valioso de ambos jugadores para no desajustar al equipo y dejarlo mal parado.
Los relevos fueron sustanciales entre ambos jugadores para que esto último mencionado no ocurriese, todo dependía de donde estaba el balón y eso lo entendieron a la perfección Martínez y Carrasquilla.
Panamá se descompensó en los goles de Costa Rica
Los goles de los ticos cayeron como balde de agua fría. Si no fuera por el VAR y el penal atajado por Mosquera, estaríamos hablando de un partido abultado de goles a favor de los ticos.
En los minutos siguientes que Costa Rica anotaba, se notaba a un Panamá que estaba sufriendo las secuelas del gol en contra. Desatenciones, imprecisiones en los pases, posesión del balón para Costa Rica...hasta que después de ciertos minutos, los panameños volvían a tomar el esférico y empezaban a jugar.
Los últimos 10 minutos del partido si podrían decirse que fueron una pesadilla para Panamá. Con 10 jugadores sobre el campo por la expulsión de Fidel Escobar, los panameños sufrieron, pero no como antes que los 10 hombres estaban atrás protegiendo la portería. Cuando Panamá recuperaba el balón intentaban ir al contragolpe de manera ordenada, salían con mucha seguridad con pases buenos y obligaban a Costa Rica a equivocarse como pasó en los minutos finales.
La sólida presentación del ‘Coto’
Otro de los ‘graduados’, pero esta vez de un doctorado fue José Coto Córdoba. El defensor del Norwich City estuvo en prácticamente todas las acciones defensivas del equipo, aportando mucha seguridad en la zona de atrás, cortando balones y sobre todo con su fuerza física pudo ganar varios balones aéreos.
De hecho, de su cabeza sale la asistencia para el gol de César Blackman. Sus números no mientes, fue el jugador con más pases con 58 (52 de ellos exitosos), ganó una acción defensiva, ganó los cuatro duelos aéreos que tuvo y ganó el único duelo terrestre que tuvo en el juego.
Pero no solo fue Córdoba. Murillo con sus pasadas en ofensiva, Blackman con su anotación, Fariña y Escobar (antes de la expulsión) cuajaron un buen partido en todas las líneas.
Ahora con el último compromiso del año acabado y con los objetivos cumplidos, Panamá tendrá poco más de tres meses para preparar el Final Four de la Liga de Naciones 2024-2025 a disputarse en Los Ángeles, Estados Unidos, a finales de marzo del 2025.
Misión cumplida. Panamá se instaló por tercera vez consecutiva en el Final Four de la Liga de Naciones de la Concacaf y consiguió su boleto directo a la fase de grupos de la Copa Oro 2025.
Este partido decidía la ruta de acción de la selección para el 2025, año en la que tendrán partidos de hasta tres competiciones diferentes (Liga de Naciones, Copa Oro y eliminatorias al Mundial 2026).
A pesar de haber conseguido el ansiado boleto, gracias a la victoria en la ida 1-0, lo cierto es que para el partido de vuelta, Costa Rica identificó los flecos de los panameños para hacerles daño y se quedaron a un gol de dejar a Panamá fuera del Final Four, obligándolos a jugar una ronda previa para ingresar a la Copa Oro.
El estadio Rommel Fernández fue testigo de como más de 20 mil almas presenciaron este empate 2-2, apoyando a los suyos a todo pulmón, pero las cosas empezaron de una manera poco ortodoxa.
Ambos equipos, con sistemas parecidos, utilizaron línea de tres atrás en ofensiva con carrileros profundos e intentaron poblar la mitad de la cancha para que la pelota rodara en gran medida por ambas bandas.
Los panameños sabían que tenían la ventaja en el marcador, pero una imprudencia de Edgardo Fariña apenas a los cuatro minutos del encuentro puso a esas más de 20 mil almas en el estadio a sufrir, ya que el defensor cometió una falta dentro del área, luego de haber empezado a dominar el esférico dentro del área.
Una decisión del jugador del FK Khimki ruso poco entendible, pero así sucedieron las cosas. Por suerte, Panamá cuenta bajo los tres palos con porteros de mucha calidad y Orlando Mosquera fue uno de los héroes de la noche al atajarle el penal a Warren Madrigal.
Hablando de este último, también fue un poco sorpresivo como un jugador de tan solo 20 años haya tomado tal responsabilidad de ejecutar el tiro desde los 12 pasos, a sabiendas de la importancia del disparo penal.
Madrigal, quien llegó esta temporada al Valencia B (juega en la tercera división de España), tiene más de 20 goles a nivel profesional en sus espaldas, pero en la cancha habían otros jugadores más experimentados como Manfred Ugalde, Brandon Aguilera, o inclusive el propio defensor Francisco Calvo.
Se consolida la dupla Carrasquilla-Martínez
El relevo de Aníbal Godoy ya es una completa realidad. Por mucho tiempo existió el temor de no encontrar a tiempo un relevo para el capitán de la selección de Panamá, sin embargo, el tiempo le ha dado la razón a Cristian Martínez, quien ha crecido exponencialmente dentro del seno del equipo y en la cancha lo ha demostrado.
El Fulo Martínez ha obtenido su “título de graduación” en estos dos duelos frente a Costa Rica, formando una dupla bastante sólida junto con Adalberto Carrasquilla.
En varios instantes del partido se vio al Fulo tomando la responsabilidad de romper la línea y unirse al ataque, mientras que Coco hacía de las labores defensivas. Incluso, entre los dos, era Martínez quien salía a la presión cuando los defensores de Costa Rica intentaban salir jugando con sus mediocampistas, y Carrasquilla se quedaba un poco más retrasado.
El único detalle está en que Thomas Christiansen, técnico de la selección de Panamá, le ha pedido a Carrasquilla que toque más el área y el Fulo es un jugador con características en ofensiva, por lo que la comunicación siempre será el aspecto más valioso de ambos jugadores para no desajustar al equipo y dejarlo mal parado.
Los relevos fueron sustanciales entre ambos jugadores para que esto último mencionado no ocurriese, todo dependía de donde estaba el balón y eso lo entendieron a la perfección Martínez y Carrasquilla.
Panamá se descompensó en los goles de Costa Rica
Los goles de los ticos cayeron como balde de agua fría. Si no fuera por el VAR y el penal atajado por Mosquera, estaríamos hablando de un partido abultado de goles a favor de los ticos.
En los minutos siguientes que Costa Rica anotaba, se notaba a un Panamá que estaba sufriendo las secuelas del gol en contra. Desatenciones, imprecisiones en los pases, posesión del balón para Costa Rica...hasta que después de ciertos minutos, los panameños volvían a tomar el esférico y empezaban a jugar.
Los últimos 10 minutos del partido si podrían decirse que fueron una pesadilla para Panamá. Con 10 jugadores sobre el campo por la expulsión de Fidel Escobar, los panameños sufrieron, pero no como antes que los 10 hombres estaban atrás protegiendo la portería. Cuando Panamá recuperaba el balón intentaban ir al contragolpe de manera ordenada, salían con mucha seguridad con pases buenos y obligaban a Costa Rica a equivocarse como pasó en los minutos finales.
La sólida presentación del ‘Coto’
Otro de los ‘graduados’, pero esta vez de un doctorado fue José Coto Córdoba. El defensor del Norwich City estuvo en prácticamente todas las acciones defensivas del equipo, aportando mucha seguridad en la zona de atrás, cortando balones y sobre todo con su fuerza física pudo ganar varios balones aéreos.
De hecho, de su cabeza sale la asistencia para el gol de César Blackman. Sus números no mientes, fue el jugador con más pases con 58 (52 de ellos exitosos), ganó una acción defensiva, ganó los cuatro duelos aéreos que tuvo y ganó el único duelo terrestre que tuvo en el juego.
Pero no solo fue Córdoba. Murillo con sus pasadas en ofensiva, Blackman con su anotación, Fariña y Escobar (antes de la expulsión) cuajaron un buen partido en todas las líneas.
Ahora con el último compromiso del año acabado y con los objetivos cumplidos, Panamá tendrá poco más de tres meses para preparar el Final Four de la Liga de Naciones 2024-2025 a disputarse en Los Ángeles, Estados Unidos, a finales de marzo del 2025.